Mensaje
por Juan M. Parada C. » Lun Ago 11, 2014 12:39 am
Gracias de nuevo por el pase,mi estimado heer von Thoma,para lanzar otro reto.Voy a describir el comienzo de una película bélica que ví hace muchos años atrás que me quedo grabado este singular parlamento.Así que pongan mucha atención,mis queridos amigos cinéfilos,que empieza así:
Llega un taxi a la reja principal del puerto de San Francisco a muy entradas horas de la noche y baja un oficial de la marina.Después de despedirse de su esposa y de su pequeño hijo,con todo el afecto del caso,se dirige a la casilla de vigilancia del puerto y una vez que se ha identificado se dispone a embarcarse a su unidad de transporte de combate que lo llevaría al frente del Pacífico.Mientras se dirigía hacia su embarcación,en el que apenas estaba iluminado el sendero por donde transitaba pero con gran actividad de los obreros portuarios asignados al horario nocturno,se topa con un nutrido grupo de estos hombres que han terminado ya su turno que cruza a lo largo de ellos.Mira de reojo,como si estuviese inspeccionándolos en una especie de revista,su aspecto cansado pero satisfecho de la jornada realizada ya que observa,de paso, que es a su nave la que acaban de poner los últimos retoques operativos para poder zarpar en pocas horas.El oficial,con gran emoción,se fija como han dejado de reluciente su embarcación con mucho esmero estos trabajadores y,sin darse cuenta,uno de ellos se le acerca sigilosamente y le dice:
-Buenas noches,señor.¿Es usted el capitán... verdad?
El oficial aludido,con algo de sorpresa,observa a este menudo y viejo trabajador que empuña sus herramientas grasosas y de aspecto cansado,al cual le contesta:
-Buenas noches,para usted también,amigo.Pero no soy el capitán de esta nave soy el segundo a bordo.¿Mucho trabajo estos últimos días... no?
El viejo obrero,mientras bajaba sus herramientas,le dice:
-Si,señor.Hemos tenido mucha actividad estos últimos meses para tener listas todas estas naves que se necesitan en el frente de batalla.Por un momento-agrega este hombre-pensé que ud. era el capitán ya que lo recuerdo durante la botadura de esta nave hace unos siete meses atrás.
El oficial,que comienza a recordar esos momentos aludidos por este hombre,dice como respuesta:
-Es cierto.Estaba de permiso en esos momentos y me invitaron los de la comisión de ensamblaje de la compañía que sirve a la armada para presenciar la botadura de esta nave que ahora voy a embarcarme en ella muy pronto.
Los dos hombres se acercan al manparo de la nave y el viejo,con una mirada un tanto especial, le dice al oficial:
-¿Quiere escuchar algo hermoso? Ponga la oreja en estas láminas que recubren su próxima nave y escuche con atención.
El oficial,que ya sentía una especial simpatía por este singular y desgarbado personaje,acerca su oido a las planchas blindadas que recubren su barco y escucha los murmullos del mar y los ecos de las soldaduras que han trazado los obreros hace unas pocas horas.Escucha que hay una cierta melodía que se traza con gran armonía,que no puede describir sino sentir,y dice a este hombre:
-Es cierto.Es como si estuviese vivo...¿No?
El viejo,con una gran sonrisa desplegada,le dice:
-¿Sabe qué? Le diré un secreto.Lo llevo muy adentro de mi corazón,ya que todos los que hemos trabajado en este barco lo sentimos así por igual, el cual es que este barco está bendito y nada y nadie lo va a poder hundir.Pero lo más importante es que ud. será el capitán y lo traerá de regreso a casa.
El oficial,con cierta incredulidad,mira el barco de extremo a extremo y cierra los ojos por un instante y se dispone a decirle de nuevo a este viejo trabajador que él es apenas el segundo oficial en el mando pero nota que ya se ha ido este misterioso hombre,que apenas distingue al final del portón del muelle.
¿Cuál es el título de la película que he descrito? Buena suerte para todos los amigos cinéfilos.
Saludos y bendiciones a granel para todos.
"¡Ay,señor! Tú sabes lo ocupado que tendré que estar hoy.Si acaso te olvido por un instante,tu no te olvides de mi". Sir Jacob Astley antes de la batalla de Edge Hill el 23 de octubre del año de nuestro señor de 1642