Publicado: Dom Ene 07, 2007 9:54 pm
Y llegamos a la madre del cordero. El concepto de “zona inmune”.
Recordemos como los norteamericanos, copiados por todo el mundo menos los alemanes, de pasaron al “todo o nada”. Y recordemos que el sistema estaba pensado para largas distancias. En un combate ¿qué pasaría?
- Si el combate era desde corta distancia (zona 1), los proyectiles llegarían con la máxima energía cinética y no podrían ser detenidos: perforarían la coraza y estallarían en el interior. No siempre, el Kirishima hubiera debido perforar la coraza del South Dakota (disparó desde poco más de 6.000 m) y no lo logró, un proyectil se aplastó contra uan barbeta (440 mm de coraza endurecida).
- Si el combate se libraba desde muy lejos (zona 3), el riesgo era también muy alto. Los proyectiles caerían casi como bombas, acelerados por la gravedad, y atacarían la cubierta blindada que, por gruesa que fuese, no podía resistir eso: incluso la del Yamato era de 232 mm (como máximo) y eso no puede parar un proyectil de 356 mm, menos de 406 mm. A cambio, en esos combates a muy largas distancias la probabilidad de impacto era baja.
- Si el combate se libraba a distancias intermedias (zona inmune), los proyectiles llegarían con menos energía y o serían detenidos por la coraza, o rebotarían en la cubierta blindada. El buque podría recibir daños menores (los proyectiles que alcanzasen zonas no blindadas no estallarían y causarían daños pequeños) y seguiría combatiendo.
Si el enemigo tiene cañones muy potentes, la zona 1 (la cercana) es mucho más ancha que si los cañones enemigos son pequeños y tu coraza gruesa. Pero de todo esto se obtiene una segunda conclusión:
Si se combate a larga distancia ¿es mejor muchos proyectiles o pocos? Pues lo segundo. A largas distancias, el tiempo de vuelo es tan largo que los proyectiles aún no han caído cuando los cañones ya han recargado (salvo diseños fallidos como los Rodney). De poco sirve tener un cañón de tiro rápido como el 280 mm alemán si no puedes aprovechar la cadencia de tiro (puedes disparar varias salvas para tratar de ahorquillar, pero se gasta mucha munición). Por eso es mejor un cañón de gran calibre, aunque sea de menos velocidad inicial, que uno de pequeño calibre. Además, los proyectiles de gran calibre y menor velocidad inicial caerán verticalmente antes, lo que hace que la zona 3 (la lejana) esté más cerca y pueda ser aprovechada.
El Bismarck no tenía nada de eso. A corta distancia su coraza era vulnerable, pero a medias los proyectiles que tocasen la coraza superior o la cubierta llegarían a zonas vitales sin ser detenidos, en la zona 3 los impactos serían aún más peligrosos. Es decir, el Bismarck no tenía zona inmune.
Así pues, a larga distancia (zona 3) lo que primaba era la puntería: dispersión de los cañones, control de tiro, etcétera. Buena la alemana, tan buena o mejor la inglesa o norteamericana (recordemos que en Surigao el Yamashiro fue hundido desde distancias entre 18.000 y 22.000 m, de noche).
A distancia media, los barcos nuevos estarían en su elemento, y el Bismarck correría un riesgo terrible.
A corta distancia, los dos correrían riesgo, pero la coraza alemana era menos gruesa.
Y todas esas corazas, resistencia estructural, compartimentación y demás ¿para qué sirve? Pues para aumentar el precio y el desplazamiento, evidentemente. Para la protección, poco.
Saludos
Recordemos como los norteamericanos, copiados por todo el mundo menos los alemanes, de pasaron al “todo o nada”. Y recordemos que el sistema estaba pensado para largas distancias. En un combate ¿qué pasaría?
- Si el combate era desde corta distancia (zona 1), los proyectiles llegarían con la máxima energía cinética y no podrían ser detenidos: perforarían la coraza y estallarían en el interior. No siempre, el Kirishima hubiera debido perforar la coraza del South Dakota (disparó desde poco más de 6.000 m) y no lo logró, un proyectil se aplastó contra uan barbeta (440 mm de coraza endurecida).
- Si el combate se libraba desde muy lejos (zona 3), el riesgo era también muy alto. Los proyectiles caerían casi como bombas, acelerados por la gravedad, y atacarían la cubierta blindada que, por gruesa que fuese, no podía resistir eso: incluso la del Yamato era de 232 mm (como máximo) y eso no puede parar un proyectil de 356 mm, menos de 406 mm. A cambio, en esos combates a muy largas distancias la probabilidad de impacto era baja.
- Si el combate se libraba a distancias intermedias (zona inmune), los proyectiles llegarían con menos energía y o serían detenidos por la coraza, o rebotarían en la cubierta blindada. El buque podría recibir daños menores (los proyectiles que alcanzasen zonas no blindadas no estallarían y causarían daños pequeños) y seguiría combatiendo.
Si el enemigo tiene cañones muy potentes, la zona 1 (la cercana) es mucho más ancha que si los cañones enemigos son pequeños y tu coraza gruesa. Pero de todo esto se obtiene una segunda conclusión:
Si se combate a larga distancia ¿es mejor muchos proyectiles o pocos? Pues lo segundo. A largas distancias, el tiempo de vuelo es tan largo que los proyectiles aún no han caído cuando los cañones ya han recargado (salvo diseños fallidos como los Rodney). De poco sirve tener un cañón de tiro rápido como el 280 mm alemán si no puedes aprovechar la cadencia de tiro (puedes disparar varias salvas para tratar de ahorquillar, pero se gasta mucha munición). Por eso es mejor un cañón de gran calibre, aunque sea de menos velocidad inicial, que uno de pequeño calibre. Además, los proyectiles de gran calibre y menor velocidad inicial caerán verticalmente antes, lo que hace que la zona 3 (la lejana) esté más cerca y pueda ser aprovechada.
El Bismarck no tenía nada de eso. A corta distancia su coraza era vulnerable, pero a medias los proyectiles que tocasen la coraza superior o la cubierta llegarían a zonas vitales sin ser detenidos, en la zona 3 los impactos serían aún más peligrosos. Es decir, el Bismarck no tenía zona inmune.
Así pues, a larga distancia (zona 3) lo que primaba era la puntería: dispersión de los cañones, control de tiro, etcétera. Buena la alemana, tan buena o mejor la inglesa o norteamericana (recordemos que en Surigao el Yamashiro fue hundido desde distancias entre 18.000 y 22.000 m, de noche).
A distancia media, los barcos nuevos estarían en su elemento, y el Bismarck correría un riesgo terrible.
A corta distancia, los dos correrían riesgo, pero la coraza alemana era menos gruesa.
Y todas esas corazas, resistencia estructural, compartimentación y demás ¿para qué sirve? Pues para aumentar el precio y el desplazamiento, evidentemente. Para la protección, poco.
Saludos