Invasión y ocupación de España por los nazis

¿Qué pasaría si…?

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Calígula
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Mensaje por Calígula » Jue Feb 16, 2006 9:14 am

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El texto que comentaba beltzo.
Heinrich Heine [i]Allí donde se queman los libros, se terminaran quemando personas[/i]

maximus

Mensaje por maximus » Jue Feb 16, 2006 6:46 pm

Muchas gracias a todos por facilitarme la lectura de un texto tan interesante y en buena parte novelesco. Es lógico que semejantes circunstancias -por lo demás, no infrecuentes en aquellos días- dé lugar a malinterpretaciones, pero los hechos probados, por sí solos no prueban nada y este texto, al proceder de una fuente del nacionalismo vasco, está escrito con ciertas precauciones para alejar sospechas.

No es raro que alguien utilice esta circunstancia para acusar al lendakari de haber hecho gestiones diplomáticas ("tanteos") en el sentido de una posible colaboración con los nazis que en aquellos meses eran dueños absolutos de Europa. Pero las meras circunstancias como están aquí descritas no prueban nada ni en un sentido ni en otro.

En cuanto a los otros textos:


El Euskadi Buru Batzar realizó un informe de respuesta a las propuestas nazis sobre la “cuestión vasca“, donde se revela la idea del PNV de que se cree una especie de “islote“ independiente en el Pirineo.

El texto dice: “Creemos en el talento político del Führer, en su sagacidad, en su alto espíritu de comprensión y esperamos que en el nuevo orden a establecer en Europa y particularmente en España, el problema vasco será tenido en cuenta:

1. Porque a Alemania le interesa la pacificación de España y no puede escapar a su recto sentido que no hay pacificación posible sin una solución favorable a los vascos.
2. Porque el problema vasco está íntimamente ligado al problema racial alemán y por lo tanto es lógico y natural esperar que el Führer lo acoja y lo resuelva con la mayor simpatía.
3. Porque nos damos perfecta cuenta de que las simpatías de Alemania en España están en decadencia, y por lo tanto es de extrema importancia para el Führer recoger y captar nuevas simpatías si no quiere perder toda su influencia en España“.

Es de suponer que, a diferencia de la estancia de Aguirre en Alemania, no es una manipulación, sino una completa falsedad. No encuentro fuente ni fecha (aunque el "las simpatías de Alemania en España están en decadencia" parece indicar principios de 1941)

Pero, como muy bien dice beltzo, los manipuladores y falseadores de la Historia pueden llegar a ser muy hábiles.

maximus

Mensaje por maximus » Sab Feb 18, 2006 1:01 am

Esto lo escribió Mitch Hunter (pasamos, pues, al tema "guerrillero")
podría ser que simplemente fuera la posguerra que hubo, con la gran represión que conllevó pero con un nuevo represor y esta vez, algunos de los que vencieron se unirian a los vencidos, una guerra de guerrillas con elementos militares proporcionales sería una gran pesadilla, y me inclino a pensar un caso como el de Yugoslavia, pero además con un posible desembarco aliado, muy posiblemente con apoyo de guerrilleros en algun punto de la costa de Andalucía, o que avanzaran desde Portugal, como lo hizo Wellington.

Rehaciendo mis cálculos en mi directiva ficticia, creo que sólo cuatro divisiones para defender la costa atlántica de los Pirineos hasta el Sahara, con los norteamericanos en guerra y asentados en las islas Canarias, es una cifra demasiado baja. En los Balcanes, los alemanes tuvieron una media de siete divisiones, más los italianos. Así que subo la apuesta a ocho divisiones, más los marroquíes y quizá algunos vascos (que es otro tema...). De esa forma, los alemanes tendrían en Rusia más o menos los mismos efectivos que tuvieron en la real situación, y en esto sus posibilidades no serían mayores.

Evidentemente, estas fuerzas se dedicarían también a la lucha antiguerrillera.

Encontré el texto sobre las amenazas mutuas: de Hitler a Franco, en caso de no aceptar sus demandas de entrar en la guerra, y del Régimen a Hitler acerca de Napoleón:
Serrano Suñer se defiende con la espalda contra la pared. Dice que llega sin mandato alguno, con carácter estrictamente personal. Ha observado una elevación de moral entre los partidarios de Inglaterra por el retraso alemán en el ataque a las islas. Considera como esencial y previo el cierre del canal de Suez. La caída de Gibraltar cerraría el camino para el trigo de América, cuya necesidad cifra España en tonelajes mucho más elevados que en la conferencia de Hendaya; responde a la velada amenaza de Hitler con la evocación napoleónica: "El pueblo español se opondría a cualquier invasión". Invoca a la opinión pública española, hostil a la entrada en guerra. Exige garantías escritas sobre las reivindicaciones de España y se extiende al expresar su amargura por la redacción final del protocolo de Hendaya.

Hitler, que ha intervenido varias veces, no puede más y estalla. "Los caballeros españoles tendrán que creer en mi palabra y no insistir en una declaración escrita precisa". Continúa abruptamente la entrevista con la magnánima concesión de "algún mes más" para la entrada en guerra de España. Después Hitler recibe a Ciano y le advierte su firme decisión de avanzar por España, tomar Gibraltar y ocupar el norte de Africa. Ribbentrop vuelve a reunirse con Serrano Suñer y sin esperar su aquiescencia le advierte que España debe entrar en la guerra, a favor o en contra de Alemania, hacia Navidad.
Claro, que el texto es nada menos que de Ricardo De la Cierva, el mejor en cuanto acceso a las fuentes franquistas, pero...

En cualquier caso, en la SGM se partió siempre de las experiencias de la PGM y las guerras napoleónicas. También Churchill se refirió a ellas y, cómo no, a Wellington, que resistió en Portugal sin llegar a ser echado al mar por los franceses.
Para la supuesta invasión, por lo demás, los oficiales alemanes tendrían la conocida experiencia de la Guerra Civil, en la cual, justo es decirlo, la actividad guerrillera no fue de mucha relevancia.

