establecieron tupidas barreras de globos, para detenerlas
Eran llamados globos de presa, que no eran más que globos tendidos en el aire con un cable de acero enganchado al suelo, siendo posicionados en los lugares que mas apropiados creían de la llegada de la bombas volantes. De los 2.000 globos utilizados, 630 fueron inutilizados por tormentas y relámpagos, solo consiguieron derribar 230 misiles. Los alemanes enterados de este metodo, implantaron en sus V1 una especie de cortador de cable en sus alas, con grandes resultados.
El piloto situaba la punta de ala de su caza bajo la de la bomba volante, y cuando se encontraba en esta posición hacía alabear bruscamente a su caza, empujando hacia arriba el ala del misil. Como éste no contaba con alerones con los que contrarrestar este tipo de perturbaciones, el misil entraba en un alabeo-guiñada cada vez más cerrado, entrando en pérdida y finalmente estrellándose contra el suelo
El famoso toque, no hacia otra cosa que caer su piloto automático giroscópico, perdiendo el rumbo y finalmente estrellarse a los pocos kilómetros.
Por lo general, las V1 eran aparentemente faciles de derribar, al emplear de manera constante la velocidad y el rumbo hacia el objetivo, el sueño de toda AAA
Estudios Británicos posteriores a la guerra, revelaron que la V1, costo mas a los defensores que a los propios atacantes. De cada dólar que se gastaban los alemanes en la producción, los británicos se gastaban 3,8 dólares en sus intentos de anularlas. Se pueden contar los bombardeos sobre sus rampas de lanzamiento, complejos industriales, toda la AAA y las 21 escuadrillas aereas rampeando por el canal, que poseian como unico fin derribar las V1. La V1 tenia un costo estimado en 125 libras, mientras que la V2 en 6.000
Cuando a finales de 1941 se realizaron con exito unas pruebas de la V1 en Peenemunde, en seguida se reinicio la controversia por la situacion de prioridad respecto a la V2. El departamento aereo deseaba desde luego que se impulsara la produccion del V1, mientras que el ejercito queria que tubiera prioridad su propio V2. Los meritos de ambos aparatos eran muy similares. La V1 era de produccion barata y facil (de hecho se diseño para este fin), costaria unos 1.500 marcos, mientras que la V2 costaria 75.000 marcos. La V1 solo gastaba 280 horas de trabajo de mano de obra, mientras la V2 necesitaba 13.000. Por otra parte la V2 era supersonica y aunque tenia una carga util del mismo tamaño, dentro de los limites aproximados, producia algo mas de daño a causa de la onda de choque de alta presion producida por su velocidad de llegada a Mach4.
La V1 era indesviable, no estaba guiada por radio, y por lo tanto resultaba imposible para los aliados encontrar un medio de abatirla por interferencia de un sistema electronico de control. Pero, por otro lado, la V2 era muchisimo mas rapida, la velocidad comparativamente casi nula de la V1 queria decir que podia ser abatida a disparos o, como en realidad sucedio en muchisimos casos, ser descontrolada por el ala de un avion. Tambien podia en un principio ser atrapada por los cables de los globos cautivos, que el V2 estaba en condiciones de evitar. La V1 estaba impulsada por gasolina barata, de pocos grados, que podia ser extraida de los lechos de lignito de Alemania, mientras que la V2 necesitaba alcohol y oxigeno liquido. Un factor marcaba la diferencia, el propagandistico, algo que la V1 jamas podria igualar. La V2 era un asombroso proyectil que marcaba una nueva era, un arma de guerra sin precedentes, era un simbolo, un enorme logro de la ciencia, tecnologia e ingieneria alemana, y esto era cierto. No es extraño por consiguiente que existiera una dura pugna sobre los respectivos meritos de ambos proyectos.