(11-3-1886 / 2-12-1941). Alias Śmigły, Tarłowski, Adam Zawisza. Político, militar, pintor y poeta polaco, y comandante en jefe del ejército polaco durante la Guerra de Defensa de Polonia en 1939, primera etapa de la II Guerra Mundial.
Nació en Łapszyn, en Galicia, hijo de un suboficial del ejército austro-húngaro. Quedó huérfano a la edad de 13 años y fue criado pos sus abuelos maternos y, a la muerte de estos, por la familia del médico del lugar. Tras graduarse con distinción en el instituto loca, fue a Cracovia para completar sus estudios de filosofía e historia del arte en la Universidad Jagiellonian. Estudió para ser pintor en la Academia de Artes de Cracovia y luego en Viena y Munich. En 1910-11 estuvo en la academia de oficiales de reserva en Viena y estuvo un tiempo destinado en el 4º Regimiento de Infantería "Deutschmeister" (luego “Archduke Eugene”).
Una vez completada su educación militar con distinción, le ofrecieron un puesto en el Ejército Imperial, que declinó; para pasar a ser en 1912 uno de los fundadores de la organización paramilitar Związek Strzelecki (Asociación de Fusileros). Movilizado en julio de 1914 por el ejército austriaco, fue enviado a las Legiones Polacas en agosto, luchando en la 1ª Brigada Polaca de Piłsudski. Participó en diversas batallas contra los rusos en el sur del Vístula, ascendiendo rápidamente, llegando en 1916 al grado de coronel (si bien seguía pintando y exhibiendo en Cracovia). En 1917, tras rehusar prestar juramento a las autoridades alemanas y austríacas, las legiones polonesas fueron desmovilizadas, sus soldados internados y preso en la fortaleza de Magdeburgo. Piłsudski le nombró comandante de la Organización Militar Polaca y adoptó el alias de Śmigły (Rápido ó Ágil), que se convertiría en parte de su apellido.
En octubre de 1918 entró en el gobierno socialista de Ignacy Daszyński en Lublin, como Ministro de la Guerra, ascendiendo a Brigadier General. Esta fue la primera vez que usó el nombre completo de Rydz-Śmigły. El 18 de noviembre de 1918 el gobierno abandonó todo el poder a Piłsudski, que se convirtió en Jefe de Estado provisional.
Durante la guerra Polaco-Bolchevique de 1919-21, Rydz comandó diversas ofensivas del ejército polaco, capturando Wilno y Dünaburg. Después de esto fue nombrado Comandante en Jefe de las fuerzas armadas letonas y conquistó Livonia al Ejército Rojo. A continuación destruyó la 12ª División del Ejército Rojo y conquistó Kiev. Entonces pasó a dirigir el Frente Central de las fuerzas polacas durante la Batallla de Varsovia (conocida como “el milagro del Vístula). En esta batalla decisiva, el comandante polaco Piłsduski, derrotó totalmente al comandante soviético Mikhail Tukhachevsky. El frente central de Rydz-Śmigły bloqueó el ataque soviético, bloqueando las rutas de escape del los derrotados 4º y 15º Ejércitos Soviéticos, así como del 3r Cuerpo de Caballería del General Gay Dimitrievich Gay, que tuvo que huir a la Prusia Oriental, donde fue internado por los alemanes.
Tras la guerra de 1919-21 fue nombrado Inspector General del Ejército Polaco en el distrito de Vilna y luego en Varsovia. En 1926, durante el golpe de estado (el golpe de mayo) de Piłsudski, optó por el bando del mariscal y envió tropas de Wilno para reforzar las tropas sublevadas en Varsovia. Piłsudski nunca olvido esta fidelidad y en 1929 fue nombrado como diputado de todos los asuntos del Este. El 13 de mayo de 1935, de acuerdo con la última voluntad de Piłsudski, Rydz fue nombrado por el presidente y el gobierno como Inspector General de las Fuerzas Armadas Polacas y el 10 de noviembre de 1936 fue ascendido al rango de Mariscal de Polonia. A partir de ese momento pasa a ser el hombre más poderoso en Polonia y se le otorga el título de “Segundo hombre en el Estado tras el Presidente”. El gobierno tiene un talante cada vez más autoritario y conservador, con el equilibrio de poderes entre el conservador Śmigły-Rydz y el moderado Ignacy Mościcki, que sigue como Presidente. Durante un tiempo valora la posibilidad de aliarse con el Partido Liberal de los Campesinos (PSL), pero tras desestimarlo, se lanza cada vez más hacia una extrema derecha. Tras 1938 se reconcilió con el Presidente, pero a partir de entonces se estableció la división de los “Hombres del Presidente” (o “Grupo del Castillo”), civiles en su mayoría, y los “Hombres del Mariscal”, que se trataba mayormente de viejos camaradas de Piłsudski y oficiales profesionales.
