Bonjour,
Prosigo con el relato.
En el mar
El
Hood se bota el 22 de agosto de 1918 y enseguida entra en periodo de recibir su armamento trabajos que duran hasta bien terminada la I GM. En 1919 se pide que sea aumentado el blindaje horizontal, particularmente los pañoles de munición. Sin embargo esta modificación, de la cual es difícil decir si comenzó, no fue llevada adelante de modo satisfactorio. En enero de 1920 el adelanto de las obras autoriza a transferir el navío a
Rosyth Dockyard donde será completado. Del mismo modo, allí comenzará sus pruebas. En marzo de 1920 alcanza una velocidad que sobrepasa los 32 nudos en una milla de distancia, desarrollando más de 151.000 caballos (un poco menos de la capacidad total de su propulsión). En pruebas de larga duración, tras tres horas a plena potencia, sus máquinas logran cerca de 32 nudos. En su desplazamiento máximo (unas 44.600 t., inferior, no obstante, al desplazamiento del buque en orden de combate), puede alcanzar esa velocidad, aunque sobre un periodo de tiempo menor. El 14 de mayo de 1920 el navío pasa la revisión de recepción. Al día siguiente el
Hood es juzgado apto para el servicio y se integra en la
Royal Navy, bajo la designación de crucero de batalla. El nivel de sus blindajes, al parecer, no justificaba su clasificación como acorazado rápido, a pesar de que buen número de sus características (protecciones, armamento, desplazamiento, etc.) sobrepasan, con mucho, para algunos, las especificaciones originales de su concepción. Se constituye su primera tripulación, y comenzará el entrenamiento que concluirá con su entrada en el servicio efectivo. El día de su alistamiento en la marina, el 15 de mayo, se convierte en nave almirante,
Flag-Ship, de la escuadra de cruceros de batalla de la flota atlántica, puesto que ocupará hasta noviembre de 1923. Su larga carrera comienza.
El HMS Repulse en 1937
Fuente:
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El periodo de entreguerras
El 23 de noviembre de 1923 el
Hood acaba de dejar la escuadra del Atlántico de cruceros de batalla y reúne, como nave almirante, una flota particular conocida como “servicio especial” agrupación naval creada para realizar un crucero a lo largo de todo el mundo y mostrar, en el mayor número de lugares, el pabellón de la
Royal Navy. Con el
Repulse (que desaparecerá en 1941) y la primera escuadra de cruceros ligeros, recorre el mundo hasta septiembre de 1924, según un itinerario que totalizó unas 40.000 millas. Será visitado por más de 700.000 personas. Después de esta
“tournée” retoma su puesto en el Atlántico en enero de 1925. Destinado en esta zona hasta mayo de 1929 cuando debe pasar un amplio tiempo de indisponibilidad. Durante esta revisión del 17 de mayo al 12 de mayo de 1932, en
Porsmouth experimenta diversas reformas, ya indispensables, de modernización y modificaciones, como el embarque de piezas antiaéreas, cuya necesidad se hace sentir cada vez más. Se monta una catapulta a popa. Al final de este tiempo de importantes obras el Hood está destinado a la escuadra de cruceros de batalla de la
Home Fleet, de nuevo como
Flag-Ship. En septiembre de 1936 zarpa hacia el Mediterráneo donde se convierte en nave almirante de la flota destinada en este mar y con las que efectúa numerosas salidas. En el transcurso de este destino (en 1938) recibe un aumento de piezas antiaéreas, mientras que las piezas secundarias son desembarcadas.
En febrero de 1939 el
Hood deja el Mediterráneo hacia
Portsmouth donde le espera un tiempo en dique seco para trabajos de carenado del navío. Es en este momento donde se plantea con insistencia la necesidad de una amplia remodelación. Preocupa su probable vulnerabilidad frente a los ataques aéreos considerados cada vez más como un factor importante de riesgo para los buques de guerra. También se plante su resistencia en un eventual enfrentamiento contra navíos de línea recientes, a largas distancias cuando los proyectiles caen desde mucha altura, es juzgada insuficiente frente a la protección de sus puentes. Muchos consideran sus blindajes horizontales (y también los laterales) demasiado débiles, comparados con la construcción naval desde su entrada en servicio. La disposición de sus superestructuras a popa parece obsoleta o demasiado antigua, como su cofa y su puente de combate, a los que se proyecta modificar en profundidad. Se considera la sustitución de una parte de la propulsión para modernizarla, pero también para ponerla a punto después de largos años de servicio en el transcurso de los cuales el
Hood, orgullo de la marina británica, ha sido requerido más a menudo que otros grandes navíos de la
Royal Navy. Los acontecimientos iban a decidir de otro modo sellando todavía un poco más aún el destino trágico del gran navío.
Continuaré en otro momento. À suivre.
Fuente: Traducción y adaptación propias de un artículo de Patrick Toussain “Le croiseur de bataille Hood” en la revista Histoire de Guerre nº 35 de abril de 2003
À bientôt