De ahí he sacado la idea de que los alemanes, conversos ahora a la liberación de los pueblos musulmanes por puro oportunismo (pero es un dato probado:caso de Irak y Hussein de Jerusalen), utilizarían mercenarios marroquíes para la lucha antiguerrillera, como hizo Franco ya en 1934 en Asturias, como haría durante toda la guerra civil y como volvería hacer a partir de 1944, cuando la invasión republicana del valle de Arán.

No creo que unas cuantas molestias de la guerrilla española preocuparan mucho a Hitler. Sus fuerzas de Gibraltar se podrían abastecer fácilmente por el Mediterráneo, y ésta era para él la cuestión principal.

En cuanto a la intervención inglesa (Wellington...) estaba prevista por los británicos. Calculaban que podrían enviar seis divisiones, bien a Marruecos, como a España -consideraron el puerto de Cádiz- y, por supuesto, a Portugal. La elección de Cádiz ya demuestra que su principal interés era asegurar el estrecho de Gibraltar.

El desplazamiento de un contingente semejante llevaría más de un mes y por entonces, los alemanes ya casi habrían llegado a Andalucía (comparar con la rapidez de su avance en Francia, Polonia o Yugoslavia). Lo más seguro es que los británicos tendrían que salir como les sucedió en Noruega o en Grecia, para continuar la guerra en Marruecos.

Todo esto es, por supuesto, especulación sobre especulación, pero en la cuestión guerrillera creo que esto no hubiera arredrado a los alemanes.

Un dato curioso de una lectura sobre la guerrilla antinapoleónica: sólo la guerrilla de Navarra hizo a los franceses el equivalente de dos tercios de la suma de todas las bajas que les hizo Wellington. Los navarros fueron ferozmente antifranceses, puesto que los franceses no sólo no pensaban respetar los Fueros (por su famoso centralismo jacobino), sino que incluso planeaban la anexión de esta región limítrofe.

Por lo tanto, en la fase inicial de la invasión hitleriana, mejor evitar Pamplona y cubrir las montañas guipuzcoano-navarras con tropas escogidas de montaña por si acaso... Luego tendrían que venir un acuerdo político con los navarros. Al fin y al cabo, a hitler no le interesaba anexionarse Navarra y los Fueros le tenían sin cuidado...

maximus

Mensaje por maximus » Lun Feb 20, 2006 3:23 am

Sobre el tema vasco, he localizado un texto "con mejor pinta" que los anteriores, que podrían ser parciales, desde uno u otro punto de vista. Éste es del historiador Mikel Rodríguez


¿Qué hay de cierto y qué de mito interesado en las negociaciones de nacionalistas y alemanes? La Delegación Vasca de París siguió trabajando durante la ocupación. A diferencia de lo ocurrido con los demás republicanos - los alemanes entregaron a las autoridades franquistas a políticos como Lluis Companys, Julián Zugazagoitia o Joan Peiró - no se deportó a ningún dirigente nacionalista. Con frecuencia se evoca la tenaz persecución de la Gestapo contra el lendakari Aguirre y su audaz fuga a América. Pero si consultamos la prensa falangista de Bilbao, resulta que el 23 de junio de 1940 casi tenían localizado a Aguirre: lo situaban en Bruselas, en la embajada de un país sudamericano. Existen serias dudas sobre el verdadero interés de los nazis por detenerlo. El historiador Eugéne Goyhenetche, colaborador de la Delegación Vasca y principal interlocutor de los alemanes, trasladó entonces a su círculo de amistades que, si Vichy rompía sus pactos con el Tercer Reich, los nazis se plantearían conceder una independencia limitada a Iparralde. Y que si Franco entraba en guerra a favor de los Aliados, los alemanes podrían incluso unificar el País Vasco peninsular y el continental. Pero dejemos que sea el propio Goyhenetche quien nos aporte su versión: Es preciso tener en cuenta que el nacionalsocialismo no era un bloque totalmente monolítico, sino que en su interior coexistían familias y clanes enfrentados por distintos intereses, algunos en oposición total a la alianza con fuerzas conservadoras y clericales como las de Franco, a las que detestaban, así como a todos los que tuvieran una composición racial de tipo latino. ¿Por qué una vez más los vascos debíamos entrar como vencidos en una posible Europa nazi? Si había sectores alemanes que nos miraban con simpatía, pudiendo obtener un trato de favor, ¿por qué habíamos de despreciar estos ofrecimientos?
Las conversaciones se produjeron a principios de 1941, siendo sus interlocutores el prestigioso vascólogo Karl Bouda y Ulrich Herbert Best, de las SS. Quien en realidad llevaba las negociaciones era éste, jefe de la Administración de Guerra en Francia y posteriormente plenipotenciario del Reich en Dinamarca. Pese a ser un nazi radical – o quizá debido a ello - era favorable a una política de entendimiento con las poblaciones genéticamente valiosas. Así, aunque Hitler le ordenó que gobernase Dinamarca con mano de hierro, permitió unas elecciones generales y aceptó unos resultados que concedieron a los nazis sólo el 5% de los votos. Los daneses, en tanto raza superior, eran vistos con simpatía por las SS, cuyo líder, Himmler, un granjero avícola, exotérico y desequilibrado, intentaba justificar su relación con los españoles pensando en la gota de sangre visigoda que corría por sus venas.
La propuesta de los ocupantes se basaba en la llamada “vía bretona”. El Partido Nacionalista Bretón había aceptado colaborar bajo la máxima Na gwenn na rozz, Beizao, que podría traducirse como Ni blanco ni rojo, Bretaña ante todo e incluso había creado la “Milicia Perrot”, apellido de un sacerdote muerto por la Resistencia. El objetivo último de los nazis era balcanizar Europa, creando pequeños estados nacionales tutelados por el Reich en Bretaña, Valonia, Cataluña, Córcega, País Vasco, Occitania, Escocia, Gales y el Ulster. El órgano oficial nazi en Rumania, el Bukarester Tagerblat, publicó una serie de artículos sobre las fuerzas centrífugas en Francia, centrándose en el caso flamenco, bretón y vasco. Su tesis era que el pueblo vasco a ambos lados del Pirineo tenía pleno derecho a constituir un estado independiente. Con ello los nazis retomaban un viejo proyecto geoestratégico del II Reich, la creación de un estado amigo en el flanco sur francés. La idea formaba parte del mismo plan que había servido para independizar Valonia, con capital en Naumur, en 1917. Estos polvorientos proyectos, puestos al día por el Instituto de Estudios Geopolíticos del general Haushoffer, quien servía a Hitler como había servido al Emperador, asegurarían a la Alemania del futuro la superioridad demográfica y espacial sobre Francia.
El ala del NSDAP que se proclamaba socialista y de izquierdas, los racistas más beligerantes, era quien promovía estos contactos. Conversaciones, por otra parte, nada clandestinas, lo que provocó que al final de la contienda la fiscalía pidiese la pena de muerte para Goyhenetche. Autorizado explícitamente por el Gobierno Vasco o no, lo cierto es que el PNV le protegió económicamente y arropó socialmente hasta su muerte en 1989.
De la correspondencia de los líderes nacionalistas Javier Landáburu -¡qué también militaba en la procomunista UNE!–, Domingo Epalza, Eliodoro de la Torre y Jesús Solaun se deduce que todos mantuvieron contactos informales con los nazis. La cuestión esencial es si obraban por su cuenta o cumplían instrucciones superiores y, de resultar cierta la segunda hipótesis, si se trataba de contemporizar para ganar tiempo o había intención de llegar a un acuerdo formal. La respuesta se debería encontrar en los archivos alemanes, pero no parece ser así. El historiador Antonio Peter, especialista en relaciones hispanogermanas, comenta: No he encontrado artículo o alusión a un País Vasco unificado bajo auspicio alemán, ni tampoco he leído algo parecido en los documentos del Ministerio de Exteriores alemán. Aunque a primera vista me parece algo poco común, creo posible la existencia de contactos y planes dentro de las SS. A comienzo de los años 40, Best y otros estaban ocupados en planear el futuro europeo en manos alemanas. Múltiples fueron las ideas – hoy las más conocidas son los bosquejos acerca del dominio alemán en Rusia – y la idea de “balcanizar” Europa supuestamente cabe bien en el pensamiento de Himmler. Precisamente la rivalidad entre los SS y el Auswärtiges Amt en política exterior explicaría que estos planes no fuesen adoptados por el Ministerio de Asuntos Exteriores.