En Marzo de 1939, Hitler ocupó Bohemia y Moravia y creó el estado satélite de Eslovaquia. Esto rodeaba a Polonia con un anillo de hierro por todos los lados excepto por el este. Rydz fue el único miembro del gobierno que vio claramente la amenaza de un conflicto con Alemania. No obstante, quedaba muy poco tiempo para crear planes operativos para el oeste. Durante las negociaciones en Moscú de agosto de 1939, Rydz rechazó todos los intentos de las potencias occidentales para que el Ejército Rojo marchase hacia el oeste, declarando que “no hay garantía de que los soviéticos tomen parte activa en la guerra; y además, una vez hayan entrado en territorio polonés, nunca lo abandonarán”
El 1 de septiembre de 1939, cuando los alemanes invadieron Polonia en una guerra no provocada y sin declarar, Śmigły-Rydz fue nombrado Comandante en Jefe de las Fuerzas Polacas. El 7 de septiembre, evacuó Varsovia. La coordinación de las fuerzas polacas no tardó en desaparecer debido a los problemas de comunicación, que sustraían a Rydz la posibilidad de comandar los ejércitos. El 11 de septiembre ordenó desde Brześć que Varsovia debía ser defendida a cualquier coste. En su planteamiento, Varsovia y la fortaleza de Modlin debían ser 2 ciudadelas en la Polonia central, sosteniendo la lucha durante meses, mientras que las fuerzas polacas esperaban el contraataque prometido por los aliados franceses y británicos. Lo que no sabía Śmigły-Rydz es que sus aliados occidentales no tenían ningún plan y estaban esperando la caída de Polonia. Su plan acabó de desmoronarse cuando las fuerzas soviéticas invadieron Polonia desde el este el 17 de septiembre. Asumiendo que la defensa contra ambos vecinos sería imposible, Śmigły-Rydz ordenó la retirada hacia Rumanía, evitando luchar contra los soviéticos.
El 18 de septiembre de 1939, después de evitar ser capturado por las tropas soviéticas y alemanas, cruzó la frontera rumana, siendo internado. La huída a Rumanía del gobierno polaco evitó a Polonia firmar la rendición y permitió a los soldados polacos mantener la lucha contra la Alemania nazi. Muchos soldados polacos se reagruparon en Francia y después, en Inglaterra, creando nuevas unidades polacas.
Śmigły-Rydz, como Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas Polacas, asumió toda la responsabilidad por la derrota militar de septiembre de 1939. No habían excusas para él, pese a que Polonia hubiese sido atacada a traición por ambos costados por 2 de las máquinas militares más poderosas de Europa: la Wehrmacht y el Ejército Rojo. Por otro lado, no se puede negar que Rydz, un comandante extremadamente hábil en frentes pequeños, no era un estratega experimentado en un gran conflicto. Ya en 1922, en una evaluación de los generales polacos, Piłsudski escribió sobre él: “en el trabajo operativo muestra un gran sentido común y mucha energía. Le recomendaría siempre como comandante de un ejército, pero no obstante no estoy seguro de que posea suficientes habilidades para funcionar como comandante en jefe en una guerra entre 2 naciones”.
Durante su internamiento en Rumanía, inició la creación del Subterráneo Polaco. Estaba basado en oficiales leales a la memoria de Piłsudski. Aún en Rumanía, el 27 de octubre dimitió de sus funciones como Comandante en Jefe y Inspector General de las Fuerzas Armadas, asumiendo dichas funciones Władysław Sikorski, quien se encontraba con el gobierno polonés en el exilio en Francia (y después en Gran Bretaña). Śmigły-Rydz fue trasladado del campo de internamiento a la villa de un ex-primer ministro rumano en Dragoslavele, de donde escapó el 10 de diciembre de 1940 y cruzó la frontera ilegalmente hacia Hungría.
