Anécdotas, curiosidades y mitos de la SGM

Trivialidades, curiosidades, concursos

Moderador: Francis Currey

Avatar de Usuario
ignasi
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 1192
Registrado: Jue Jun 16, 2005 3:50 am
Ubicación: Barcelona, Catalunya

Mensaje por ignasi » Lun Feb 27, 2006 5:54 am

Como todos sabemos, la fotografía soviética más famosa de la guerra es la de un soldado alzando la bandera roja sobre las ruinas del Reichstag.

Pues bien, pese a que desde su incendio había perdido todo significado en Alemania, seguía siendo el símbolo del gobierno alemán para los soviéticos, y todos los soldados eran conscientes de la gloria eterna que sería llegar el primero e izar la bandera roja. Para ello, los destacamentos de abanderados estaban constituidos por entero por miembros del Komsomol e incluso se escogio entre los abanderados a un georgiano, a modo de "obsequio especial para Stalin". Otras nacionalidades, como los chechenos, los calmucos y los tártaros de Crimea, se hallaban excluidos sin excepción, ya que estaba prohibido nombrar héroe de la Unión Sociética a los miembros de ningún tipo étnico condenado al exilio.

Un saludo,

Ignasi

Avatar de Usuario
ignasi
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 1192
Registrado: Jue Jun 16, 2005 3:50 am
Ubicación: Barcelona, Catalunya

Mensaje por ignasi » Mié Mar 01, 2006 4:47 am

Durante el Blitz, los londinenses admitian sinceramene que les asustaba el ruido y la posibilidad de ser enterrados por las bombas. Sin embargo, una sorprendente mayoría confesó, también, que no tenía miedo de morir, siempre que se tratase de un impacto directo. Muchos añadieron que encontraban estimulantes las emociones del blitz, especialmente en términos sexuales. También estaban aquellos que les gustaba andar por las calles durante los bombardeos, y que se entusiasmaban con el ruido de las explosiones y los chasquidos de los antiaéreos.

Winston Churchill era uno más de aquellosa los que les gustaba abandonar su refugio antiaéreo subterráneo y salir a las calles en el momento en que empezaban a caer las bombas. Varias veces se intentó detenerle, porque era grande el riesgo de perder la cabeza o un brazo por la metralla. El ayudante de cámara del Primer Ministro, un marino llamado Ives, intentó impedir que saliera, llegando incluso a esconder sus zapatos. Churchill le ordenó airadamente que se los devolviera:
"Quiero advertirle", tronó Churchill, "que de niño mi niñera nunca pudo evitar que saliera a dar un paseo en Green Park cuando me apetecía hacerlo. Y de adulto, ciertamente no lo hará Adolf Hitler".

Un saludo,

Ignasi

Avatar de Usuario
Calígula
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 666
Registrado: Jue Jul 14, 2005 11:25 pm
Ubicación: No se dice este país, sino ESPAÑA

Mensaje por Calígula » Sab Mar 04, 2006 9:07 am

El dia 20 de Junio de 1944, El gobierno finlandes pidio auxilio a Berlin, ya muy conscientes de no poder detener el rodillo sovietico. Hitler no estaba para bromas, con los aliados en Francia y la URSS intratable. Pero deseaba mantener a Finlandia en la guerra, tanto porque sus ejercitos tenian entretenidas buen numero de tropas rusas, como por las meterias primas que le eran suministradas, ademas de la fuerza que esa alianza le daba ante Suecia. Por ello decidio enviar a Helsinki a Ribbentrop, para negociar un tratado. Esa decision se tomo el dia 21 de Junio en una reunion: Hitler admiraba la capacidad de lucha de los finlandeses, pero comenzo a divagar sobre el acierto de los generales y, decididamente menosprecio a Mannerheim por sus retiradas. Se hallaba presente el general bavaro de tropas de montaña, Eduard Dietl, comandante de las fuerzas germanas en Laponia y gran especialista del tipo de guerra desatada en Finlandia. Al escuchar los comentarios de Hitler, Dietl, rojo de ira, dio un gran puñetazo sobre la mesa y se levanto, diciendole al Fuhrer:

Esas opiniones carecen de valor, pues quien las hace no tiene conocimiento alguno de como es alli la guerra. Regreso a Finlandia y alli brindare todo mi apoyo al mariscal Mannerheim.