El texto coincide un poco con lo que escribe el periodista Díaz-Herrera en "Los mitos del nacionalismo vasco", cuyo autor asegura haber contado con documentos del servicio secreto francés (de Vichy) incautados por los servicios secretos norteamericanos. Pero del texto "de los tres puntos" no da referencias creíbles y resulta poco razonable, por lo de que fue redactado por el "Euskadi Buru Batzar" que a primeros de 1941 debía encontrarse disperso por toda Europa.

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beltzo
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Mensaje por beltzo » Lun Feb 20, 2006 11:36 pm

Hola Maximus:
pero los hechos probados, por sí solos no prueban nada y este texto, al proceder de una fuente del nacionalismo vasco, está escrito con ciertas precauciones para alejar sospechas.
Ese texto esta escrito por un historiador vasco, si es nacionalista o no es algo que desconozco, pero puedo afirmar que en lo que yo conozco de su obra me parece bastante imparcial y sabe sobre lo que escribe. Hay una obra suya que considero fundamental para entender un poco los entresijos de la guerra civil en el país vasco. El libro en cuestión es "La guerra en Euskadi" escrito por Luis María y Juan Carlos Jimenez de Aberasturi (creo que son hermanos), son una serie de entrevistas a distintos personajes con relevancia en los hechos acaecidos en ese tiempo y están representadas todas las tendencias, así hay entrevistas a gente del pnv, socialistas, anarquistas... aunque hace tiempo que lo leí te aseguro que hacían las preguntas pertinentes y creo que sin ningún sectarismo, de hecho y como es lógico, el PNV en muchas ocasiones salía bastante perjudicado.

Luis Mª Jimenez de Aberasturi tiene una entrevista que puedes ver aquí: http://www.derechos.org/nizkor/espana/d ... sturi.html Si lees las preguntas referentes al llamado pacto de Santoña y su contestación a la misma comprobaras que dicho escritor, aun si fuese nacionalista, no tiene reparos en afirmar cosas que perjudican a los nacionalistas.

Todo esto es para que se vea la diferencia entre un manipulador que sólo cuenta lo que le interesa y un historiador que cuenta todo lo que sabe.
Sobre el tema vasco, he localizado un texto "con mejor pinta" que los anteriores, que podrían ser parciales, desde uno u otro punto de vista. Éste es del historiador Mikel Rodríguez.
Casualmente este es un profesor de historia y también del pais vasco con lo que también podría ser nacionalista y por tanto parcial. Pero a tenor del texto que aquí transcribes, si es nacionalista lo disimula muy bien.

Quizá lo que más te sorprenda es que lo que aportas en este nuevo texto, viene en parte corroborado en el pdf que yo indique anteriormente cuyo autor es Juan Carlos Jimenez de Aberasturi, (no se si habrás podido bajarlo), sobre Karl Bouda y Goyheneche viene en parte relatado su papel y coincide con lo que tu expones, además confirma que este último estaba afiliado al PNV desde 1932 y que se salvo en 1945 de la pena de muerte gracias a las gestiones del PNV y otras autoridades francesas (pag. 17 del documento).
Autorizado explícitamente por el Gobierno Vasco o no, lo cierto es que el PNV le protegió económicamente y arropó socialmente hasta su muerte en 1989.
Cito este trozo para indicar que no creo que estuviera autorizado por el gobierno vasco, en este no solo había nacionalistas, también estaban representadas otras opciones de izquierdas y se me hace impensable que autorizaran cosa semejante. El consejo nacional vasco creado en Londres al margen del gobierno vasco y de la república, hubiese sido en toda caso una opción con mas visos de autorizar este contacto, pero juega en contra de esta suposición el hecho de que tal organismo estuviera radicada en Londres y hubiesen tenido conversaciones tanto con los ingleses como con los gaullistas.

En mi opinión, la existencia de contactos con los nazis por parte de miembros del PNV esta bastante probada, lo que no esta nada claro son las intenciones y se me hace impensable que el lendakari Aguirre pudiera estar enterado siquiera de estos contactos, si de lo que se trataba era de alcanzar un pacto con estos.