Su huida a Hungría y rumores sobre sus planes de retorno a Polonia provocaron considerables molestias a su rival Sikorski, quien era a la sazón Primer Ministro. Sikorski era opositor a Śmigły-Rydz y a Piłsudski desde el Golpe de 1926. Nunca había aceptado ningún puesto militar de Śmigły-Rydz en septiembre de 1939 y ahora declaraba en un telegrama al general Stefan Grot-Rowecki, lider del AK (Armia Krajowa), un grupo de resistencia clandestina en Polonia, que “el gobierno polaco asumiría una estancia del Mariscal en Polonia como un sabotaje de su trabajo en el país. El Mariscal debe trasladarse tan pronto como sea posible a algún país del Imperio Británico”. Pese a ello, Śmigły-Rydz dejó Hungría el 25 de octubre de 1941 y entró en Polonia a través de Eslovaquia, llegando el 30 de octubre a Varsovia en un secreto estricto, para participar en el movimiento de la resistencia como un soldado raso más, suspendiendo voluntariamente su rango de Mariscal de Polonia. Contactó con Grot-Rowecki, pero no participó en ningún combate ya que repentinamente falleció de un ataque al corazón el 2 de diciembre de 1941, tan solo 5 semanas después de que llegara a Varsovia. Fue enterrado en Varsovia bajo el alias de “Adam Zawisza”. Su tumba en el Cementerio de Powązki llevó ese nombre hasta 1991.
Tras la II Guerra Mundial su reputación quedó dañada: en la Polonia comunista y en la Unión Soviética, fue descreditado por su participación en la Guerra Polaco-Soviética de 1920, y por la represión política bajo el gobierno militarista de la década de 1930. En occidente, debido a la influencia de los círculos anti-Pilsudski con Władysław Sikorski como su máxime representante, se le veía huyendo del campo de batalla en 1939, sin ningún reconocimiento al hecho de la derrota polaca ante nazis y soviéticos. Hasta 1990 no ha ocupado su lugar en la conciencia nacional Polaca, como un patriota que sacrificó su vida en servicio a su nación y como uno de los héroes trágicos de la Historia de Polonia.
Nació en Łapszyn, en Galicia, hijo de un suboficial del ejército austro-húngaro. Quedó huérfano a la edad de 13 años y fue criado pos sus abuelos maternos y, a la muerte de estos, por la familia del médico del lugar. Tras graduarse con distinción en el instituto loca, fue a Cracovia para completar sus estudios de filosofía e historia del arte en la Universidad Jagiellonian. Estudió para ser pintor en la Academia de Artes de Cracovia y luego en Viena y Munich. En 1910-11 estuvo en la academia de oficiales de reserva en Viena y estuvo un tiempo destinado en el 4º Regimiento de Infantería "Deutschmeister" (luego “Archduke Eugene”).
Una vez completada su educación militar con distinción, le ofrecieron un puesto en el Ejército Imperial, que declinó; para pasar a ser en 1912 uno de los fundadores de la organización paramilitar Związek Strzelecki (Asociación de Fusileros). Movilizado en julio de 1914 por el ejército austriaco, fue enviado a las Legiones Polacas en agosto, luchando en la 1ª Brigada Polaca de Piłsudski. Participó en diversas batallas contra los rusos en el sur del Vístula, ascendiendo rápidamente, llegando en 1916 al grado de coronel (si bien seguía pintando y exhibiendo en Cracovia). En 1917, tras rehusar prestar juramento a las autoridades alemanas y austríacas, las legiones polonesas fueron desmovilizadas, sus soldados internados y preso en la fortaleza de Magdeburgo. Piłsudski le nombró comandante de la Organización Militar Polaca y adoptó el alias de Śmigły (Rápido ó Ágil), que se convertiría en parte de su apellido.
En octubre de 1918 entró en el gobierno socialista de Ignacy Daszyński en Lublin, como Ministro de la Guerra, ascendiendo a Brigadier General. Esta fue la primera vez que usó el nombre completo de Rydz-Śmigły. El 18 de noviembre de 1918 el gobierno abandonó todo el poder a Piłsudski, que se convirtió en Jefe de Estado provisional.
