El KV-2 disparando en las pruebas.
https://tanks-encyclopedia.com/ww2/soviet/kv-2_107-mm/
El arma dañada fue transportada de regreso a Gorky, donde fue reparada. A 10 de julio, la Planta 92 ya había completado cuatro cañones adicionales, además de tener 214 cañones en varias etapas de producción.
Todavía no había señales de ningún tanque para el arma de Grabin. La verdad es que los trabajos en el KV-4 se paralizaron por completo después de mayo. En cuanto a los KV-3 y KV-5, los trabajos proseguían tímidamente. El KV-3 tenía una maqueta a escala real y la mayoría de los planos listos, mientras que el KV-5 aún estaba entrando en la etapa de planos. Dadas las circunstancias, el GABTU modificó su solicitud y pidió sólo 35 ZiS-6, 5 en octubre, 10 en noviembre y 20 en diciembre.
El inicio de la guerra el 22 de junio afectó significativamente a estos proyectos, y LKZ tuvo que aumentar la producción del KV-1, además de centrarse en la reparación de tanques. La situación se agravó cuando las fuerzas alemanas se acercaban a Leningrado en agosto, por lo que la oficina de diseño SKB-2 fue evacuada a ChTZ, en Chelyabinsk. Si bien el KV-4 y el KV-5 fueron cancelados por completo, los planes de continuar trabajando en el KV-3 persistieron. Finalmente, a finales de 1941, era obvio que tampoco saldría nada de ello.
Al darse cuenta de su error de comenzar prematuramente la producción del arma, en julio Grabin propuso la idea de instalarlo directamente en el KV-2, pero esto no llegó a ninguna parte, ya que la producción del KV-2 había terminado el mes anterior. En septiembre, propuso el ZiS-6A, un sistema similar, si no directamente al KV-4, con un cañón coaxial 20-K de 45 mm. Esto tampoco llegó a ninguna parte.
A pesar de la victoria de Grabin en su venganza personal con los diseñadores de tanques, su decepción por la situación fue considerable: “La producción del ZiS-6 aumentaba día a día. Pero todavía no había señales de los tanques a los que estaba destinado el arma. Incluso después del comienzo de la guerra, la planta de Kirov no entregó ni un solo tanque. La falta del nuevo tanque nos obligó a limitar la producción y eventualmente cancelarla. Es difícil y vergonzoso escribir sobre esto, en aquellos días en que todo lo que podía disparar, incluso las piezas de museo, se enviaba al frente, había que devolver alrededor de 800 cañones de armas al horno de fundición”.
La historia del ZiS-6 no termina aquí. Se utilizó para desarrollar algunos cañones aún más grandes de 107 mm, como el ZiS-24, pero este cañón también sufrió un destino similar en la primavera de 1942. Sin embargo, lo más importante es que el ZiS-6 fue recordado en febrero de 1943, cuando apareció el Tiger. Stalin volvió a llamar a Grabin, quien le aseguró que podría producir el ZiS-6 en 15-20 días. Sin embargo, nada se materializó.
Se desconoce el destino del KV-2 con número de serie B-9680, ya que se mencionó por última vez que estaba en el stock de la Planta 92 en septiembre de 1941.
El banco de pruebas KV-2 con la pieza de 107 mm demostró que había varios problemas con el cañón ZiS-6, y la confianza de Grabin de comenzar la producción prematuramente era un error. El arma todavía necesitaba refinamientos y, finalmente, los tanques pesados KV que debían montarla fueron cancelados con el estallido de la guerra.
El KV-2 con el ZiS-6
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