Con respecto al tema del What if, creo que esta claro que si los nazis buscaban crear una república catalana y otra vasca hubiesen encontrado a gente dispuesta a liderarla, pero creo que tendrían tan poca base social entre el pueblo, que los propios nazis tendrían que sostenerla militarmente y para eso seguramente optarían por la ocupación directa sin más miramientos. Si no hubiese habido una guerra civil con intervención alemana de por medio, entonces esa opción sería bastante más factible, como era el caso de Iparralde (pais vasco francés).

Saludos
"Si mi teoría de la relatividad es exacta, los alemanes dirán que soy alemán y los franceses que soy ciudadano del mundo. Pero sino, los franceses dirán que soy alemán, y los alemanes que soy judío". Albert Einstein

maximus

Mensaje por maximus » Mar Feb 21, 2006 2:12 am

este es un profesor de historia y también del pais vasco con lo que también podría ser nacionalista y por tanto parcial. Pero a tenor del texto que aquí transcribes, si es nacionalista lo disimula muy bien.

Por la problemática de las fuentes (y particularmente sobre este tema, que no creo que sea considerado en general muy importante) me tomé la molestia de averiguar algo de Mikel Rodríguez Álvarez, resultando que tiene libros publicados en la editorial txalaparta, que es muy nacionalista. Ahora bien, hay facciones nacionalistas e intereses en cada facción, antes como hoy.

En cuanto a que me pareciera muy nacionalista o muy pro-PNV el texto de euskomedia, me lo pareció porque incluía lo que yo llamaba "precauciones", que no casan mucho con un texto histórico. Como, por ejemplo, lo de decir que el lendakari Aguirre viaja a Alemania "porque allí es donde menos lo va a buscar la Gestapo" o hacer la puntualización de que "Ybarnegaray" lo acusa de colaboracionismo desde París (Jean Ybarnegabaray era un político vascofrancés conservador que llegaría a ser ministro de Vichy). Además, la historia de que intenta embarcar en Dunkerke hacia Inglaterra, pero no lo consigue y logra volver a Bruselas (¡sin ser arrestado e identificado como extranjero sospechoso en la enorme "bolsa"!) es tan poco creíble como que la embajada de Panamá dé identificación falsa a un enemigo del Eje para introducirlo nada menos que en Berlín, ¿a santo de qué el gobierno de Panamá iba a cometer semejante imprudencia?.
Todo tiene pinta de que Aguirre gozó de protección diplomática y que se trasladó a Berlin no en la clandestinidad sino de incógnito, a fin de no irritar abiertamente a las autoridades franquistas. Además, las fechas coinciden: Aguirre llega a Berlin a finales de Diciembre o primeros de Enero, cuando las relaciones entre Madrid y Berlin se están agriando (el momento de mi "What if"). Parece un peoncillo dentro de un tira y afloja político entre Franco e Hitler, una maniobra de presión a Franco. Los alemanes ni lo persiguen ni le hacen mucho caso, y cuando Aguirre ve que el asunto no va a llegar a nada, se va de Europa.
Aunque el documento de los "tres puntos" que menciona el señor Díaz Herrera en su libro tiene pinta de ser falso, no así la carta que desde París envían los dirigentes nacionalistas Landaburu y Alberro a Heliodoro de la Torre que está en la zona de Vichy. Ahí confirman sus contactos con "los rubios", como llaman a los alemanes, se insinua que Aguirre está plenamente informado y, por cierto, mencionan que habría que olvidar los agravios pasados (¿Gernika?) considerando la grave situación histórica que se vive, algo que, por cierto, suena bastante actual.
Esta carta es citada textualmente y como fuente estaría el servicio secreto francés (más tarde, tras el fin de la guerra, en poder de la CIA), el cual, lógicamente, debía hallarse muy preocupado por la actitud de sujetos de la SS como el tal Best, que andan pensándose desmembrar Francia. Así todo encajaría: hay conversaciones en París, se informa a Aguirre en Bruselas y a De la Torre y Monzón, que están en la zona de Vichy, y, cuando los alemanes consideran que algo positivo para sus intereses podría salir de todo eso (por el NO de Franco del 7 de Diciembre), se autoriza a Aguirre para que visite discretamente Berlín, con la colaboración de los mediadores diplomáticos hispanoamericanos.
Por otra parte, considero que no debemos escandalizarnos mucho porque un político democrático como Aguirre, en las difíciles circunstancias de finales de 1940 se viese tentado por esa posibilidad. Hay que recordar que durante la guerra civil el PNV se alió circunstancialmente con fuerzas tan opuestas a él como el PCE o la FAI, y, sobre todo, que hoy pensamos en Hitler en términos de Hitler=Auschwitz; eso no podía saberlo nadie aún en 1940. Para Aguirre, era Hitler=Napoleón; y todo el mundo acudió a Napoleón en 1808 para que les otorgasen reinos y gobiernos.
En cuanto al apoyo popular que pudiese recibir un gobierno vasco apoyado por los nazis... Eso sería imposible de saber. Lo que sí es seguro es que Hitler, a la hora de invadir naciones, luego tenía que elegir entre intentar conservarlos como aliados en su integridad (como intentó, sin éxito, con Francia), tratarlos con relativa blandura para luego anexionarlos por motivos raciales (como Dinamarca o Noruega), aplastarlos con la máxima brutalidad, como Bohemia o Polonia, o desmembrarlos como Yugoslavia. Eran opciones en base a su lógica bárbara de dominio sobre Europa.
Con España optó por la opción de alianza. Cuando Franco le dio la espalda en lo más importante (Gibraltar), no supo afortunadamente apreciar la gravedad de la situación y acabó olvidándose del tema. Se concentró en la guerra de Rusia y todos aquellos planes complicados sobre nuevos pequeños estados peninsulares, quedaron en el olvido de tantas tentativas, y el señor Aguirre pudo irse tranquilamente a América (entonces neutral), bajo protección diplomática.

