mark escribió:¡Hola Antonio!
Me resultó un discurso interesante por varios motivos:
- Se pronunció en febrero de 1.943, justo después de "Stalingrado", y marca con claridad y sin tapujos las dudas sobre la victoria de Alemania en la guerra por parte del gobierno de España.
Efectivamente, Mark, lo que tú mencionas sobre la coyuntura militar durante la cual fueron escritas esas reflexiones es muy importante para comprenderlas mejor. Yo no había relacionado el texto en ese amplio contexto pero ciertamente que es un aspecto clave.
mark escribió:- Es un intento de acercamiento hacia los aliados occidentales, en este caso Gran Bretaña, por parte de España, en un momento en el que la guerra se decantaba claramente a favor de los aliados. Se intentaba, al mismo tiempo, justificar los supuestos motivos del gobierno español para haber desarrollado una política de acercamiento a Alemania desde el inicio de la guerra. Parece, en cierto modo, un ofrecimiento a Gran Bretaña cuando dice: "Tenemos la certeza de que existen intereses europeos cuya trascendencia podría obligarnos a abandonar nuestra neutralidad para lanzarnos decididamente a una guerra." . Es decir, si existiera una unión de países que hicieran frente común contra la URSS en la que participara Gran Bretaña, convirtiéndose el conflicto en una lucha contra el comunismo, España abandonaría su neutralidad.
Ciertamente, a mí me parece que ése es el mensaje entre líneas.
Paso a comentar otros aspectos de tan interesante documento:
"El comunismo representa un peligro inminente en todo el mundo, y si, además, recibe el terrible empuje de una gran potencia, resulta evidente para cualquiera, a menos que camine a ciegas entre los acontecimientos, la necesidad de mantenerse alerta. Nosotros, los españoles, no somos los únicos en experimentar ese temor, pues hay también otras naciones, sobre todo las vecinas de Rusia, que comparten tales inquietudes.
Mark: me parece que la "gran potencia" a la cual se refiere es los Estados Unidos apoyando a Rusia, recordemos que en ese tiempo se dió lo que ha pasado a la historia como "La extraña alianza" de la U.R.S.S., U.S.A. y la Gran Bretaña". La decidida intervención norteamericana en apoyo a la URSS extrañó a millones en todo el mundo, pues al tiempo que argumentaba combatir un estado totalitario (Alemania) estaba salvando de las llamas a otro estado totalitario (la URSS). Esta paradoja la menciona Herbert Lottman en su libro "El colapso de París: 1940", en el cual menciona que ante las presiones norteamericanas para flexibilizar el modelo fascista español como condición previa a cualquier ayuda económica y militar, el Ministro de Exteriores de Franco le espetaba la inmensa ayuda política, económica y militar que U.S.A. estaba facilitándole a borbotenes a Stalin.
Aquellos países simpatizan sin duda con cualquier forma de oposición a Rusia. Y creemos firmemente que Inglaterra adoptará también esa actitud si se produce una victoria rusa.
Palabras proféticas: se produjo la victoria rusa y los cañones de Stalin tomaron Berlín y se asentaron en varios países vecinos. Luego vendría la oposición de Churchill cuando pronunció su discurso "Ha caído una cortina de hierro en el corazón de Europa..."
El hecho de no ser protagonistas en la guerra nos permite observar los acontecimientos con la mayor imparcialidad.
Hmmm.... sí pero no: Franco siempre simpatizó con la causa Nazi, además de la deuda histórica por haber recibido ayuda de Hitler en contra de los Republicanos durante la Guerra Civil Española.
Inglaterra sigue de momento un curso diametralmente opuesto a sus intereses...
En ésto coincidía completamente con Hitler, recordemos que éste siempre sostuvo que la plutocracia británica (según él en control de la raza judía) estaba engañando al pueblo británico y empujándolo a una guerra en contra de sus propios intereses. Frases como ésta niegan vehementemente la neutralidad argumentada en el párrafo anterior.
Si los acontecimientos siguen concatenándose como lo han hecho hasta ahora, Rusia penetrará a fondo en territorio alemán.
La historia le dió la razón: la URSS llegó hasta el corazón de Alemania y ondeó su bandera comunista sobre la Cancillería alemana.
Y nosotros nos preguntamos: ¿dónde acechará el mayor peligro, no sólo al Continente sino también a Inglaterra, si esa conjetura llega a confirmarse? (......) Y si Rusia representaba ya el máximo peligro para Europa, ¡cuál no será esa peligrosidad con su actual importancia militar e industrial y su predominio totalitario y comunista!
Pareció leer los signos de los tiempos: ese predominio totalitario de la URSS, opuesto a la gran nación democrática norteamericana fue el inicio el basamento de la Guerra Fría.
Ahora formulamos una segunda pregunta: ¿hay algún país en Europa central, esa maraña carente de equilibrio y unidad, azotada además por las guerras y las intrusiones extranjeras, hay algún país, decimos, capaz de oponerse con efectividad a los ambiciosos planes de Stalin? ¡No, ciertamente! ¿Qué se puede esperar de Francia, ese país incapacitado para la acción, y vencido, desmembrado y sumido en el más absoluto caos? Sólo dificultades.
Si no pudo Alemania, mucho menos podría hacerlo Francia e Italia y mucho menos aún España, la cual apenas salía de la terrible Guerra Civil y había quedado postrada económicamente, militarmente y espiritualmente...
Si se produjera la derrota de Alemania, podemos tener la seguridad de que el comunismo sería el único sistema político practicable. He ahí por qué consideramos tan grave esta situación; opinamos que si Inglaterra analiza con sobriedad los hechos, llegará a la conclusión de que nadie podrá mantener a Rusia dentro de sus fronteras si se produce una victoria soviética sobre Alemania.
En ésto, como en lo anterior, el tiempo dijo la verdad ("Tempore veritas") y la mitad de Europa quedó en control de la URSS durante un largo período, el cual terminó con el colapso de la Unión Soviética y la caída del Muro de Berlín en 1989.
Saludos cordiales desde Nueva York,
Antonio Machado.
Con el Holocausto Nazi en contra de la Raza Judía la inhumanidad sobrepasó a la humanidad.