; algo más......................Grupo Operativo Independiente "Narew".
Derrota en Andrzejewo y Łętownica.
En Srebrny Borek, Zagroby y Osowiec, defendidos por el 3º Batallón del 33º Regimiento de infantería, comenzó la lucha por cada casa, bosque y colina. Los alemanes, apoyados por nuevas reservas y una cantidad cada vez mayor de artillería, comenzaron a empujar a las tropas polacas hacia el sur. Murió el Mayor Józef Sikora, comandante del 3º Batallón del 33º Regimiento de infantería. Al anochecer del 12 de septiembre, el círculo alemán se cerró alrededor de la 18º División de Infantería, que todavía estaba luchando. Alrededor de las 20:00 horas, el Coronel Hertl, durante una reunión informativa con los oficiales en Łętownica, dio la orden de abrirse paso.
Se formó una unidad de ataque ("Taran") bajo el mando personal del Coronel Hertl, que contaba con unos 500 soldados. La orden suponía: la infantería atacaría en primera línea, los restos de artillería detrás de la infantería y detrás de la artillería una columna de servicios de división y otra con heridos y enfermos. Al Teniente Coronel Wacław Malinowski (restos del 42º Regimiento de Infantería) y el Teniente Coronel Lucjan Stanek (restos del 33º Regimiento de Infantería) se le ordenó abrirse paso por su cuenta y llegar a Nur. Al anochecer, el Coronel Hertl dirigió el último ataque contra Andrzejewo.
Sin embargo, la unidad no pudo atravesar el potente fuego de artillería y ametralladoras. Varias decenas de soldados murieron, entre ellos: el Coronel Hertl, el Capitán diplomado Hodakowski, el Capitán diplomado Karpinski. También hubo muchos heridos. Los supervivientes se retiraron a Łętownica. ¡El fuego alemán alcanzará también el jefe de la columna de artillería!. Aquí también hubo muertos y heridos. Tras confirmar la destrucción de la unidad de choque, la artillería regresó a Łętownica. Allí, se destruyeron equipos y armas para dejarlos inutilizables. Se ordenó a los soldados que se abrieran camino individualmente.
Esto determinó el destino de las unidades restantes de la División, que fueron derrotadas la noche del 12 al 13 de septiembre. Sólo unas pocas compañías y pelotones de la 18º División de Infantería continuaron luchando en los bosques entre los ríos Bug y Narew hasta los primeros días de octubre. Salieron del cerco: unas 100 personas, encabezadas por un oficial de la compañía de asistencia de la división; caballería divisional bajo el mando del Teniente Roszkowski, que se unió al 5º Regimiento de Ulanos y participó en las batallas cerca de Kock; El grupo del Teniente Coronel Stanek, de unas 400 personas, que fue rápidamente derrotado cerca de Zaręby Kościelne después de un combate con una unidad de la 206. División de Infantería alemana; el grupo del Teniente Coronel Malinowski, de unas 120 personas, que se unieron a la Brigada de Caballería Suwałki y luego al GO del General Kleberg; el grupo del Mayor Drewnowski, algunos de los cuales, después de ser derrotados por los alemanes cerca de Rutki, formaron una unidad partisana al mando del Teniente Coronel "Tynki" con los supervivientes de la Brigada de Caballeria Podlasie, que operó en los pantanos de Biebrza hasta mayo de 1940; Tras derrotar al grupo del jefe del Estado Mayor de la división, el Teniente Coronel Pluta-Czachowski, cerca de Warchoły, los restos que cruzaron hacia la otra orilla del río Bug se unieron a la 41º División de Infantería.
En la Łętownica en llamas permanecían alrededor de 3.000 heridos graves y enfermos en carros, en las casas y en el puesto de asistencia médica, varios centenares de vehículos, unos 100 conductores militares y civiles y un pequeño grupo de rezagados. El campo de batalla alrededor de Łętownica, y especialmente entre Łętownica y Andrzejewo, estaba cubierto de caídos en combate y heridos graves que durante el día no podían ser transportados al puesto de asistencia. Entre los heridos también se encontraba el Teniente Coronel Witold Sztark, comandante del 18º pal (regimiento de artillería ligera), gravemente herido, quien, siendo el rango más antiguo, asumió la tarea de establecer contacto con los alemanes, pedir ayuda para los heridos y enterrar a cientos de muertos. Después de la batalla en Łętownica, los soldados hechos prisioneros corrieron suerte diferente.
Los alemanes transportaron a los heridos graves a un hospital de campaña. La mayoría de ellos fueron internados en un hospital improvisado en la iglesia de Andrzejewo. Después de unos días, fueron trasladados a una escuela local y luego evacuados al cautiverio. Los conductores militares y civiles capturados, sanos y levemente heridos, estaban agrupados en la plaza del cuartel de Zambrów. En la noche del 13 al 14 de septiembre, cuando todos los prisioneros yacían uno al lado del otro, corrían sueltos sobre ellos caballos hambrientos y sin agua. Hubo pánico. Luego, los alemanes abrieron fuego con ametralladoras contra los que se levantaban, matando e hiriendo a muchos. Los heridos gimieron hasta la mañana sin ayuda de los alemanes. Al día siguiente, todos fueron trasladados desde Zambrów al cuartel de Łomża. Los oficiales fueron alojados en la iglesia de la guarnición, mientras que las tropas se mantuvieron en la plaza del cuartel al aire libre. Después de unos días en Łomża, todo el grupo partió escoltado (los oficiales fueron llevados en coche) a la estación fronteriza de Długów.
