Ucronías
Publicado: Jue Jun 16, 2005 7:48 pm
Los siguientes libros me han resultado especialmente interesantes.
Título: El último dia de la guerra
Autor: Christopher Priest
A veces, la realidad supera a la ficción. El caso del lugarteniente de Hitler, Rudolf Hess quien se arrojara en paracaídas sobre Escocia el 10 de mayo de 1941, es un magnífico ejemplo. Hess tenía intenciones de negociar, en forma personal, un armisticio entre Alemania e Inglaterra. ¿Quién hubiera imaginado que el amigo personal de Hitler, se arriesgaría a una misión tan importante, solo y poniendo en juego el futuro de Alemania? Se sabe que Hitler al enterarse, montó en cólera para dar paso luego al terror. No era insensato temer los interrogatorios a los que podría ser sometido Hess, con el fin de obtener información. Alemania planeaba invadir Rusia y no podía permitir que esa información caiga en manos de los ingleses. Inmediatamente se lanzó una campaña de desprestigio en contra de Hess aduciendo locura y otras enfermedades mentales.
Lo cierto es que lejos de lograr la paz, este hecho marcó el último bombardeo alemán sobre territorio británico permitiendo a estos últimos recuperar fuerzas y ánimos para continuar la guerra que terminó, como sabemos, con la derrota total del ejército alemán en 1945.
¿Por qué deja Alemania de bombardear Inglaterra cuando ya, según muchos historiadores, sólo le restaba dar "el toque de gracia"? Este es el contexto histórico que elige el original Christopher Priest para introducirnos en una lectura difícil de clasificar.
Stuart Gratton, historiador y escritor inglés decide investigar una rara pista con la que se topa leyendo los textos de Winston Churchill. Se trata del teniente Sawyer, aviador de la RAF que, misteriosamente, también está registrado como objetor de conciencia. ¿Cómo es esto posible? Este es el punto de partida de una serie de confusiones que irán armando el castillo sobre el que se sostiene El último día de la Guerra, ganadora de los premios Arthur Clarke y British Science Fiction 2003.
Escondida bajo la apariencia de una novela histórica esta ¿ucronía? nos revela cómo dos hermanos gemelos, desconocidos en la historia oficial, juegan sus papeles en estas historias construidas eficientemente por Priest. Y el plural no es gratuito. Estos gemelos, ganadores de una medalla en remo durante los juegos olímpicos de Berlín, enamorados de la misma chica y distanciados por motivos sentimentales e ideológicos, dan origen a historias alternativas, tan paralelas y reales, que se hace difícil creer que uno está leyendo ficción (es obvio que la guerra finalizó en 1945 y no en 1941 como se plantea en las primeras páginas de libro).
Hermanos gemelos, dobles, amores compartidos, son los ingredientes de esta excelente novela que confunde permanentemente al lector entre el género de CF y el más llano relato histórico. Pero la verdad sea dicha, Priest logra engañarnos al punto de hacernos revisar los libros de historia para volver a saber cuál es el mundo real. Su excelente prosa se ve conjugada sabiamente con los más originales recursos que nos introducen en un "real mundo de ficción". Los diarios personales de Göebbels, la trascripción de notas y documentos del gabinete del Gobierno del Reino Unido e incluso notas de periódicos documentadas que me he tomado el trabajo de buscar (infructuosamente), son hábilmente manipulados. Nos sumergen en lo más profundo de la política internacional de la segunda guerra mundial con la misma facilidad con que acostumbradamente nos introducimos en otros ámbitos. Para colmo, los gemelos Sawyer tienen mucho más que un par de copias de los mismos genes. Sus nombres de pila son, respectivamente, Jack y Joe, lo que los convierte en los indistinguibles J.L. y J.L. Sawyer. Esto que da origen a un sinnúmero de confusiones tanto para el lector como para los protagonistas. El mismísimo Winston Churchill se confunde en medio de la novela a uno con otro, desconcertando al lector, aunque finalmente, quizás sólo estuviera fingiendo…
Sin embargo, estas confusiones lejos de dificultar la lectura la enriquecen, manteniéndonos siempre al borde de una historia para caer en la otra y desvincularnos, mientras dure la lectura, de la tercera, la real.