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beltzo
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Mensaje por beltzo » Mar Feb 21, 2006 4:35 am

Hola otra vez:

Sobre Ybarnegaray en el mismo pdf se menciona que era un político vasco-francés de los mas derechistas (pag.6), y más adelante (pag.16 del documento) da una breve reseña de su trayectoria, donde se afirma que en efecto formó parte del gobierno de Petain y que cambió de chaqueta en el último momento lo que le libró de ser acusado de colaboracionista.

Hasta donde yo se Aguirre cuando viaja a Berlin lo hace bajo protección diplomática panameña y de riguroso incógnito, ni siquiera sus compañeros de partido sabían donde estaba.
Parece un peoncillo dentro de un tira y afloja político entre Franco e Hitler, una maniobra de presión a Franco. Los alemanes ni lo persiguen ni le hacen mucho caso, y cuando Aguirre ve que el asunto no va a llegar a nada, se va de Europa.
Esto no me cuadra mucho, por que si Aguirre se va del país sin que se enteren los nazis significa que estos no saben donde esta y dificilmente puede ser peón de nadie, pero si los nazis saben que esta en Berlin, lo más lógico es suponer que este vigilado y que lo más probable es que cuando no les sirviera para sus propósitos siguiera el mismo camino que Companys o bien fuese recluido, dejarle libre suponía tenerle como enemigo y lo nazis no tenían contemplaciones con quienes consideraban enemigos suyos.
Por otra parte, considero que no debemos escandalizarnos mucho porque un político democrático como Aguirre, en las difíciles circunstancias de finales de 1940 se viese tentado por esa posibilidad.
Esto no me escandaliza en absoluto, la actuación de las democracias en la guerra española, es para mi más paradigmática, pero la política es en ocasiones el reino de lo imposible.

En el caso de Aguirre era sobre todo dos cosas: nacionalista y católico. Encargó una misión oficial al padre Alberto Onaindia en el Vaticano para saber si la postura adoptada en la guerra civil por los nacionalistas vascos, estaba dentro de la moral cristiana. La iglesia, respondió afirmativamente aunque le dijeran que políticamente era un gran error, esta respuesta sirvió para tranquilizar su conciencia y la de muchos en su partido. Conociendo este antecedente a mi me parece impensable que este hombre pudiera siquiera pensar en un pacto con los nazis, con Mussolini quizás, pero con Hitler, yo personalmente no lo veo capaz y si encima tenemos el cuenta el precedente que habían sentado estos con la entrega de Companys, se me hace aun más difícil de creer esta posibilidad.

Ahora bien, teniendo en cuenta que no soy el abogado defensor de José Antonio Aguirre, tampoco voy a dar más vueltas al tema, en realidad sólo quería separar la realidad de la ficción, al menos hasta donde yo conozco. De todas maneras, un What if es eso... ficción.

Saludos
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maximus

Mensaje por maximus » Mié Feb 22, 2006 3:39 am

Coincido con beltzo en que no vale la pena darle más vueltas al tema de si el lendakari Aguirre, en particular, contempló una alianza con los nazis para crear un Estado vasco. Entre otras cosas porque seguir argumentando me exigiría procurarme el libro de Aguirre "De Guernica a Nueva York, pasando por Berlín" más el texto de su Diario, que también está publicado y, en suma, el tema tampoco merece tanto esfuerzo. Creo que hay aquí suficientes datos como para que cada uno especule sobre qué o no pudo pasar en aquellos difíciles días. En cualquier caso, si el mismo lendakari no tomó una actitud en este sentido, algunos de los miembros de su partido, parece que sí.

Sólo puntualizar algo sobre el libro "Mitos del nacionalismo vasco", aquí mencionado y que, siendo reciente, tampoco me parece que haya conseguido su objetivo de crear una gran polémica. Quiero señalar que, por supuesto, no recomiendo su lectura a nadie y que, en el tema de la estancia del lendakari Aguirre en la Europa bajo dominio nazi hasta lograr emigrar a América, lo engloba bajo el llamativo epígrafe de "Un nazi hacia Nueva York", lo cual ya da un adelanto de lo que vamos a leer después. Lo que pretende el autor, el periodista de determinados medios de comunicación Díaz Herrera, es justificar la famosa especulación de que el nacionalismo vasco es esencialmente una ideología racista emparentada con el racismo de los nazis. De ahí que señalen supuestos documentos en los que los mismos nacionalistas vascos argumentan a los nazis alemanes las semejanzas entre una y otra ideología. No aparece ninguna referencia de la fuente de estos documentos y esto me hace pensar que son falsos.

Llama la atención cómo, después de tantos años, los sucesos de la SGM siguen utilizándose para la propaganda política actual.

En cuanto a mi juego de ficción que, como se puede esperar, puede llegar a ser complejísimo, parto de que, a partir de la negativa dilatoria de Franco a participar en la guerra del lado de Alemania del 7 de diciembre de 1940, se suceden unos días de regateos, ofrecimientos y amenazas. Puesto que la Ley Suprema del III Reich eran los arrebatos emocionales de Hitler, podemos pensar que éste se encontraba entonces en una fase depresiva y que por ello, ante el desplante y la ingratitud de Franco, prefirió mirar para otro lado y no hacer nada. Así parece desprenderse de una melancólica carta escrita a Mussolini con fecha de 30 de Diciembre de 1940.

“España se niega a colaborar con las potencias del Eje. Temo que Franco está a punto de cometer el peor error de su vida. Considero que su idea de recibir de las democracias materias primas y trigo como recompensa a su abstención de entrar en el conflicto es en extremo inocente. Las democracias le tendrán en continua espera hasta que haya consumido el último grano de trigo y después desencadenarán la lucha contra él.
“Yo deploro todo esto, porque por nuestra parte habíamos completado nuestros preparativos para cruzar la frontera española el día 10 de enero y atacar Gibraltar a principios de febrero. Creo que la victoria hubiese sido relativamente rápida. En el momento en el que el estrecho de Gibraltar caiga en nuestras manos, el peligro de un cambio de frente francés en el norte de África y en África occidental queda definitivamente eliminado.”
“Me apena, por consiguiente, esta actitud de Franco tan poco en concordia con la ayuda que nosotros, usted, Duce, y yo, le prestamos cuando se encontraba en situación difícil.”

