Clase S o Srednyaya
Esta clase fue apodada "Stalinets" (no confundir con el submarino de la clase L, el L-2 Stalinets de 1931). Resultó ser la más exitosa de todos los submarinos soviéticos, sumando un total de 82.770 toneladas de mercantes y siete barcos de guerra enemigos hundidos, una tercera parte de todo el tonelaje hundido por los sumergibles de la URSS durante la guerra.
Esta clase de submarinos fue el resultado de la colaboración con los ingenieros alemanes. Así, a comienzos de los años 30, el gob ierno soviético inició un programa masivo de rearme, incluída una expansión naval, en la que los submarinos resultaron ser claves. La clase Shchuka era satisfactoria, pero estaba diseñada para las aguas poco profundas del Báltico y carecían de capacidades para operar en el océano, por lo que se comenzó a estudiar un nuevo diseño de submarino oceánico de tamaño medio.
Por su parte, la Alemania de Weimar tenía prohibido por el tratado de Versalles de poseer y construir submarinos; Alemania evitó esta prohibición creado en otros países empresas subsudiarias de las suyas, como la holandesa NV Ingenieurskantoor voor Scheepsbouw (IvS), subsidiaria de la Deutsche Schiff- und Maschinenbau AG-AG Weser, que había diseñado un submarino que encajaba con las necesidades soviéticas. El gobierno español, durante la dictadura del general Primo de Rivera, mostró su interés en compar este submarino, por lo que varios oficiales alemanes de la marina (entre ellos Wilhelm Canaris) visitaron España y negociaron con un hombre de negocios españoal, Horacio Echevarrieta. Se construyó un submarino en 1929–1930, que fue probado en 1931, el E-1.
El E-1 en los astilleros de Cádiz
El gobierno de la Segunda República mostró una clara preferencia por los diseños británicos, por lo que se puso el submarino a la venta. Los soviéticos visitaron España en 1932 y les gustó el diseño, pero con varias modificaciones y mejoras en vista a fabricarlo en la URSS. El E-1 fue vendido a Turquía en 1935, donde sirvió como Gür hasta 1947.
Pese a los problemas encontrados, el diseño fue comprado por el gobierno de la URSS con una condición: que Deschimag aplicara las sugerencias y asistiera en la construcción de varios prototipos. Las modificaciones resultaron en un submarino diferentes, el E-2, cuyos planos llegaron a la URSS a finales de 1933; en agosto de 1934 se aprobó la fabricación del diseño, bautizado como serie IX. Los dos primeros prototipos comenzaron a ser construidos en los astilleros del Báltico en Leningrado (diciembre de 1934) usando equipo alemán. En abril de 1935 comenzó la construcción del tercer prototipo.
Para entonces era obvio que construir submarianos con equipo extranjero erea muy caro, por lo que el diseño fue modificado para usar sólo equipo soviético. Así nació la serie IX-bis, que comenzó a ser fabricada en 1936. Los primeros submarinos fueron bautizados como N-1, N-2 y N-3 (Nemetskaya, "alemán") pero se les cambió el nombre en octubre de 1937 a S-x (Srednyaya, "Medio"). En occidente, la clase fue conocida como Stalinets, en referencia a alos de la clase Leninets, pero este nombre no fue usado de manera oficial.
Cinco astilleros fabricaron los submarios de esta clase: tres en Leningrado (#189, #194 y #196), uno en Nikolayev (#198) y otro en Gorky (#112). El primer submarino estuvo listo en 1935. Esta clase sirvió en las cuatro flotas de la URSS.
Algunos submarinos no se terminaron: los S-36, S-37 y S-38 fueron destruidos en los astilleros de Nikolayev para evitar que cayeran en manos alemanes, y la construcción de los S-27 a S-30, S-45 y S-47, congelada durante la guerra, no se retomó al finalizar ésta, pues se consideró que ya estaban obsoletos.