En agosto de 1941 la joven Andrée De Jongh alias "Dédée", una joven belga que aún no había cumplido los 25 años y que había servido en la cruz roja de su país, se presento al consulado británico de Bilbao, llevaba con ella un soldado del ejercito británico y dos oficiales belgas a los que había salvado en la Europa ocupada de caer en manos de los nazis.
En el consulado la recibieron con desconfianza, pensaban que bien podía ser una trampa urdida por los nazis, era muy difícil creer que alguien en apariencia tan frágil hubiese sido capaz de atravesar toda Francia con 3 fugitivos y haber cruzado en plena noche los Pirineos, sin que las patrullas alemanas hubieran dado con ellos. Los miembros de la legación británica, se sintieron predispuestos en un principio, a rechazar su plan para salvar pilotos aliados.
Los británicos dudaban sobre que actitud tomar, pero un joven secretario político de la embajada en Madrid, llamado Michael Creswell quien al mismo tiempo era el responsable del MI9 no tenía tantas vacilaciones, por ello se dirigió al consulado de Bilbao a fin de entrevistarse con "Dédée", en esta reunión llegaron a un acuerdo, la Red Cométe evacuará a los pilotos aliados derribados sobre Europa y los británicos financiaran sus actividades y les proporcionaran protección frente a las autoridades españolas. Asimismo "Dédée" exige verse libre de cualquier interferencia gubernamental, es decir, colaborarían con los servicios secretos pero no se integrarían en ellos.
De esta manera la Red Cométe que Dédée había fundado junto a Arnold Deppé y su padre, Fréderic De Jongh, obtuvo soporte financiero y logístico para proseguir con sus actividades en Bélgica y Francia, recogiendo, escondiendo y trasladando a los pilotos aliados caídos. En las primeras actuaciones eran llevados a Inglaterra en barca a través del Canal de la Mancha, sin embargo esta ruta se tornó impracticable y no les dejó más remedio que atravesar Francia, cruzar los Pirineos vascos furtivamente y una vez en España, llegar al territorio británico de Gibraltar. Desde el primer paso, en Julio de 1941, quedó claro que una vez en España no era fácil para los evadidos llegar a Gibraltar, si eran capturados por la guardia civil serían entregados a los alemanes o quedarían internados en España, es por eso principalmente por lo que necesitaban la ayuda británica. Así a partir de ahora, una vez los refugiados lleguen a San Sebastian un vasco, Benardo Aracama, se encargara de ponerse en contacto con el consulado de Bilbao y a los pocos días un coche venido desde la embajada de Madrid se encargará del traslado de éstos hasta Gibraltar.
El paso de los Pirineos era la etapa más peligrosa y dura físicamente, si los alemanes descubrían a alguien ocultándose en los montes podían estar seguros de que dispararían primero y preguntarían después, el paso se hacia a pie, generalmente de noche en jornadas de 8 o 9 horas y el tiempo era en muchas ocasiones horroroso, de manera que el paso del Bidasoa se tornaba impracticable. Para realizar este paso se necesitaba la colaboración de gente muy especial, conocedora de todos los pasos fronterizos (muchos de ellos caminos de cabras) y los movimientos de la guardia civil por un lado y las fuerzas alemanas por otro. En este papel destacó Florentino Goikoetexea, nacido en Hernani (Guipuzcoa), exiliado en Francia tras la guerra civil, era por aquella época un contrabandista buscado a ambos lados de la frontera.
Los aviadores liberados por la Red Cométe, a su vuelta a Inglaterra empiezan a esparcir comentarios sobre la valentía y belleza de Dédée y la fortaleza y astucia de Florentino, estos se fueron convirtiendo en mitos para los aviadores aliados desplegados en la isla, un motivo de esperanza si caían derribados.
Dédée de Jongh dirigió la organización hasta el 15 de enero de 1943, día en que fue detenida en un caserío de Urrugne (Urruña), lugar cercano a San Juan de Luz en el país vasco francés, junto a ella detienen a la propietaria del caserío Frantxia Usandizaga y 3 aviadores. Hasta ese momento había ayudado personalmente a pasar la frontera a más de 100 pilotos aliados, condenada a muerte pasó el resto de la guerra en campos de concentración pero sobrevivió a ello, Frantxia fue menos afortunada y falleció en el campo de concentración de Ravensbruck en abril de 1945. La Red Cométe siguió actuando bajo la dirección de otro belga, Jean-Francois Nothomb, alias "Franco"; en total la organización consiguió poner a salvo aproximadamente a 800 personas, la mayor parte de ellas eran aviadores.
En abril de 1943, un belga llamado Jean Masson, comienza a trabajar para la red cométe en el traslado de evadidos de Bruselas a París. Su nombre en realidad es Jacques Desoubri, un doble agente nazi, gracias a él, Fréderic De Jongh es detenido por la gestapo el 7 de Junio de 1943, más tarde será ejecutado por los nazis, decenas de miembros de la organización son detenidos en Bruselas y París. El resto de miembros en libertad no saben que Masson es un traidor.
A principios de 1944 reaparece Jacques Desoubri bajo el alias de Pierre Boulain, de nuevo gracias a él, la red cométe sufre un duro golpe, el 7 de Enero de 1944 es detenido por la gestapo Jean-Francois Nothomb alias "Franco". Afortunadamente una joven agente de cométe, Micheline Dumont, alias, "Lily", desenmascara al doble agente y lo hace justo a tiempo cuando los aliados planeaban la operación maratón.
Conforme la guerra se iba prolongando cada vez era mayor el número de pilotos que debían ser sacados de la Europa ocupada, además debido a los preparativos prevíos al desembarco de Normandia, las dificultades para trasladar pilotos hacía España eran mucho mayores, debido en gran parte a los masivos bombardeos sobre las lineas de comunicación francesa, muy especialmente el ferrocarril. También se prevía que el propio desembarco cortaría la comunicación entre la Francia ocupada y los Pirineos, para evitar todos estos problemas el MI9 ideó un plan. Los fugitivos se irían llevando a campos preparados en bosques de Francia y Holanda donde esperarían hasta ser liberados por los aliados. Este plan se llamó operación maratón y la Red Cométe fue la escogida para llevarlo a cabo. Se crearían zonas de recogida en el bosque de Fréteval cercano a Tours, Francia y una más en las Árdenas belgas.
En abril de 1944 son lanzados en paracaídas sobre Francia dos agentes de origen belga que trabajaban para el MI9, estos serían los encargados de la supervisión de los campos creados por la operación maratón. Jean de Blommaert alias Thomas Rutland fue el agente encargado de la supervisión del campo de Fréteval en Francia, 152 aviadores estaban allí cuando llegaron los aliados. Daniel Mouton (desconozco si este era su nombre o su alias), se encargó del campo situado en las Árdenas belgas, donde los aliados encontraron otros 145 pilotos felizmente acampados.
A pesar de las múltiples caídas de miembros de la Red, esta nunca fue desarticulada por completo. Colaboraron en ella cerca de 1.700 belgas, franceses y españoles. Alrededor de 700 fueron detenidos y cerca de 200 perdieron la vida fusilados o en campos de concentración. Consiguió poner a salvo a unas 800 personas la mayor parte aviadores, a esta cifra habría que sumar los evadidos por medio de la operación maratón.