Vaya qué anécdota tan curiosa...!axmann escribió:Visita del Duce a Alemania
Spitzy se refiere a una anécdota que aconteció durante la visita de Mussolini a Alemania en 1937. Con ocasión de esa visita oficial, un imponente palacio de los antiguos príncipes y presidente del Reich se dispuso como los aposentos de Mussolini. Tras el grandioso recibimiento que se le concedió a Mussolini en las calles de Berlin, a pesar del frío y la lluvia, Hitler decidió acompañar personalmente a Mussolini hasta la residencia donde se alojaría. En el camino, Mussolini, quien hablaba alemán, le manifestó a Hitler que sentía cierto malestar en su garganta, por lo que temía que podía haberse resfriado. Entonces, Hitler respondió: "Su Excelencia (para esa época él todavía se refería a Mussolini de esa manera), ...le puedo sugerir que tome un baño caliente y vaya directo a la cama tan pronto como sea posible". El Duce aceptó complacido el consejo. (p. 126)
Mussolini entró al magnífico palacio y se dirigió a su habitación. Para su sorpresa, su ayudante le anunció, al poco rato, que no había agua caliente en el baño. Por tanto, esa noche Mussolini debió bañarse con agua fría y cuando fue a la cama también encontró las sábanas completamente frías. A la mañana siguiente, Hitler supo del incidente, enfureciendo de inmediato y exigiendo una investigación de tal evento. Dicho incidente simplemente obedeció al fiel cumplimiento de sus deberes por parte del funcionario a cargo del palacio. La investigación arrojó que existía un decreto que databa de los primeros años del Ministerio de Interior prusiano, ratificado posteriormente por von Hindenburg, que establecía que la calefacción central de los edificios públicos debía de apagarse a las 5 pm. En consecuencia, Mussolini había sido víctima de la tradicional debida obediencia de los prusianos. Lamentablemente, nadie se molestó en pensar que existiría un burócrata que obedecería tal regulación al pie de la letra. En consecuencia, el funcionario fue detenido en la sede central de la Gestapo. Finalmente, no hubo cargos y fue liberado a los pocos días después de que Goering intercediera por él. (p. 127)
Me pregunto cómo fue posible que nadie pensara que existiría un burócrata que obedecería tal regulación al pie de la letra, siendo los alemanes tan rigurosamente (obsesivamente?) apegados al orden y al cumplimiento de las normas...
En todo caso, me he divertido imaginando la teatralidad alrededor del incidente: el Duce con frío, el Führer rojo de ira y el pobre funcionario tan cumplidor de sus deberes...
Gracias por compartir tan interesantes materiales, estimado !
Saludos cordiales desde Nueva York hasta Nottingham,
Antonio Machado