Durante la guerra Polaco-Bolchevique de 1919-21, Rydz comandó diversas ofensivas del ejército polaco, capturando Wilno y Dünaburg. Después de esto fue nombrado Comandante en Jefe de las fuerzas armadas letonas y conquistó Livonia al Ejército Rojo. A continuación destruyó la 12ª División del Ejército Rojo y conquistó Kiev. Entonces pasó a dirigir el Frente Central de las fuerzas polacas durante la Batallla de Varsovia (conocida como “el milagro del Vístula). En esta batalla decisiva, el comandante polaco Piłsduski, derrotó totalmente al comandante soviético Mikhail Tukhachevsky. El frente central de Rydz-Śmigły bloqueó el ataque soviético, bloqueando las rutas de escape del los derrotados 4º y 15º Ejércitos Soviéticos, así como del 3r Cuerpo de Caballería del General Gay Dimitrievich Gay, que tuvo que huir a la Prusia Oriental, donde fue internado por los alemanes.
Tras la guerra de 1919-21 fue nombrado Inspector General del Ejército Polaco en el distrito de Vilna y luego en Varsovia. En 1926, durante el golpe de estado (el golpe de mayo) de Piłsudski, optó por el bando del mariscal y envió tropas de Wilno para reforzar las tropas sublevadas en Varsovia. Piłsudski nunca olvido esta fidelidad y en 1929 fue nombrado como diputado de todos los asuntos del Este. El 13 de mayo de 1935, de acuerdo con la última voluntad de Piłsudski, Rydz fue nombrado por el presidente y el gobierno como Inspector General de las Fuerzas Armadas Polacas y el 10 de noviembre de 1936 fue ascendido al rango de Mariscal de Polonia. A partir de ese momento pasa a ser el hombre más poderoso en Polonia y se le otorga el título de “Segundo hombre en el Estado tras el Presidente”. El gobierno tiene un talante cada vez más autoritario y conservador, con el equilibrio de poderes entre el conservador Śmigły-Rydz y el moderado Ignacy Mościcki, que sigue como Presidente. Durante un tiempo valora la posibilidad de aliarse con el Partido Liberal de los Campesinos (PSL), pero tras desestimarlo, se lanza cada vez más hacia una extrema derecha. Tras 1938 se reconcilió con el Presidente, pero a partir de entonces se estableció la división de los “Hombres del Presidente” (o “Grupo del Castillo”), civiles en su mayoría, y los “Hombres del Mariscal”, que se trataba mayormente de viejos camaradas de Piłsudski y oficiales profesionales.
En Marzo de 1939, Hitler ocupó Bohemia y Moravia y creó el estado satélite de Eslovaquia. Esto rodeaba a Polonia con un anillo de hierro por todos los lados excepto por el este. Rydz fue el único miembro del gobierno que vio claramente la amenaza de un conflicto con Alemania. No obstante, quedaba muy poco tiempo para crear planes operativos para el oeste. Durante las negociaciones en Moscú de agosto de 1939, Rydz rechazó todos los intentos de las potencias occidentales para que el Ejército Rojo marchase hacia el oeste, declarando que “no hay garantía de que los soviéticos tomen parte activa en la guerra; y además, una vez hayan entrado en territorio polonés, nunca lo abandonarán”
El 1 de septiembre de 1939, cuando los alemanes invadieron Polonia en una guerra no provocada y sin declarar, Śmigły-Rydz fue nombrado Comandante en Jefe de las Fuerzas Polacas. El 7 de septiembre, evacuó Varsovia. La coordinación de las fuerzas polacas no tardó en desaparecer debido a los problemas de comunicación, que sustraían a Rydz la posibilidad de comandar los ejércitos. El 11 de septiembre ordenó desde Brześć que Varsovia debía ser defendida a cualquier coste. En su planteamiento, Varsovia y la fortaleza de Modlin debían ser 2 ciudadelas en la Polonia central, sosteniendo la lucha durante meses, mientras que las fuerzas polacas esperaban el contraataque prometido por los aliados franceses y británicos. Lo que no sabía Śmigły-Rydz es que sus aliados occidentales no tenían ningún plan y estaban esperando la caída de Polonia. Su plan acabó de desmoronarse cuando las fuerzas soviéticas invadieron Polonia desde el este el 17 de septiembre. Asumiendo que la defensa contra ambos vecinos sería imposible, Śmigły-Rydz ordenó la retirada hacia Rumanía, evitando luchar contra los soviéticos.