Un poco más abajo de esta misma carta, Hitler se zafa con excusas de la petición de Mussolini de ayuda militar alemana en el desierto libio, ayuda que finalmente acabará prestando, pero cuya negativa en este momento demuestra, cuando menos, su escaso entusiasmo por el frente mediterráneo.
Pero supongamos que hubiese estado en un ciclo más exaltado, como cuando reaccionó ante la defección de yugoslavia el 25 de marzo de 1941. Entonces, habría ordenado casi inmediatamente que las 5 divisiones que en el sur de Francia se aprestan para entrar pacíficamente en España hagan los preparativos para entrar a la fuerza, a la vez que, por supuesto, encarga el envío de fuerzas adicionales desde Centroeuropa.
Así que el 20 de diciembre estas tropas, de una potencia de fuego incontestable sobre el ejército de Franco, irrumpen precisamente por el País Vasco. No pueden hacerlo por otro lado, pues el resto de la frontera del Pirineo lo ocupa la Francia de Vichy. Irun cae en minutos, San Sebastián en una hora y Bilbao al cabo del primer día. La resistencia española sólo puede tener algún éxito en las zonas montañosas más altas entre la frontera y los objetivos finales: Madrid, Lisboa y Gibraltar.
Con tan pocos días de preparación los alemanes en Euskadi no pueden tener planes muy definidos. Si acaso, habrán recibido la orden de que dañen lo menos posible la infraestructura económica del País Vasco y que no maltraten a la población civil, pues ambas cosas pueden serles de utilidad. Más tarde llegará alguien que se haga cargo de la situación, ¿tal vez alguien de la oficina del tal Herr Best, de la SS?
¿Y los vascos exiliados? ¿resistiría alguno la tentación de indagar si es posible regresar a la patria e indagar acerca de las intenciones de los nuevos amos? El diputado Landaburu en Paris, Monzón y De la Torre en el sur de Francia, el mismo Aguirre en Bruselas, ¿no habrían intentado hacer algo?
En cuanto reciben instrucciones, los alemanes buscan, donde sea, nacionalistas vascos: emisoras de radio, panfletos, ikurriñas en el ayuntamiento. Como bien opina beltzo, siempre encontrarían a alguien. Los auténticos líderes, ¿se quedarían al margen en el exilio, cuando se les invite expresamente a que vengan?
Las intenciones de los alemanes son, primero, defensivas: evitar que los británicos corten la yugular de la única vía de invasión a España, que es Irún, de modo que la fuerza de ocupación tiene que ser sólida e implacable ante el menor signo de resistencia; segundo: políticas, demostrar a vascos, catalanes y marroquíes que los nuevos amos les liberarán de la opresión española (esto también lo hicieron en la Unión Soviética), de forma que cuenten con apoyos, colaboradores e incluso fuerzas armadas auxiliares útiles al cabo de un tiempo; tercero: económicas, en Euskadi hay hierro, cierta industria pesada y militar, y granjas prósperas.
¿Qué motivos podrían tenerse a finales de 1940 o primeros de 1941 para creer que sus promesas de libertad para los vascos, catalanes o marroquíes no iban a ser sinceras?

Bressoud
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Mensaje por Bressoud » Sab Mar 04, 2006 2:45 am

Creo que la respuesta a tu pregunta es ¡Ninguna! La Alemania nazi creó o liberó muchos estados en la IIGM y antes (Eslovaquia, Croacia, las repúblicas bálticas) ante tal invasión no creo que hubiera habido problemas (desgraciadamente nunca los hay) para encontrar Quislings ni en el Pais Vasco ni en el resto de España.

Otra cosa es que la guerrilla que le esperaba a Alemania iba a ser de aúpa.
MC

maximus

Mensaje por maximus » Sab Mar 04, 2006 6:44 pm

Aprovecho la ocasión para añadir algunos textos acerca del caso de la invasión de Yugoslavia, que sería quizá el ejemplo más próximo a la actitud probable de un Hitler que hubiese decidido la desmembración de España.

Ante todo, comparar la actitud de mero disgusto e impotencia ante la negativa de Franco a secundar la estrategia del Eje que ya anoté en un post anterior (la carta de Hitler a Mussolini con fecha del 30 de diciembre de 1940) a estos documentos sobre su reacción al cambio político de Yugoslavia el 27 de marzo de 1941:

Minutas del alto mando alemán en su reunión con Hitler tras el golpe de Yugoslavia el 27 de marzo de 1941


El Führer está decidido, sin aguardar a posibles declaraciones de lealtad por parte del nuevo gobierno, a hacer toda clase de preparativos para destruir Yugoslavia militarmente y como entidad nacional. No se harán encuestas diplomáticas ni se enviarán ultimátums. De las garantías dadas por el gobierno yugoslavo, en el cual no se puede confiar en el futuro, “se tomará nota”. El ataque empezará tan pronto los medios y las tropas necesarias estén en condiciones.
Políticamente, es de primordial importancia que el golpe contra Yugoslavia sea descargado con despiadada dureza y que la destrucción militar se efectúe con la velocidad del rayo. De esta forma, Turquía se atemorizará en la medida suficiente, y la ulterior campaña contra Grecia tomará un giro favorable. Cabe suponer que cuando ataquemos, los croatas se pondrán a nuestro lado. Se les asegurará un régimen político adecuado (la autonomía más tarde).

En carta a Mussolini:
“…lo he hecho todo y he tratado honradamente de atraer a Yugoslavia a nuestra comunidad, ligada por intereses mutuos. Desgraciadamente, estos intentos han sido infructuosos o comenzaron demasiado tarde para surtir un efecto satisfactorio.”



