Fuente https://en.wikipedia.org/wiki/Gustav_Kr ... nd_Halbach
Gustav Georg Friedrich Maria Krupp von Bohlen und Halbach (nacido como Gustav von Bohlen und Halbach; 7 de agosto de 1870 - 16 de enero de 1950) nació en en La Haya. Era nieto de Henry Bohlen y estaba relacionado con Charles E. Bohlen y Karoline von Wartensleben. Se casó con Bertha Krupp en octubre de 1906. Bertha había heredado la empresa de su familia en 1902 a los 16 años tras la muerte de su padre, Friedrich Alfred Krupp. El emperador Guillermo II dirigió personalmente la búsqueda de un marido adecuado para Bertha, ya que el imperio Krupp no podía estar encabezado por una mujer. Gustav fue elegido por su servicio en el Vaticano. El Kaiser anunció en la boda que a Gustav se le permitiría agregar el nombre Krupp al suyo. Gustav se convirtió en presidente de la empresa en 1909.
Después de 1910, la compañía Krupp se convirtió en miembro y principal financiador de la Liga Pan-Alemana (Alldeutscher Verband) que movilizó el apoyo popular a favor de dos proyectos de ley del ejército, en 1912 y 1913.
Hacia el estallido de la Primera Guerra Mundial, la compañía tenía casi un monopolio en la fabricación de armamento pesado en Alemania. Al comienzo de la guerra la empresa perdió la mayoría de sus mercados en el extranjero, pero esto fue más que compensado por una mayor demanda de armas de Alemania y sus aliados. En 1902 la empresa arrendó una patente de fusibles a Vickers Limited del Reino Unido. Entre los productos de la compañía se encontraba un obús de 94 toneladas llamado Big Bertha, en honor a la esposa de Krupp, y el Cañón de Paris Gun.Gustav también ganó el lucrativo contrato de los submarinos alemanes, que se construyeron en el astillero de la familia en Kiel. La finca de Krupp, la Villa Hügel, tenía un conjunto de habitaciones para Wilhelm II cada vez que venía de visita.
Durante la ocupación del Ruhr en 1923, un tribunal militar francés hizo encarcelar a Krupp durante siete meses hasta que el gobierno alemán detuvo su política de resistencia pasiva.
El Tratado de Versalles impidió que Alemania fabricara armamentos y submarinos, lo que obligó a Krupp a reducir significativamente su mano de obra. Su empresa se diversificó a equipos agrícolas, vehículos y bienes de consumo. Sin embargo, utilizando las ganancias del acuerdo de patentes de Vickers y los subsidios del gobierno de Weimar, Krupp comenzó en secreto el rearme de Alemania con la tinta apenas seca en el tratado de Versalles. Continuó trabajando en secreto en artillería a través de subsidiarias en Suecia y construyó corrales submarinos en los Países Bajos. En la década de 1930, reinició la fabricación de tanques y otros materiales de guerra, nuevamente utilizando subsidiarias extranjeras.
Krupp fue miembro del Consejo de Estado de Prusia desde 1921 hasta 1933; era un monárquico declarado, pero su primera lealtad era hacia quien detentaba el poder. Una vez salió disgustado de una reunión de negocios cuando otro industrial, que era el anfitrión de la reunión, se refirió al difunto presidente Friedrich Ebert como "ese fabricante de sillas de montar" (Der Sattelhersteller).
Krupp inicialmente se opuso a los nazis, pero en la reunión secreta con Adolf Hitler y los principales industriales alemanes del 20 de febrero de 1933, contribuyó con un millón de Reichsmark al fondo del partido nazi para las elecciones de marzo de ese año, lo que permitió a Hitler controlar el gobierno. Después de que Hitler ganó el poder, Krupp se convirtió, como dijo más tarde Fritz Thyssen, en "un súper nazi", y contribuyó al Fondo Adolf Hitler de Comercio e Industria Alemanes, que se estableció en junio de 1933 para apoyar al NSDAP. Como presidente de la Reichsverband de la industria alemana, lideró el esfuerzo por expulsar a sus miembros judíos.
Al igual que muchos nacionalistas alemanes, Krupp creía que los nazis podían usarse para acabar con la República y luego dejarse de lado para restaurar al Kaiser y a las viejas élites. Cuando se abolieron todos los partidos y se suspendieron las linbertades civiles tras el incendio del Reichstag y la conquista del poder absoluto por parte de Hitler, Krupp descubrió que él y el resto de las viejas élites estaban en manos del Partido; el movimiento sobre el que esperaban volver al poder los había domiado. Siempre flexible, Krupp cooperó con la nueva dictadura.
Quería y tenía que mantener Krupp, a pesar de toda oposición, como planta de armamento para el futuro posterior, aunque sea en forma camuflada. Solo podía hablar en los círculos más pequeños e íntimos sobre las verdaderas razones que me llevaron a emprender el cambio de plantas para ciertas líneas de producción porque esperaba que mucha gente no me entendiera.
— Krupp en una entrevista para la revista Krupp el 1 de marzo de 1942
Hitler había tratado de acceder a las fábricas de Krupp en 1929, pero fue rechazado porque Krupp sintió que vería parte del trabajo de armamento secreto allí y lo revelaría al mundo. A Bertha Krupp nunca le gustó Hitler, aunque nunca se quejó cuando el resultado final de la compañía aumentó a través de los contratos de armamento y la producción. Se refirió a él como "ese cierto caballero" (Dieser gewisse Herr) y alegó enfermedad cuando Hitler realizó una gira oficial en 1934. Su hija Irmgard actuó como anfitriona.
