fuente https://tanks-encyclopedia.com/nahuel-dl-43/
Entre 1916 y 1930 Argentina adquirió su primer vehículo militar, el vehículo blindado Vickers Crossley Modelo 25. Para 1930 el estancamiento económico y la violencia política constante conducirían al primero de los muchos golpes militares que obstaculizarían el progreso de Argentina. No sería hasta 1937 cuando Argentina adquirió varios tanques ligeros Vickers Carden-Loyd Modelo 1934 a Gran Bretaña, destinados a ser utilizados como vehículos de entrenamiento en preparación para adquirir tanques más grandes y poderosos. El plan inicial para comprar tanques LT vz. 38 a Checoslovaquia, pero la desaparición del país tras el Acuerdo de Munich (1938) acabo con esos planes y Argentino se vio incapaz de comprar tanques a su proveedor tradicional, Gran Bretaña, ni a Alemania, pese a las simpatías filonazis del gobierno, lo que llevaría, tras el estallido de la Segunda Guerra Mundial a que EEUU asilara a Argentina y esto imposibilitara la importación de tanques extranjeros. Por tanto, había que encontrar una solución local.
El teniente coronel Alfredo Aquiles Baisi tenía una distinguida carrera. De familia militar, había sido agregado militar en Estados Unidos. Había diseñando el uniforme para los tripulantes de tanques argentinos y había supervisado la modificación de algunos tractores en vehículos de asalto llamados "Vinchuca". En 1942, el régimen argentino aprobó la Ley 12.709, una ley que creó la Dirección General de Fabricaciones Militares. Esta institución tenía la tarea de organizar diferentes industrias en todo el país para la producción de un tanque doméstico que cumpliera el rol de principal vehículo blindado de las fuerzas blindadas argentinas. En 1943, la Dirección encargó la construcción de un tanque de 35 toneladas a Baisi. Sorprendentemente, Baisi y su equipo pudieron entregar un modelo de madera a escala 1: 1, designado como "251", en 45 días.
El modelo de madera se consideró satisfactorio y las autoridades competentes solicitaron un prototipo. El trabajo en este prototipo, y presumiblemente también en el modelo de madera, tuvo lugar en el Arsenal Esteban de Luca en Boulogne Sur Mer, en las afueras de Buenos Aires. El prototipo, con el número "C 252", sin torreta, se terminó tras de dos meses de trabajo y se mostró a las autoridades militares impresionadas en el arsenal donde se estaba construyendo. No mucho después, fue probado frente a una multitud que incluía al presidente y otros líderes civiles y militares. Los resultados fueron lo suficientemente favorables para solicitar una serie de producción.
Al parecer, según algunas de las fuentes, el sueño de Baisi era crear una familia de vehículos basados en el chasis del Nahuel.
Alfredo Aquiles Baisi
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Entre 1916 y 1930 Argentina adquirió su primer vehículo militar, el vehículo blindado Vickers Crossley Modelo 25. Para 1930 el estancamiento económico y la violencia política constante conducirían al primero de los muchos golpes militares que obstaculizarían el progreso de Argentina. No sería hasta 1937 cuando Argentina adquirió varios tanques ligeros Vickers Carden-Loyd Modelo 1934 a Gran Bretaña, destinados a ser utilizados como vehículos de entrenamiento en preparación para adquirir tanques más grandes y poderosos. El plan inicial para comprar tanques LT vz. 38 a Checoslovaquia, pero la desaparición del país tras el Acuerdo de Munich (1938) acabo con esos planes y Argentino se vio incapaz de comprar tanques a su proveedor tradicional, Gran Bretaña, ni a Alemania, pese a las simpatías filonazis del gobierno, lo que llevaría, tras el estallido de la Segunda Guerra Mundial a que EEUU asilara a Argentina y esto imposibilitara la importación de tanques extranjeros. Por tanto, había que encontrar una solución local.
El teniente coronel Alfredo Aquiles Baisi tenía una distinguida carrera. De familia militar, había sido agregado militar en Estados Unidos. Había diseñando el uniforme para los tripulantes de tanques argentinos y había supervisado la modificación de algunos tractores en vehículos de asalto llamados "Vinchuca". En 1942, el régimen argentino aprobó la Ley 12.709, una ley que creó la Dirección General de Fabricaciones Militares. Esta institución tenía la tarea de organizar diferentes industrias en todo el país para la producción de un tanque doméstico que cumpliera el rol de principal vehículo blindado de las fuerzas blindadas argentinas. En 1943, la Dirección encargó la construcción de un tanque de 35 toneladas a Baisi. Sorprendentemente, Baisi y su equipo pudieron entregar un modelo de madera a escala 1: 1, designado como "251", en 45 días.
El modelo de madera se consideró satisfactorio y las autoridades competentes solicitaron un prototipo. El trabajo en este prototipo, y presumiblemente también en el modelo de madera, tuvo lugar en el Arsenal Esteban de Luca en Boulogne Sur Mer, en las afueras de Buenos Aires. El prototipo, con el número "C 252", sin torreta, se terminó tras de dos meses de trabajo y se mostró a las autoridades militares impresionadas en el arsenal donde se estaba construyendo. No mucho después, fue probado frente a una multitud que incluía al presidente y otros líderes civiles y militares. Los resultados fueron lo suficientemente favorables para solicitar una serie de producción.
Al parecer, según algunas de las fuentes, el sueño de Baisi era crear una familia de vehículos basados en el chasis del Nahuel.
Alfredo Aquiles Baisi
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