Se formó una unidad de ataque ("Taran") bajo el mando personal del Coronel Hertl, que contaba con unos 500 soldados. La orden suponía: la infantería atacaría en primera línea, los restos de artillería detrás de la infantería y detrás de la artillería una columna de servicios de división y otra con heridos y enfermos. Al Teniente Coronel Wacław Malinowski (restos del 42º Regimiento de Infantería) y el Teniente Coronel Lucjan Stanek (restos del 33º Regimiento de Infantería) se le ordenó abrirse paso por su cuenta y llegar a Nur. Al anochecer, el Coronel Hertl dirigió el último ataque contra Andrzejewo.
Sin embargo, la unidad no pudo atravesar el potente fuego de artillería y ametralladoras. Varias decenas de soldados murieron, entre ellos: el Coronel Hertl, el Capitán diplomado Hodakowski, el Capitán diplomado Karpinski. También hubo muchos heridos. Los supervivientes se retiraron a Łętownica. ¡El fuego alemán alcanzará también el jefe de la columna de artillería!. Aquí también hubo muertos y heridos. Tras confirmar la destrucción de la unidad de choque, la artillería regresó a Łętownica. Allí, se destruyeron equipos y armas para dejarlos inutilizables. Se ordenó a los soldados que se abrieran camino individualmente.
Esto determinó el destino de las unidades restantes de la División, que fueron derrotadas la noche del 12 al 13 de septiembre. Sólo unas pocas compañías y pelotones de la 18º División de Infantería continuaron luchando en los bosques entre los ríos Bug y Narew hasta los primeros días de octubre. Salieron del cerco: unas 100 personas, encabezadas por un oficial de la compañía de asistencia de la división; caballería divisional bajo el mando del Teniente Roszkowski, que se unió al 5º Regimiento de Ulanos y participó en las batallas cerca de Kock; El grupo del Teniente Coronel Stanek, de unas 400 personas, que fue rápidamente derrotado cerca de Zaręby Kościelne después de un combate con una unidad de la 206. División de Infantería alemana; el grupo del Teniente Coronel Malinowski, de unas 120 personas, que se unieron a la Brigada de Caballería Suwałki y luego al GO del General Kleberg; el grupo del Mayor Drewnowski, algunos de los cuales, después de ser derrotados por los alemanes cerca de Rutki, formaron una unidad partisana al mando del Teniente Coronel "Tynki" con los supervivientes de la Brigada de Caballeria Podlasie, que operó en los pantanos de Biebrza hasta mayo de 1940; Tras derrotar al grupo del jefe del Estado Mayor de la división, el Teniente Coronel Pluta-Czachowski, cerca de Warchoły, los restos que cruzaron hacia la otra orilla del río Bug se unieron a la 41º División de Infantería.
En la Łętownica en llamas permanecían alrededor de 3.000 heridos graves y enfermos en carros, en las casas y en el puesto de asistencia médica, varios centenares de vehículos, unos 100 conductores militares y civiles y un pequeño grupo de rezagados. El campo de batalla alrededor de Łętownica, y especialmente entre Łętownica y Andrzejewo, estaba cubierto de caídos en combate y heridos graves que durante el día no podían ser transportados al puesto de asistencia. Entre los heridos también se encontraba el Teniente Coronel Witold Sztark, comandante del 18º pal (regimiento de artillería ligera), gravemente herido, quien, siendo el rango más antiguo, asumió la tarea de establecer contacto con los alemanes, pedir ayuda para los heridos y enterrar a cientos de muertos. Después de la batalla en Łętownica, los soldados hechos prisioneros corrieron suerte diferente.
Los alemanes transportaron a los heridos graves a un hospital de campaña. La mayoría de ellos fueron internados en un hospital improvisado en la iglesia de Andrzejewo. Después de unos días, fueron trasladados a una escuela local y luego evacuados al cautiverio. Los conductores militares y civiles capturados, sanos y levemente heridos, estaban agrupados en la plaza del cuartel de Zambrów. En la noche del 13 al 14 de septiembre, cuando todos los prisioneros yacían uno al lado del otro, corrían sueltos sobre ellos caballos hambrientos y sin agua. Hubo pánico. Luego, los alemanes abrieron fuego con ametralladoras contra los que se levantaban, matando e hiriendo a muchos. Los heridos gimieron hasta la mañana sin ayuda de los alemanes. Al día siguiente, todos fueron trasladados desde Zambrów al cuartel de Łomża. Los oficiales fueron alojados en la iglesia de la guarnición, mientras que las tropas se mantuvieron en la plaza del cuartel al aire libre. Después de unos días en Łomża, todo el grupo partió escoltado (los oficiales fueron llevados en coche) a la estación fronteriza de Długów.
Fuente: http://www.lomza.friko.pl
Wrzesien_1939_roku_na_Bia_ostocczyznie_.pdf
Saludos. Raúl M
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