Leyendo este libro uno se da cuenta de lo difícil que resultó para muchos países pequeños, sin peso en Europa, sobrevivir fuera de la influéncia de las grandes potencias de la época. Alemania y Rusia.
Manhenreim trató según se desprende en sus memorias de salvaguardar la independencia de su país a costa de sacrificios y renuncias muy dolorosas. Enfrentados tras la revolución sovietica con la Rusia comunista de la que pocos años antes se habian separado tras la muerte del zar, se demuestra a lo largo de todo el libro como estos pequeños estados fueron simples peones de las grandes potencias. Alemania abandonó a su suerte a los finlandeses mientras el pacto Ribentropp-Molotov fue útil ( guerra invierno del 39), y tras las hostilidades con Rusia apoyó con tropas y material la nueva guerra de este país al lado de la Alemania Nazi frente al enemigo comun, por contra los aliados iniciales en la guerra de invierno del 39 ( Francia e Inglaterra) pasaron tras el inicio de brabaroja a ser enemigos del pais escandinavo.
El libro critica también la posición egoista de los paises nordicos tras la invasión sovietica del 39.
En resumen un libro muy ameno e interesante ya no por los aspectos estratégicos o puramente militares, sino por la vertiente político-diplomàtica.
Un saludo.