El contraste es espectacular: aquí no se aceptan dilaciones ni se cree para nada en protestas de amistad "no beligerante". Y que no se diga que los yugoslavos adoptaron una actitud antialemana:

Fragmento del informe del general británico Dill al ministro Eden acerca de la actitud política y militar de Yugoslavia hacia el día 1 de abril (el establecimiento del nuevo gobierno yugoslavo fue el día 27 de marzo, la invasión alemana el día 6 de abril):
“el gobierno yugoslavo, principalmente por temor al efecto que podría causar en la situación interior, está decidido a no tomar medida alguna que se pudiera considerar provocativa ante Alemania”



Un día después de la revuelta en Yugoslavia, Hitler firmó la Directiva No 25, cuyo primer párrafo decía:
"La revuelta militar en Yugoslavia ha cambiado la situación política en los Balcanes. Yugoslavia, aún haciendo declaraciones de lealtad y respeto al Pacto Tripartito, debe ser considerada como un enemigo y debe ser derrotada cuanto antes."
De esa forma, se contaron con 10 Cuerpos de Ejército, 4 de los cuales eran blindados, 32 divisiones, incluyendo 10 blindadas y cuatro motorizadas.


Y esto, en cuanto a la creación del Estado croata a raíz de la invasión alemana:

La creación del Estado Independiente Croata y la instalación de Ante Pavelić por los Alemanes suscitará un gran entusiasmo en la población croata, después del asesinato de Esteban Radić en Belgrado en 1928, los abusos y las masacres cometidas contra la población croata y musulmana en Bosnia y Croacia por los serbios entre las dos guerras. El sueño nacional de la independencia y la unión de todas las provincias croatas, comprendida la antigua Bosnia croata de antes de la ocupación turca en 1463, al fin realizados, no podían sino colmar de alegría y entusiasmo a la mayoría de los croatas. Desgraciadamente era la realización de un sueño, en tiempos en que la realidad ya estaba haciendo vivir la pesadilla nazi a media Europa. La libertad y la independencia de las pequeñas naciones, no estaba aún en las agendas de grandes potencias de la época, por muy democráticas que se dijeran. La opresión de las grandes naciones sobre las pequeñas, estaba aún en el espíritu de las naciones "democráticas" occidentales aún después de la Paz de Versailles en 1919. Los anhelos de libertad que sentían los croatas, eran los mismos que sentían los albaneses, macedonios, musulmanes de Bosnia, húngaros y alemanes en Voivodina, etc., y que defendían su existencia por todos los medios, llegando incluso a aliarse con el Diablo, vale decir, Hitler. La felicidad efímera que sintieron los croatas, el 10 de abril de 1941, en el momento de la proclamación de Croacia como un Estado libre y soberano, era la realización de un sueño de muchos siglos, que no podía ser realizado con la ayuda y comprensión de las democracias occidentales, aliadas, al contrario, con la Serbia opresora y despótica. Todos los campanarios de las iglesias de Croacia se echaron al vuelo y un Te Deum solemne se celebró en la catedral de Zagreb con la presencia de Pavelić y del futuro cardenal Stepinac, marcando así el importante rol que ha desempenado en la conciencia histórica croata la Iglesia católica, sus obispos, sacerdotes y monjas croatas.

Este texto procede de una fuente nacionalista croata actual que todavía justifica el estado creado por los ustachis. También las menciones a la actitud de la Iglesia católica guardan interés, por ser los nacionalistas vascos también fuertemente católicos, lo que incluso hubiera permitido algún tiempo de alianza con los carlistas navarros (una vez desaparecida España como Estado, el carlismo habría tenido que replantear su misma ideología)
De la misma fuente he encontrado un texto interesante, que enlaza con el juicio del forero beltzo acerca del nacionalismo vasco:

Antes de dirigirse a los ustashis, cuya influencia en el país era limitada, los Alemanes habían ofrecido el poder a Maček, el líder del Partido Campesino Croata y miembro del gobierno yugoslavo antes y después del golpe de Estado organizado por el serbio Marković. Pero, Maček rechaza esta oferta ya que el verdadero poder estaría en manos del ocupante. También renuncia a sus funciones en el gobierno real, dejando a otros tres miembros de su partido acompanar al resto de los ministros que parten al exilio en Londres y desde el 10 de abril, hace un llamado a la población croata a ser leal con el Estado independiente croata. Maček, toma su distancia con el gobierno de Pavelić, al que considera colaboracionista, pero al mismo tiempo pide a sus compatriotas obediencia al Estado; esto refleja la actitud adoptada por muchos croatas en esos momentos.

Para el forero beltzo, el PNV difícilmente hubiese aceptado un gobierno colaboracionista con los nazis. Vemos aquí que, en efecto, Macek, líder del partido croata mayoritario, se muestra renuente y adopta una actitud ambigua. Quizás ésta habría sido, en efecto, la actitud del lendakari Aguirre, pero hay pocas dudas de que en el País Vasco también habría surgido en Pavelic.

En cuanto a los otros pueblos a ser "liberados" por los nazis tras la supuesta invasión a España del 20 de diciembre de 1940, su actitud seguiría probablemente a los acontecimientos en el País Vasco, ocupado el primer día.

Y en cuanto al fenómeno guerrillero, éste dependería también, lógicamente, de los acontecimientos bélicos subsiguientes y al tipo de ocupación en cada una de las regiones invadidas. En todo caso, yo no veo a los generales de Franco metidos a guerrilleros.

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beltzo
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Mensaje por beltzo » Sab Mar 11, 2006 4:29 am

me exigiría procurarme el libro de Aguirre "De Guernica a Nueva York, pasando por Berlín" más el texto de su Diario
No te molestes, encontré ese libro en la biblioteca y lo cogí por curiosidad, el diario esta incluido dentro del libro, "De Guernica a Nueva York, pasando por Berlín", la etapa de su odisea que corresponde a su estancia en Alemania es su famoso diario. No aparece en ellos ninguna mención ni remotamente parecida a la que hace Diaz Herrera, tampoco pensaba encontrarlas entre otras cosas porque aun en el hipotético caso de que aparecieran en el original, no creo que lo hubieran publicado.

