Mensaje
por David L » Jue Sep 24, 2009 3:58 am
Este es un libro del que había leído siempre muy buenas críticas, un clásico, uno de esos libros que todo buen aficionado a la IIGM debería leer. Bien, como a mí me gusta siempre leer y aprovechar los buenos consejos que los grandes aficionados al tema suelen escribir por aquí decidí en cuanto pude hacerme con este libro. En concreto, yo dispongo de la edición en tapa dura publicada por Ariel, 2008.
El autor hace un recorrido desde el desembarco de Normandía hasta la llegada a París, fin del trayecto de este trabajo. Un primer capítulo nos acercará a las figuras más importantes relacionadas con el Día D:Stilwel, Wedemeyer, Eisenhower, Molotov, Marshall, Brooke, Montgomery y Rommel. Estos siete militares más un civil formaron la base que llevó a la Victoria, desarrollando sobre el terreno lo que los políticos habían planificado desde hacia ya más de un año en los despachos. Para Keegan, es indispensable poder conocer y ofrecer al lector cómo afrontaron estos protagonistas el desafío tan grande que suponía el desembarco de Normandía. Una vez que ya nos hemos situado con la descripción de estos grandes hombres, pasamos directamente a la acción pura y dura. Las acciones aerotransportadas de la 82ª y la 101ª son descritas de una manera magistral, combinando relatos personales con la narración de los hechos propiamente dichos. Uno siente, conforme va leyendo, el tremendo valor de aquellas “águilas” que se lanzaron al vacío desconociendo lo que les esperaba en tierra firme. Más adelante, y esto sí que me ha sorprendido, dedica un capítulo entero a describir el desembarco y posterior despliegue de las fuerzas canadienses, más que nada porque estamos muy acostumbrados a pensar solamente en británicos y estadounidenses cuando se habla de Normandía. La toma de Caen es de lo mejor del libro, prácticamente es el eje central del mismo, es en estos capítulos donde uno puede disfrutar de la gran virtud narrativa del autor, una cualidad que hace que te enganches a la tremenda acción que se desarrolló en los enormes setos de la Normandía. Vibrantes combates de carros, inacabables y terribles bombardeos de la aviación Aliada, y una infantería impotente ante esta manta de bombas llegadas desde el cielo.
La intervención polaca también tiene su protagonismo aquí, parece un guiño del autor hacia muchos de esos soldados que 5 años antes habían caído en las llanuras polacas aplastados por la Werhmacht. La posibilidad de intercambiar los papeles, como bien comenta Keegan, se presentó en Normandía. La orden de avanzar sobre Chambois generó en los polacos una alegría difícil de entender por el resto de aliados, los cuales no recibían con tanta efusividad las arengas obligadas para iniciar los ataques..
Por último, como colofón de este magnífico libro, se describe cómo y de qué manera se decidió entrar en París. Los detalles de las divergencias entre los miembros de la resistencia francesa, el papel del jefe de la Nueve, general Leclecr, la posición predominante de De Gaulle en toda esta historia y, la desdichada situación del otra hora vencedor, el General de Cuerpo de Ejército von Choltitz.
Un gran libro, una excelente narración que engancha desde la primera página, uno de esos trabajos a los que se le puede calificar con una gran nota. Seguro que a los que no lo hayan leído y se decidan a hacerlo no les va a defraudar.
Un saludo.
Os dieron a elegir entre el deshonor y la guerra... elegisteis el deshonor y tendréis la guerra.
Winston Churchill a Chamberlain.