En el acto, todos los presentes quedaron estupefactos y expectantes de la reaccion de Hitler. Despues de un ligero silencio, Hitler sonrio y dijo admiradamente:

¡Este es el tipo de general que me gusta!

Al dia siguiente Dietl fallecio tras un accidente en el avion que viajaba direccion Laponia.
Heinrich Heine [i]Allí donde se queman los libros, se terminaran quemando personas[/i]

Avatar de Usuario
ignasi
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 1192
Registrado: Jue Jun 16, 2005 3:50 am
Ubicación: Barcelona, Catalunya

Mensaje por ignasi » Sab Mar 04, 2006 5:34 pm

La conquista de Berlín, y por ente, el final de la guerra, fue festejado con enormes cantidades de alcohol entre las tropas soviéticas. Según comenta el novelista y corresponsal de guerra Vasily Grossman, en su desesperada búsqueda de bebidas, hubieron soldados que tomaron barriles de metal... que contenían disolventes industriales. Tardaron al menos 3 días en morir. Grossman los llamó "los muertos vivientes"

Saludos

Ignasi

Avatar de Usuario
ignasi
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 1192
Registrado: Jue Jun 16, 2005 3:50 am
Ubicación: Barcelona, Catalunya

Mensaje por ignasi » Dom Mar 05, 2006 11:01 pm

El 24 de junio de 1945 se hizo un gran desfile en la Plaza Roja de Moscú a fin de conmemorar la victoria sobre Alemania. En él participaría un regimiento de cada uno de los frentes, así como uno de la armada y otro de las fuerzas aéreas de la Unión Soviética. Para dicho desfile se haría llegar ex profeso la bandera que se habíaa erigido sobre el Reichstag, ya convertida a esas alturas en objeto de culto.
Los mariscales y generales soviéticos dieron por sentado que Stalin encabezaría el desfile. Al fin y al cabo, era él el comandante supremo (el Verjovny), el supuesto responsable de la gran victoria. Sin embargo, la tradición rusa ordenaba que los desfiles triunfales debía dirigirlos un hombre a caballo.
Una semana antes del aco, Zhukov recibió órdenes de acudir a la dacha de Stalin. Éste le preguntó al antiguo miembro de la caballería (había combatido en ella en la I Guerra Mundial y en la Guerra Civil) si todavía se veía capaz de manejar un caballo.
- Aún monto de cuando en cuando -respondió Zhukov.
- En tal caso, vamos a hacer una cosa: tu encabezarás la parada, y Rokossovsky quedará al mando.
- Te agradezco el honor -declaró el mariscal-; pero, ¿no seríua mejor que la encabezaras tu? Al fin y al cabo, eres tú el comandante en jefe y, por tanto, a ti corresponde tal honor.
- Yo ya estoy muy mayor para eso. Tú eres más joven: te encargarás de encabezarla.

Al despedirse, le comunicó que montaría un semental árabe que se encargaría de mostrarle el mariscal Budyonny.
Al día siguiente, Zukov se dirigió al aeródromo central a fin de observar los ensayos del desfile. Allí se encontró con Vasily, el hijo de Stalin, que quiso hablar con él en privado.
- Te voy a revelar un secreto -le dijo-: Papá se ha estado preparando para dirigir la parada triunfal; pero ha sufrido un curioso incidente: Hace 3 días, el caballo se desbocó en la escuela de equitación porqué él no supo emplear las espuelas con maña. Papá se agarró a las crines e intentó mantenerse en la silla, aunque no lo logró, y al caer se hirió un hombro y la cabeza. Al levantarse, escupió y dijo "Que sea Zhukov quien encabece el desfile; al fin y al cabo, él ha pertenecido a la caballería"
- ¿Qué caballo está montando?
- Un semental árabe blanco, el que montarás tú en la parada. Pero te ruego que no digas una palabra de esto a nadie.