Gustav Krupp recibe la Insignia de oro del NSDAP de manos de Hitler en Essen, 1940
https://en.wikipedia.org/wiki/Gustav_Kr ... nd_Halbach
Gustav Georg Friedrich Maria Krupp von Bohlen und Halbach (nacido como Gustav von Bohlen und Halbach; 7 de agosto de 1870 - 16 de enero de 1950) nació en en La Haya. Era nieto de Henry Bohlen y estaba relacionado con Charles E. Bohlen y Karoline von Wartensleben. Se casó con Bertha Krupp en octubre de 1906. Bertha había heredado la empresa de su familia en 1902 a los 16 años tras la muerte de su padre, Friedrich Alfred Krupp. El emperador Guillermo II dirigió personalmente la búsqueda de un marido adecuado para Bertha, ya que el imperio Krupp no podía estar encabezado por una mujer. Gustav fue elegido por su servicio en el Vaticano. El Kaiser anunció en la boda que a Gustav se le permitiría agregar el nombre Krupp al suyo. Gustav se convirtió en presidente de la empresa en 1909.
Después de 1910, la compañía Krupp se convirtió en miembro y principal financiador de la Liga Pan-Alemana (Alldeutscher Verband) que movilizó el apoyo popular a favor de dos proyectos de ley del ejército, en 1912 y 1913.
Hacia el estallido de la Primera Guerra Mundial, la compañía tenía casi un monopolio en la fabricación de armamento pesado en Alemania. Al comienzo de la guerra la empresa perdió la mayoría de sus mercados en el extranjero, pero esto fue más que compensado por una mayor demanda de armas de Alemania y sus aliados. En 1902 la empresa arrendó una patente de fusibles a Vickers Limited del Reino Unido. Entre los productos de la compañía se encontraba un obús de 94 toneladas llamado Big Bertha, en honor a la esposa de Krupp, y el Cañón de Paris Gun.Gustav también ganó el lucrativo contrato de los submarinos alemanes, que se construyeron en el astillero de la familia en Kiel. La finca de Krupp, la Villa Hügel, tenía un conjunto de habitaciones para Wilhelm II cada vez que venía de visita.
Durante la ocupación del Ruhr en 1923, un tribunal militar francés hizo encarcelar a Krupp durante siete meses hasta que el gobierno alemán detuvo su política de resistencia pasiva.
El Tratado de Versalles impidió que Alemania fabricara armamentos y submarinos, lo que obligó a Krupp a reducir significativamente su mano de obra. Su empresa se diversificó a equipos agrícolas, vehículos y bienes de consumo. Sin embargo, utilizando las ganancias del acuerdo de patentes de Vickers y los subsidios del gobierno de Weimar, Krupp comenzó en secreto el rearme de Alemania con la tinta apenas seca en el tratado de Versalles. Continuó trabajando en secreto en artillería a través de subsidiarias en Suecia y construyó corrales submarinos en los Países Bajos. En la década de 1930, reinició la fabricación de tanques y otros materiales de guerra, nuevamente utilizando subsidiarias extranjeras.
Krupp fue miembro del Consejo de Estado de Prusia desde 1921 hasta 1933; era un monárquico declarado, pero su primera lealtad era hacia quien detentaba el poder. Una vez salió disgustado de una reunión de negocios cuando otro industrial, que era el anfitrión de la reunión, se refirió al difunto presidente Friedrich Ebert como "ese fabricante de sillas de montar" (Der Sattelhersteller).
Krupp inicialmente se opuso a los nazis, pero en la reunión secreta con Adolf Hitler y los principales industriales alemanes del 20 de febrero de 1933, contribuyó con un millón de Reichsmark al fondo del partido nazi para las elecciones de marzo de ese año, lo que permitió a Hitler controlar el gobierno. Después de que Hitler ganó el poder, Krupp se convirtió, como dijo más tarde Fritz Thyssen, en "un súper nazi", y contribuyó al Fondo Adolf Hitler de Comercio e Industria Alemanes, que se estableció en junio de 1933 para apoyar al NSDAP. Como presidente de la Reichsverband de la industria alemana, lideró el esfuerzo por expulsar a sus miembros judíos.
Al igual que muchos nacionalistas alemanes, Krupp creía que los nazis podían usarse para acabar con la República y luego dejarse de lado para restaurar al Kaiser y a las viejas élites. Cuando se abolieron todos los partidos y se suspendieron las linbertades civiles tras el incendio del Reichstag y la conquista del poder absoluto por parte de Hitler, Krupp descubrió que él y el resto de las viejas élites estaban en manos del Partido; el movimiento sobre el que esperaban volver al poder los había domiado. Siempre flexible, Krupp cooperó con la nueva dictadura.
Quería y tenía que mantener Krupp, a pesar de toda oposición, como planta de armamento para el futuro posterior, aunque sea en forma camuflada. Solo podía hablar en los círculos más pequeños e íntimos sobre las verdaderas razones que me llevaron a emprender el cambio de plantas para ciertas líneas de producción porque esperaba que mucha gente no me entendiera.
— Krupp en una entrevista para la revista Krupp el 1 de marzo de 1942
Hitler había tratado de acceder a las fábricas de Krupp en 1929, pero fue rechazado porque Krupp sintió que vería parte del trabajo de armamento secreto allí y lo revelaría al mundo. A Bertha Krupp nunca le gustó Hitler, aunque nunca se quejó cuando el resultado final de la compañía aumentó a través de los contratos de armamento y la producción. Se refirió a él como "ese cierto caballero" (Dieser gewisse Herr) y alegó enfermedad cuando Hitler realizó una gira oficial en 1934. Su hija Irmgard actuó como anfitriona.
Gustav Krupp recibe la Insignia de oro del NSDAP de manos de Hitler en Essen, 1940
https://en.wikipedia.org/wiki/Gustav_Kr ... nd_Halbach