El 18 de septiembre de 1939, después de evitar ser capturado por las tropas soviéticas y alemanas, cruzó la frontera rumana, siendo internado. La huída a Rumanía del gobierno polaco evitó a Polonia firmar la rendición y permitió a los soldados polacos mantener la lucha contra la Alemania nazi. Muchos soldados polacos se reagruparon en Francia y después, en Inglaterra, creando nuevas unidades polacas.
Śmigły-Rydz, como Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas Polacas, asumió toda la responsabilidad por la derrota militar de septiembre de 1939. No habían excusas para él, pese a que Polonia hubiese sido atacada a traición por ambos costados por 2 de las máquinas militares más poderosas de Europa: la Wehrmacht y el Ejército Rojo. Por otro lado, no se puede negar que Rydz, un comandante extremadamente hábil en frentes pequeños, no era un estratega experimentado en un gran conflicto. Ya en 1922, en una evaluación de los generales polacos, Piłsudski escribió sobre él: “en el trabajo operativo muestra un gran sentido común y mucha energía. Le recomendaría siempre como comandante de un ejército, pero no obstante no estoy seguro de que posea suficientes habilidades para funcionar como comandante en jefe en una guerra entre 2 naciones”.
Durante su internamiento en Rumanía, inició la creación del Subterráneo Polaco. Estaba basado en oficiales leales a la memoria de Piłsudski. Aún en Rumanía, el 27 de octubre dimitió de sus funciones como Comandante en Jefe y Inspector General de las Fuerzas Armadas, asumiendo dichas funciones Władysław Sikorski, quien se encontraba con el gobierno polonés en el exilio en Francia (y después en Gran Bretaña). Śmigły-Rydz fue trasladado del campo de internamiento a la villa de un ex-primer ministro rumano en Dragoslavele, de donde escapó el 10 de diciembre de 1940 y cruzó la frontera ilegalmente hacia Hungría.
Su huida a Hungría y rumores sobre sus planes de retorno a Polonia provocaron considerables molestias a su rival Sikorski, quien era a la sazón Primer Ministro. Sikorski era opositor a Śmigły-Rydz y a Piłsudski desde el Golpe de 1926. Nunca había aceptado ningún puesto militar de Śmigły-Rydz en septiembre de 1939 y ahora declaraba en un telegrama al general Stefan Grot-Rowecki, lider del AK (Armia Krajowa), un grupo de resistencia clandestina en Polonia, que “el gobierno polaco asumiría una estancia del Mariscal en Polonia como un sabotaje de su trabajo en el país. El Mariscal debe trasladarse tan pronto como sea posible a algún país del Imperio Británico”. Pese a ello, Śmigły-Rydz dejó Hungría el 25 de octubre de 1941 y entró en Polonia a través de Eslovaquia, llegando el 30 de octubre a Varsovia en un secreto estricto, para participar en el movimiento de la resistencia como un soldado raso más, suspendiendo voluntariamente su rango de Mariscal de Polonia. Contactó con Grot-Rowecki, pero no participó en ningún combate ya que repentinamente falleció de un ataque al corazón el 2 de diciembre de 1941, tan solo 5 semanas después de que llegara a Varsovia. Fue enterrado en Varsovia bajo el alias de “Adam Zawisza”. Su tumba en el Cementerio de Powązki llevó ese nombre hasta 1991.
Tras la II Guerra Mundial su reputación quedó dañada: en la Polonia comunista y en la Unión Soviética, fue descreditado por su participación en la Guerra Polaco-Soviética de 1920, y por la represión política bajo el gobierno militarista de la década de 1930. En occidente, debido a la influencia de los círculos anti-Pilsudski con Władysław Sikorski como su máxime representante, se le veía huyendo del campo de batalla en 1939, sin ningún reconocimiento al hecho de la derrota polaca ante nazis y soviéticos. Hasta 1990 no ha ocupado su lugar en la conciencia nacional Polaca, como un patriota que sacrificó su vida en servicio a su nación y como uno de los héroes trágicos de la Historia de Polonia.
