Submarinos de bolsillo italianos en el mar Negro
Publicado: Mar Abr 12, 2011 5:31 pm
Bonjour,
Quisiera abrir un nuevo hilo sobre la actuación de los submarinos de bolsillo italianos en Rumanía. Prácticamente toda la información de este y próximos “posts” procede de la traducción y adaptación propia de un artículo escrito por Cristian Craciunoiu titulado “ Les sous-marins de poche italiens en Roumaníe” Revista Histoire de Guerre nº17 julio y agosto 2001
En 1942 Supermarina, alto mando de la Regia Marina italiana, decidió enviar unidades navales al mar Negro en apoyo de las operaciones terrestres en la URSS junto al aliado alemán. Como el Tratado de Montreux prohibía el cruce de los estrechos otomanos por fuerzas militares navales (salvo algunas circunstancias), la única solución era transportar por vía férrea pequeños navíos hacia el Danubio para después alcanzar la gran base rumana de Constanza. La elección de los italianos fue el pequeño submarino designado como CB, por Caproni tipo B dentro del arsenal italiano.
La logística fue enviada por vía terrestre, convoyes de camiones vía Simferopol hacia Poros en la península de Crimea, una base naval situada a unos 20 km de Sebastopol y ya ocupada por una unidad de lanchas torpederas MAS. Los mecánicos llegaron antes que los navíos y tuvieron tiempo de conocer la situación con sus compañeros de la 4ª flotilla de torpederas (18ª y 19ª Squadriglie) y la 101ª Squadriglia especial, colocadas a las órdenes de capitán de fragata Mimbelli. Durante este tiempo los seis CB llegados a Constanza fueron desembarcados en el muelle nº 23 donde una grúa gigante apodada “Titán” y responsable de la colocación en el agua de hidroaviones o de barcos de socorro, se encargó de posarlos en las aguas del mar Negro.
Il sommergibile CB 6 in secco a Costanza nel novembre 1942 per manutenzione e revisione degli apparati.
da "In Guerra sul mare" di E. Bagnasco - Albertelli – 2005
Fuente: http://www.betasom.it/forum/" onclick="window.open(this.href);return false;
Los trabajos de puesta a punto empezaron el 20 de mayo de 1942 bajo la supervisión de los tenientes de navío Lesen d’Astra y Sorentino. Las pruebas se realizaron con el apoyo de dos remolcadores rumanos el “Vartosu” y el “A” que iban a jugar también el papel de blancos durante los ejercicios. Los pequeños buques italianos considerados como listos para el combate abandonaron Constanza los 8 y 9 de junio de 1942 y fueron remolcados vía Sulina, hacia Foros.
Los CB habían llamado, naturalmente, la atención de los servicios de inteligencia de la marina rumana. Un informe iba a precisar sus puntos débiles: autonomía demasiado limitada, capacidad reducida para penetrar en puertos bien defendidos, pocas posibilidades de escapar al acoso de los caza-submarinos. Por lo tanto, sólo unos pocos éxitos ocasionales podían esperarse. El futuro iba a dar la razón al redactor de este informe…
Por el contrario los oficiales de la Regia Marina constituían innegablemente una cierta élite. Estaban perfectamente entrenados y disponían de una sólida moral. Bien educados y formados, eran muy populares entre la población civil rumana que les reconocía como otros latinos. Las relaciones con los naturales fueron excelentes, sobre todo con los que hablaban italiano y apreciaban la canzonnetta regularmente entonada por los transalpinos en los cafés y restaurantes portuarios. Estos marinos italianos destinados al mar Negro iban a conocer una vida mucho más intensa que la mayoría de sus camaradas.
À suivre, continuaré en otro momento.
À bientôt
Quisiera abrir un nuevo hilo sobre la actuación de los submarinos de bolsillo italianos en Rumanía. Prácticamente toda la información de este y próximos “posts” procede de la traducción y adaptación propia de un artículo escrito por Cristian Craciunoiu titulado “ Les sous-marins de poche italiens en Roumaníe” Revista Histoire de Guerre nº17 julio y agosto 2001
En 1942 Supermarina, alto mando de la Regia Marina italiana, decidió enviar unidades navales al mar Negro en apoyo de las operaciones terrestres en la URSS junto al aliado alemán. Como el Tratado de Montreux prohibía el cruce de los estrechos otomanos por fuerzas militares navales (salvo algunas circunstancias), la única solución era transportar por vía férrea pequeños navíos hacia el Danubio para después alcanzar la gran base rumana de Constanza. La elección de los italianos fue el pequeño submarino designado como CB, por Caproni tipo B dentro del arsenal italiano.
La logística fue enviada por vía terrestre, convoyes de camiones vía Simferopol hacia Poros en la península de Crimea, una base naval situada a unos 20 km de Sebastopol y ya ocupada por una unidad de lanchas torpederas MAS. Los mecánicos llegaron antes que los navíos y tuvieron tiempo de conocer la situación con sus compañeros de la 4ª flotilla de torpederas (18ª y 19ª Squadriglie) y la 101ª Squadriglia especial, colocadas a las órdenes de capitán de fragata Mimbelli. Durante este tiempo los seis CB llegados a Constanza fueron desembarcados en el muelle nº 23 donde una grúa gigante apodada “Titán” y responsable de la colocación en el agua de hidroaviones o de barcos de socorro, se encargó de posarlos en las aguas del mar Negro.
Il sommergibile CB 6 in secco a Costanza nel novembre 1942 per manutenzione e revisione degli apparati.
da "In Guerra sul mare" di E. Bagnasco - Albertelli – 2005
Fuente: http://www.betasom.it/forum/" onclick="window.open(this.href);return false;
Los trabajos de puesta a punto empezaron el 20 de mayo de 1942 bajo la supervisión de los tenientes de navío Lesen d’Astra y Sorentino. Las pruebas se realizaron con el apoyo de dos remolcadores rumanos el “Vartosu” y el “A” que iban a jugar también el papel de blancos durante los ejercicios. Los pequeños buques italianos considerados como listos para el combate abandonaron Constanza los 8 y 9 de junio de 1942 y fueron remolcados vía Sulina, hacia Foros.
Los CB habían llamado, naturalmente, la atención de los servicios de inteligencia de la marina rumana. Un informe iba a precisar sus puntos débiles: autonomía demasiado limitada, capacidad reducida para penetrar en puertos bien defendidos, pocas posibilidades de escapar al acoso de los caza-submarinos. Por lo tanto, sólo unos pocos éxitos ocasionales podían esperarse. El futuro iba a dar la razón al redactor de este informe…
Por el contrario los oficiales de la Regia Marina constituían innegablemente una cierta élite. Estaban perfectamente entrenados y disponían de una sólida moral. Bien educados y formados, eran muy populares entre la población civil rumana que les reconocía como otros latinos. Las relaciones con los naturales fueron excelentes, sobre todo con los que hablaban italiano y apreciaban la canzonnetta regularmente entonada por los transalpinos en los cafés y restaurantes portuarios. Estos marinos italianos destinados al mar Negro iban a conocer una vida mucho más intensa que la mayoría de sus camaradas.
À suivre, continuaré en otro momento.
À bientôt