Zhukov agradeció la confidencia y, durante los pocos días que quedaban, no pasó por alto ninguna oportunidad de visitar el caballo y amaestrarlo.

Imagen

Un saludo,

Ignasi
Última edición por ignasi el Sab Mar 11, 2006 10:42 pm, editado 1 vez en total.

Avatar de Usuario
Erich Hartmann
Miembro fundador
Miembro fundador
Mensajes: 3644
Registrado: Lun Jun 13, 2005 4:15 am
Ubicación: Deutsches Reich
Contactar:

Mensaje por Erich Hartmann » Lun Mar 06, 2006 8:09 pm

El kamikaze que fue un buen samaritano

El alférez Shinya Shibata despegó de la base aérea de Chiran en un vuelo kamikaze el 13 de abril de 1945 con destino a las aguas de Okinawa, pero a causa de un fallo mecánico tuvo que realizar un amerizaje forzoso en la playa de Kuroshima, un islote situado en la ruta de Okinawa, a unos 425 kilómetros al noroeste. El avión de Shibata comenzó a arder y el piloto sufrió graves quemaduras, pero no había ningún médico en la pequeña isla, aunque los isleños hicieron todo lo posible por salvar al joven. Incluso mataron a uno de sus valiosos caballos y utilizaron su grasa para aliviar el dolor que le producían las quemaduras. A finales de abril, otro piloto suicida, el teniente Tadashi Yasube, tuvo que hacer otro amerizaje forzoso cerca de la playa a causa de una avería en los motores, después de haber despegado de Chiran.Yasube no resultó herido.

Una vez en la isla se enteró de la situación desesperada de Shibata. Al ver su sufrimiento y ansioso también por reanudar su misión, le pidió a un joven isleño, Katsuya Yasunaga, que fuese remando con él en una barca hasta Kyushu. Nadie se atrevía en la isla a hacer tal cosa por temor a los aviones y submarinos estadounidenses. Yasube prometió que, en cuanto llegase a Kyushu, volaría en otra misión kamikaze, pero primero lanzaría medicinas para Shibata cuando fuera camino de Okinawa.Yasube y Yasunaga partieron por fin de la isla en un pequeño velero. Horas después, un vendaval azotó con violencia su barco y perdieron el rumbo. Tras servirse de una brújula llegaron por fin a Kyushu después de 31 horas de remar sin cesar.

Yasube despegó de Chiran el 4 de mayo en un vuelo de Ataque Especial. Cuando su formación se aproximó a Kuroshima, se dirigió al islote y, después de dar una vuelta inclinando las alas, lanzó un pequeño paracaídas con un paquete que contenía medicinas. Hecho esto, de nuevo puso rumbo sur hacia Okinawa.

Gracias a las medicinas, Shibata se recuperó y regresó a casa cuando terminó la guerra. Murió en abril de 1988, a una edad madura. Yasube perdió la vida a los 21 años. Se había graduado en la Universidad Meiji de Tokio.


Fuente: Kamikazes, Albert Axell y Hideaki Kase

Saludos cordiales

Avatar de Usuario
Erich Hartmann
Miembro fundador
Miembro fundador
Mensajes: 3644
Registrado: Lun Jun 13, 2005 4:15 am
Ubicación: Deutsches Reich
Contactar:

Mensaje por Erich Hartmann » Lun Mar 06, 2006 8:18 pm

Jugadores de Baseball y pilotos kamikaze

El alférez de 22 años Shinichi Ishimaru, que estudió en la Universidad nipona, murió pilotando un caza Zero el 11 de mayo de 1945, en aguas de Okinawa. Aquel día claro y soleado iba a despegar de la base de Kanoya en Kyushu. Justo antes de partir, pidió a un oficial compañero suyo, el alférez Oiichi Honda, que se pusiese un guante de receptor. Ishimaru lanzó diez veces y cada una de ellas Honda gritó: «Strike!» Acto seguido dijo: «Vale, estoy contento», y se dirigió rápidamente a su avión. Ishimaru, cuando asistía a las clases nocturnas de la universidad, había jugado como lanzador en el Nagoya, un popular equipo profesional que hoy se llama los Dragones de Nagoya.

