Cosmovisión nazi

La vida cotidiana en la Alemania del Reich

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Lehto
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Cosmovisión nazi

Mensaje por Lehto » Vie Jun 17, 2005 11:01 pm

El Estado Nazi organizó una peculiar cosmovisión, entendida esta como una religión política o secular plagada de símbolos, mitos, ritos y ceremonias. Un conglomerado ideológico donde se reúnen neopaganismo, religión natural, racismo biologicista, y tradición gnóstica.

Propongo sistematizar en un solo post toda la información acerca de esta visión mística del mundo por parte del nazismo.

Por mi parte: iré aportando ideas –construidas por medio de la consulta bibliográfica- sobre los temas fundacionales del nazismo. Espero la cooperación de todos los que estáis interesados en el tema y aportaciones densas… (de esas que se asimilan con un espeso y pegajoso café)

El nazismo y el problema de Dios

Hitler manifestó en sus escritos que “es imposible escapar al problema de Dios”. Frente a una postura atea que hubiera acercado la ideología a uno de los postulados del comunismo era necesario hacer una relectura de Dios y aportar una nueva definición.

El primer paso lo dará Rosenberg al declarar: “El dios al que honramos no existiría si no existieran nuestra alma y nuestra sangre”, proponiendo así una religión de la sangre, es decir: alma y sangre como conformadoras de la divinidad. Se gesta de esta manera un dios vinculado a la realidad biológica. Rosenberg y Ziegles elaboran aun más su teoría, para señalar que la vida es el vehículo por el que el hombre nórdico se comunica con un Ser Superior que lo trasciende.

En este mismo sentido Hitler (aclaro en este momento que el no aceptaba al 100% las ideas de Rosenberg y desde luego no es tema de este post la actitud de Hitler frente a las iglesias tradicionales) manifestó:

“El hombre ha descubierto en la naturaleza la maravillosa noción de ese ser todopoderoso cuya ley venera. Básicamente todo el mundo posee el sentimiento de ese poder absoluto al que llamamos Dios, es decir, el dominio de las leyes naturales a través de todo el universo”
La idea que se puede rastrear aquí es de nuevo un concepto nietzschiano: la voluntad, voluntad que somete las leyes naturales, y que cuando el individuo domina esas leyes se convierte en un ser superior.

El camino para llegar a ese estadio elevado –y sustituir la idea tradicional de Dios- será posible por medio del conocimiento científico, el único y autentico camino a seguir como manifiesta de nuevo Hitler:

“el hombre que vive en comunión con la naturaleza necesariamente se encontrará a sí mismo en oposición a las iglesias. Y esta es la razón por la que las iglesias se encaminan hacia su ruina: porque la ciencia está llamada a ganar”

Sobre el nombre que se le deba dar a ese Ser Supremo al que se accede tras el conocimiento no hay unidad en el seno del nazismo. Algunos como Goering mantienen el vocablo tradicional (“Dios ha creado las razas. El no quería la igualdad, y por eso nosotros nos oponemos vehementemente a cualquier intento de falsear esta unidad racial”) otros, como Hitler, prefieren referirse a la Providencia: “Tomo con seguridad de sonámbulo el camino que me ha llamado a seguir la Providencia”

Al usar esta analogía, Hitler estaba asegurando el apoyo de los sectores del cristianismo tradicional, y en virtud de ese uso se presentaba como una especie de mesías, que no dudaba en usar de paráfrasis del evangelio para captar la atención de los creyentes:

• Paráfrasis del Padrenuestro: “nuevo Reich alemán de grandeza, honor, poder, gloria y justicia” (10 febrero 1933)
• Paráfrasis de los evangelios: “No todos me veis, y yo no os veo a todos. ¡pero yo os siento y vosotros me sentís!... Ahora estamos juntos, estamos con él, y él está con nosotros, ahora somos Alemania” (10 mayo 1933)

Este mesianismo hitleriano proviene de algunos teólogos de corte völkisch que teorizaban desde finales del XIX acerca del líder perfecto y heroico:

“El autentico estadista reúne en su persona el paternalismo, el espíritu marcial y el carisma (…) Si su pueblo se multiplica y crece le proporciona espacio para vivir, congregando las fuerzas bélicas del pueblo. Y Dios le bendice enviándole buena fortuna y gloria (…) Sus victorias y sus derrotas no son accidentes humanos, sino disgnio divino” (Stapler, 1923 citado en Kershaw).

