El armisticio italiano truncó uno de los planes más osados de la WW2. Llevar la guerra hasta la propia New York, y otro análogo en Freetown. Los orígenes de esta empresa se remontaba al verano de 1941, cuando se preciso la idea de emplear a los hombres Gamma, o sea los buceadores de asalto de la 10 flotilla MAS, en ataques contra el interior de puertos enemigos lejanos, transportados por un medio sumergible mucho más pequeño que un submarino normal, pero con cierta capacidad de transportar un equipo de buceadores con sus cargas explosivas. El medio subacuatico debía ser transportado hasta cerca de su objetivo por un submarino debidamente modificado. Se dedicaron a este proyecto el comandante Wolf, creador e instructor de los Gamma, y el alférez de navío Massano, que obtuvieron para este fin dos submarinos de bolsillo CA1 y CA2, construidos en 1938 y que llevaban tiempo desarmados. Los dos medios fueron llevados a la empresa Caproni en Milán, para su adaptación en submarino de asalto. El CA2 fue el primero en estar a punto, y a finales de 1941, fue enviado al lago Iseo, donde se preparó una pequeña base para las pruebas y adiestramiento de las tripulaciones. Al mando de las unidades y del grupo se destinó al comandante Massano, designado para el ataque contra New York. Las pruebas terminaron en febrero de 1942 con resultado satisfactorio, también quedo listo el CA1 un tiempo después, las soluciones aportadas a los dos submarinos presentaban algunos inconvenientes, y el estudio de posteriores modificaciones condujo al proyecto de los nuevos CA3 y CA4.
Mientras, llegado ya el verano de 1942, se tomó la decisión de que los objetivos de los CA de asalto y sus GAMMA fuesen New York y Freetown, objetivos más sicológicos y estratégicos que tácticos, pero que requerían un gran empeño moral y profesional. Para el transporte del CA2 se dispuso la adaptación del submarino del
Leonardo da Vinci. El cañón de 100/47 fue desmontado y en su lugar se practicó un “alveolo” provisto de soportes y abrazaderas para albergar el CA. El
Da Vinci quedó a punto en agosto de 1942 y el mes siguiente empezó las pruebas de desenganche y recuperación del CA2.
Mientras se ultimaban los detalles para la incursión contra la ciudad americana, donde el CA había de remontar el curso del río Hudson, permitiendo a los escafandristas llegar a las unidades navales ancladas en los muelles y arsenal y minarlas. La fecha de la misión quedó fijada para diciembre de 1943, ya que entonces sería posible utilizar también los más nuevos y perfeccionados CA3 y CA4. Sin embargo, para Italia cualquier plan ambicioso de ataque se terminó con la firma del armisticio en Septiembre de 1943.
Fuente: La Marina, editorial DELTA
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