Honda también murió tres días más tarde pilotando otro avión suicida en aguas de Okinawa, después de despegar de Kanoya.

En el Dome de Tokio, el estadio cubierto de béisbol más grande de Japón, hay un monumento en recuerdo de los 69 jugadores profesionales de béisbol que murieron en combate. Dos de ellos eran los alféreces Shinichi Ishimaru y Shizuka Watanabe, conocidos jugadores de equipos profesionales que encontraron la muerte en vuelos kamikaze.

Fuente: Kamikazes, Albert Axell y Hideaki Kase

Saludos cordiales

Avatar de Usuario
ignasi
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 1192
Registrado: Jue Jun 16, 2005 3:50 am
Ubicación: Barcelona, Catalunya

Mensaje por ignasi » Mié Mar 15, 2006 7:35 pm

Tras la derrota de Polonia, el coronel Maczek consiguió llegar a Francia, uniéndose a las fuerzas polacas que también habían logrado llegar.
Allí preparó un informe sobre la táctica de la Blitzkrieg, sobre su uso, su efectividad y como precavirla.
Pese a ser un conocedor de primera mano, ya que su país acababa de ser conquistado gracias a la nueva táctica alemana, dicho informe fue totalmente ignorado por el estado mayor francés, hasta el punto en que cuando los alemanes lo encontraron, seguía sin abrir.

Un saludo,

Ignasi

Avatar de Usuario
ignasi
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 1192
Registrado: Jue Jun 16, 2005 3:50 am
Ubicación: Barcelona, Catalunya

Mensaje por ignasi » Mar Mar 21, 2006 12:38 am

Para mejorar las relaciones entre sus países, Hitler decidió visitar Finlandia el 4 de junio de 1942, fecha del 75º cumpleaños del Mariscal Mannerheim (y con la Gran Cruz en Oro de la Orden del Águila Alemana bajo el brazo para ofrecérsela como regalo de cumpleaños). Pero Mannerheim no deseaba encontrarse con el dictador alemán, puesto que no le agradaban las interferencias alemanas en los asuntos políticos y militares fineses; y no deseaba que pareciese una visita de Estado, por lo que no se hizo ni en su cuartel general de Mikkeli ni en Helsinki, sino que se realizó en secreto en un tren junto al aeropuerto de Immola, en el sudeste finés.
Al llegar del aeropuerto acompañado del Presidente Ryti, Hitler fue llevado a dónde le esperaba Mannerheim y, al ver al Mariscal, corrió hacia él, lo que provocó que Mannerheim le advirtiera que “Un oficial no corre, solo lo hacen los cabos” (recordando la graduación que había logrado Hitler durante la I Guerra Mundial)
Durante la visita, Hitler lució unas botas con alzas, debido a que el mariscal era mucho más alto que él (Mannerheim medía 194cm, y había ordenado a los fotógrafos que solo hiciesen las fotografías desde un ángulo en que no se apreciase la diferencia de alturas.
Hitler pasó solo 5 horas en Finlandia, y, al igual que en Hendaya, tampoco consiguió nada.

Imagen

Imagen

Avatar de Usuario
beltzo
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 1342
Registrado: Jue Sep 29, 2005 8:49 am

Mensaje por beltzo » Mié Mar 22, 2006 10:14 pm

En un carta de Albrecht Haushofer a su madre, fechada el 22 de febrero de 1933, narró la siguiente anécdota:

Política para diversión de papá. La última hazaña del señor Goering: se dirige a Francois Poncet [embajador francés] por propia iniciativa y exige la devolución del corredor. Si Polonia respondiera favorablemente, se la asistirá en la conquista de Ucrania. Francois Poncet sonríe y pide que la propuesta se le dé por escrito. ¡Y lo consigue! Dos horas más tarde, un sonriente embajador ruso la muestra al desesperado señor Von Neurath. Estos son los salvadores de la nación.