Quizá, el pasaje más interesante es una charla que tienen Aguirre, (bajo la identidad del Dr Alvarez), y otro acompañante vasco con unos nacionalistas flamencos que se han dejado seducir por la idea de que Hitler respeta las nacionalidades, la charla tiene lugar en algún lugar de Bélgica poco después del armisticio francés. Finalmente, ante las opiniones claramente en contra de esta idea que les transmite el acompañante de Aguirre, los flamencos piden la opinión del Dr Alvarez a quien como panameño consideran más neutral, y esta es la contestación que les da:

[En efecto - contesté aparentando una neutral prudencia -, éste es el gran problema, el de la falta de una norma moral en el orden internacional. Cuando los principios se aplican o no, según se trate de amigos o de enemigos, desaparece la confianza y se pone en peligro la paz. Hablar de la libertad de los pueblos y aplicarla sólo a los amigos, es hipocresia calculista que no conduce más que a nuevos conflictos. Y en este aspecto unos y otros tienen mucho de que arrepentirse. Ahora bien, yo suelo fijarme en los resultados prácticos. Alemania por lo general carece de sentido político en sus realizaciones, y la dureza de su ideología llevada a la realidad, suele quedar reducida al empleo de la fuerza como norma de gobierno. En el caso inglés, y hablando en términos generales, tiene usted una realidad política que es el British Commonwealth, basado en la libertad; en la libertad de los pueblos que se gobiernan a si mismo en mayor o menor escala. Allí donde dominan el genio alemán no existe esa libertad. Y aceptando los defectos de unos y otros, es preciso consignar esta diferencia.]

En realidad el señor Aguirre tiene muchos más escritos, en la biblioteca estaban también sus obras completas, 2 tomos que por volumen no tienen nada que envidiar a la magna obra de Kershaw sobre Hitler, (por calidad e interés seguro que no hay comparación posible), pero estas obras completas no tengo ningún interés en leerlas, ni siquiera por curiosidad.

Saludos
"Si mi teoría de la relatividad es exacta, los alemanes dirán que soy alemán y los franceses que soy ciudadano del mundo. Pero sino, los franceses dirán que soy alemán, y los alemanes que soy judío". Albert Einstein

maximus

Mensaje por maximus » Dom Mar 12, 2006 4:36 am

Muchas gracias, beltzo, por la indicación sobre el libro del lehendakari Agirre. Desde luego, si existió ese tanteo del nacionalismo vasco con los nazis a primeros de 1941, es lógico que Agirre más tarde tratara de disimularlo, aunque siempre se puede encontrar algún "acto fallido" revelador.

Por lo demás, las opiniones de Aguirre acerca del respeto de los británicos y de los alemanes a la soberanía de los pueblos tienen su interés porque cuando yo planteé este "What if" daba por sentado que el PNV no colaboraría con los nazis, por haberlos combatido directa e indirectamente durante la guerra civil. Cuando pensaba en un lendakari pronazi, yo pensaba inicialmente en Elías Gallastegi debido a lo que el polémico Jon Juaristi escribió sobre este disidente sabiniano, marcadamente antiespañol y que alentó que no se participase en una guerra civil entre españoles. Este hombre permaneció durante la guerra exiliado en Irlanda, donde parece ser que tenía ciertas relaciones con el nacionalismo republicano irlandés que por entonces gobernaba. Nada más lejos del republicanismo irlandés que alabar el respeto británico por la libertad nacional de los pueblos, y lo mismo habrían podido decir los indios y otras nacionalidades sometidas al Imperio.

Por el contrario, los nazis alentaron la creación de entidades nacionales desgajadas de los anteriores estados, como Croacia, Eslovaquia o Letonia, y creo que esto, para un nacionalista, tiene un peso propio, independientemente del proyecto político social que tenga cada partido o cada dirigente político.

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Mensaje por Tácito » Vie Jun 02, 2006 6:21 pm

en mis años de estudios en munich, viví durante algún tiempo en casa de un antiguo oficial alemán, estaba al mando de unos pancer, fue a raiz de sus experiencias cuando comencé a interesarme mas a fondo sobre la segunda guerra mundial, me contó que los españoles no tenemos ni idea de muchas cosas de lo que pasó y pudo pasar y que estuvo con los pancer en los pirineos varios dias a la espera de órdenes para entrar en nuestro pais, finalmente la órden fue volver y no avanzar, pero fueron varios dias de espera en el que quien sabe loq pudo pasar.
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maximus

Mensaje por maximus » Vie Jun 02, 2006 9:34 pm

Por lo que tengo entendido, los preparativos para la "Operación Felix" (neutralización del estrecho de Gibraltar por aviación y artillería alemanas, con la entrada de España en la guerra) estaban bastante avanzados cuando Hitler la suspendió el día 10 de diciembre de 1940, por la negativa de Franco manifestada el día 7. Incluían dos divisiones (una blindada) que debían atravesar España y pasar luego al Marruecos español (para prevenir una intervención francesa, sobre todo) y otras tres que debían situarse cerca de la frontera de Portugal para prevenir una intervención británica. Más una brigada de asalto que tomaría Gibraltar.

La fecha prevista era el día 10 de enero de 1941, con un ataque aereo sobre el puerto de Gibraltar a cargo de bombarderos alemanes procedentes del sur de Francia que luego aterrizarían en aeródromos españoles (supongo que Sevilla o Tetuan). Era considerado muy valioso que el ataque se llevara a cabo cuando pudiera atraparse en el puerto las unidades más importantes de la flota británica en Gibraltar ("Fuerza H"). La "operación Felix" incluía también la defensa de las costas españolas y de las islas Canarias por aviones alemanes y artillería de costa.

Todo el plan se vino abajo por la renuencia de Franco en el último momento y la no insistencia de Hitler. Mi "What if" partía de un cambio de humor del Führer, que considerara vital esta operación, llegando incluso, si era preciso, a la invasión y destrucción de España como escarmiento ante otras naciones titubeantes (lo que luego pasaría con Yugoslavia).

Por lo visto, existió otro plan mucho más tardío, hacia 1943, época en la que sin duda era por completo inviable.

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Mensaje por Tácito » Lun Jun 05, 2006 12:04 pm

en Navarra, al norte frontera con Francia tengo constancia que hubo varios focos de acción, la resistencia francesa estaba muy activa en esa zona, y tres españoles que integraban esa resistencia fueron perseguidos desde las montañas hasta llegar a la bonita localidad de ochagavia en donde se escondieron, soldados alemanes llegaron a este pueblo en busca de los combatientes e incluso se ofreció resistencia consiguiendo no localizar a los huidos, en el mayor bosque de europa de hayedos "la selva de Irati" tambien hubo varios episodios de acción.
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