La relectura de la religión emprendida por los nazis encontró un punto controvertido a la hora de abordar la figura de Jesucristo. La nueva explicación debía satisfacer tanto a los líderes como a las masas de creyentes. Los teóricos del nazismo retomaron el discurso de ciertos teólogos nacionalistas del siglo XIX, época del Romanticismo o de la vuelta a los valores religiosos frente a la racionalidad ilustrada. En dicha época surgieron diversas teorías que “demostraban” que Jesucristo fue un personaje ario:

• Emile Burnouf: en La ciencia de las religiones (1885) defendía la tesis de un Jesucristo ario.

• H. S. Chamberlain, en Los fundamentos del siglo XIX (1899) hizo algo similar.

• Ersnt Haeckel afirmaba que los aspectos positivos de Jesucristo solo se explican si él era ario.

• Richard Wagner llegó a proponer toda una teoría poética acerca del paralelismo entre Cristo y Wotan.

• Lanz von Liebenfels redactó una serie de salmos ariocristianos destinados a probar esta conexión aria.

• Rudolf Gorsleben demostraba el carácter ario de Cristo al afirmar que el monograma de Cristo es similar a la runa Hagal.

Estas ideas ayudaron a formar la peculiar visión nazi y tanto Rosenberg, como Himmler y Hitler defendían una idea de Cristo ario (al que además hacían nacer de la relación entre María y un legionario romano). Hitler alegaba que Cristo era ario porque los judíos no hubieran entregado a los romanos a alguien de su pueblo. Y en la época de formación del NSDAP y sus primeros mítines gustaba de hacer comparaciones con Cristo -estableciendo así el carácter mesiánico de su papel- como esta de 1921:

“Ahora nosotros somos pequeños, pero hubo un tiempo en que también hubo un hombre solo en Galilea cuya doctrina domina hoy el mundo entero. No puedo imaginarme a Cristo de ningún otro modo más que rubio y con ojos azules, mientras que al demonio sólo con facha judía”

Con todo, la idea de un Jesucristo ario fue difícil de imponer en la sociedad

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Mario Zorro
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Cosmovisiòn Nazi

Mensaje por Mario Zorro » Lun Nov 07, 2005 12:44 am

Precisamente tengo una discusión tanto conmigo mismo como con unos compañerosde mi universidad... ¿Era el Nazismo catòlico o cristiano, ateo, o era como se señala una parodia de la religión?

He leido autores como León Degrelle y Michel Burleigh en el que hablan de un Nazismo ateo, pero en Mein Kampf se maneja una retorica religiosa, y mis compañeros me sostienen que era católico (además que se originó en Baviera, un lugar históricamente católico)?

Quien tiene la razón?

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Eckart
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Mensaje por Eckart » Mar Nov 08, 2005 7:21 am

Hola, Mario Zorro:
Lo cierto es que nunca gustaron a Hitler los privilegios de la Iglesia y la "hipocresía cristiana", registrado queda por numerosos testimonios y conversaciones. El nazismo era anti cristiano (y por lo tanto también anti católico y anti protestante). Hitler quería acabar poco a poco con la Iglesia, tarea que dejó para cuando acabara la guerra, pues era algo muy delicado que despertaba rechazo en la sociedad y que debía ser tratado sin prisas. En el invierno de 1935-36 se sucedieron en Baviera ataques contra las Iglesias que hicieron protestar seriamente a las autoridades eclesiásticas y a la población, protestas que llevaron a Hitler a apaciguar a sus activistas y aplazar la "lucha" para después de que se efectuasen todas las grandes empresas expansionistas que tenía por delante el gobierno en esos momentos.

Por otro lado, no se puede decir que el nazismo fuera ateo, pues la idea de un dios creador estaba presente, y Hitler creía en ello decididamente. La perfecta armonía del hombre con la tierra, los elementos y su pueblo, sería el medio de mantener una perfecta armonía con Dios. Personalmente, considero que Hitler no se preocupaba de este último concepto en exceso, si no que eran más bien los hombres como Himmler, Darré o Rosenberg quienes lo hacían, de ahí que las SS fueran el máximo exponente del culto pagano y del retorno a las tradiciones germánicas. Hitler simplemente abominaba de la Iglesia como institución poseedora de privilegios que era.

Saludos.

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Mensaje por David L » Dom Nov 27, 2005 5:33 am

Simplemente el poder pensar que Jesucristo podría haber sido judío sería más que suficiente para eliminar la religión del Nuevo Orden germánico, aparte de otros numerosos conceptos que acoge la Iglesia, como pueden ser la compasión por los más débiles, el rechazo del aborto independientemente de que la persona tenga algún defecto físico o psíquico, etc.. sólo con estos dos ejemplos, la Iglesia católica o protestante no tenía sitio en el Tercer Reich.

Un saludo.
Os dieron a elegir entre el deshonor y la guerra... elegisteis el deshonor y tendréis la guerra.

Winston Churchill a Chamberlain.

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