Fuente: "Rudolf Hess" de Douglas Hamilton
"Si mi teoría de la relatividad es exacta, los alemanes dirán que soy alemán y los franceses que soy ciudadano del mundo. Pero sino, los franceses dirán que soy alemán, y los alemanes que soy judío". Albert Einstein

Avatar de Usuario
beltzo
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 1342
Registrado: Jue Sep 29, 2005 8:49 am

Mensaje por beltzo » Sab Abr 08, 2006 4:47 am

El general Hans Speidel en sus días destinado en Francia cuando Rommel no se hallaba presente se refería a Hitler como "el cabrón del Berghof".

Albrecht Haushofer desde niño siempre había tenido un sueño convertirse algún día en ministro de exteriores de Alemania, sin embargo andando el tiempo cuando se hallaba en la prisión de Moabit dijo a los demás presos que sólo albergaba dos temores: el del Rollkommando o escuadrón de exterminio, y el de verse obligado a ser el último ministro de exteriores de Hitler.

El almirante Canaris demostró su desprecio por el partido nazi cuando en un viaje en automovil a través de la meseta castellana, ante cada rebaño de ovejas que se encontraba hizo el saludo nazi al tiempo que decía a sus acompañantes: "Ea, levanten la mano, señores; nunca se sabe dónde puede ocultarse alguna autoridad superior".
"Si mi teoría de la relatividad es exacta, los alemanes dirán que soy alemán y los franceses que soy ciudadano del mundo. Pero sino, los franceses dirán que soy alemán, y los alemanes que soy judío". Albert Einstein

Avatar de Usuario
V.Manstein
Moderador Honorario
Moderador Honorario
Mensajes: 771
Registrado: Lun Jun 13, 2005 6:28 pm
Ubicación: Cantabria/Canarias

Mensaje por V.Manstein » Sab Abr 15, 2006 9:23 pm

Los documentos de licencia del Soldado Clark Gable fueron firmados en junio de 1944 por un tal capitán Ronald Reagan


En Alemania se hicieron copias realistas de gran tamaño de varias ciudades para provocar confusiones en los pilotos aliados. En el caso de Berlín había unas 5 copias.
Soldat im 20.Jahrhundert

Avatar de Usuario
V.Manstein
Moderador Honorario
Moderador Honorario
Mensajes: 771
Registrado: Lun Jun 13, 2005 6:28 pm
Ubicación: Cantabria/Canarias

Mensaje por V.Manstein » Sab Abr 15, 2006 9:49 pm

Algunos pequeños mitos sobre panzers muy propagados:

- El Tiger II es conocido ampliamente con el nombre de Tire real . Realmente esta denominación es incorrecta y apreció por primera vez en un informe de producción de enero del 45 aunque nunca fué aceptado por autoridad alemana alguna.

- El Jagdpanzer 38 es conocido comúnmente como Hetzer. Es incorrecto, ya que esa denominación corresponde al E-10 ( que se parecía al Jg 38).
Soldat im 20.Jahrhundert

Avatar de Usuario
ignasi
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 1192
Registrado: Jue Jun 16, 2005 3:50 am
Ubicación: Barcelona, Catalunya

Mensaje por ignasi » Lun Abr 17, 2006 4:04 pm

El alimento que tenía mayor prioridad para el Ejército Rojo en sus suministros a Stalingrado era... el vodka (incluso antes que el té y la comida), debido a su poder para calentar el estómago y reducir los nervios, que era considerado vital.

Saludos,

Ignasi

Avatar de Usuario
ignasi
Miembro distinguido
Miembro distinguido
Mensajes: 1192
Registrado: Jue Jun 16, 2005 3:50 am
Ubicación: Barcelona, Catalunya

Mensaje por ignasi » Jue Abr 27, 2006 6:22 am

Entre los actos de propaganda del Ejército Rojo en torno a Stalingrado (aparte de los habituales panfletos y discursos) destacó uno sutilmente cruel para socavar la moral del VI Ejército: la instalación de grandes cocinas de campaña cerca de las trincheras, el olor de las cuales llegaba a los famélicos defensores de Stalingrado.

Saludos,

Ignasi

Responder

Volver a “Miscelánea”

TEST