Luciano Levín
Título: El hombre en el castillo
Autor: Philip K. Dick
Sinopsis: La Segunda Guerra Mundial ha terminado en 1947, siendo los Aliados derrotados por el Eje. Los Estados Unidos han sido invadidos y, consecuentemente divididos entre japoneses y alemanes, del mismo modo que Alemania tras su derrota en el "mundo real".
Un autor que se acerca a un escenario como el propuesto se enfrenta al problema de describir cómo sería el mundo si los nazis hubieran ganado la guerra, Dick opta por trazar a grandes rasgos la brutalidad nazi llevada al mundo entero, e incluso al espacio exterior, y elige centrarse preferentemente en la cotidianidad de los americanos derrotados dentro de una cultura japonesa victoriosa.
La acción se desarrolla en 1962 en la costa Este de los que otrora fueran los Estados Unidos, ahora PSA, Pacific States of America, zona de influencia japonesa. Los nativos son ciudadanos de segunda clase a pesar de que su cultura es admirada por los vencedores, a tal punto que uno de los mejores negocios es la venta de auténticas antigüedades americanas, como relojes de Mickey Mouse. Este mundo nos es descrito a través de las vidas de Robert Childan, Frank Frink, su ex-esposa Juliana, y Nobusuke Tagomi, saltando la narración constantemente de un personaje a otro.
La trama gira alrededor de tres ejes que se tocan por momentos: el comercio en torno a las antigüedades americanas y la valoración que los japoneses hacen de ella; la misión de Sr. Baynes, llegado de Europa, para entrevistarse, con fines aparentemente comerciales, con el Sr. Shinjiro Yatabe; y un extraño libro, censurado por los nazis, que describe a los Aliados victoriosos, escrita por un tal Hawthorne Abendsen, el Hombre en el Castillo al que alude el título de la novela.
Crítica: La novela se puede inscribir dentro de las llamadas "alternate histories" que describen mundos paralelos, del mismo modo que sucede con los X-Men, Batman o Superman y sus supuestas Gotham City y Metrópolis. Otro término que se usa para clasificar este tipo de historias es el de "ucronía". A diferencia de la utopía, que es un proyecto halagüeño pero irrealizable, una ucronía es una especulación histórica que intenta establecer el desarrollo que hubiera experimentado una cultura, sociedad, etc., de no haberse producido un hecho histórico determinante. Así, aplicando a la literatura el concepto de ucronía, surgen obras del estilo "qué hubiera pasado si..."
Ahora bien, El Hombre en el Castillo no se trata simplemente de una novela del tipo "qué hubiera pasado si nazis y japoneses ganaban la guerra", sino que se enmarca dentro de la gran pregunta recurrente en la literatura de Philip K. Dick: ¿qué es real?
En la novela podemos ver que hay tres realidades en juego: la de la novela, la que describe el libro de Hawthorne Abendsen, y la nuestra de lectores. ¿Cuál de ellas es verdadera? ¿Tienen todas el mismo nivel? Son preguntas difíciles de responder. Dick encuentra una salida por el lado de las decisiones morales individuales.
Otro elemento que llama la atención es el constante uso del I Ching por parte de los personajes. Dick reveló en una entrevista publicada en 1974, que él mismo lo usó como instrumento para la escritura de su novela cuando alguno de sus personajes se encontraba ante disyuntivas importantes, y que personalmente lo venía utilizando como guía para su vida desde 1961. Sin embargo, años más tarde criticó este método por el matiz que le imprimió al final de la novela, un final absolutamente inesperado.
Emmanuel Toledo
Título: Patria
Autor: Robert Harris
Patria se centra en un hipotético año 1964, un victorioso tercer Reich celebra el 75 aniversario de Adolf Hitler. En este escenario imaginario, Harris situa una acción policiaca que trasciende lo meramente criminal para terminar introduciendonos en la alta política. En ella se muestran los juegos de poder que se producirían entre las grandes potencias que controlarían el globo si el desembarco de Normandía hubiera fracasado.
Título: El cuerno de caza
Autor: Sarban
De noche, tendido en una cama de hospital, Alan Querdilion escucha las notas de un cuerno separadas por largos intervalos, cada una tan solitaria en la noche oscura y el hondo silencio como una vela solitaria en un ancho mar. Desde entonces, esta temerosa y eficaz imagen, encontrada día y noche, cerca o lejos, nunca reaparece sin estremecernos. En sus arcaicas asociaciones, sus fastuosas evocaciones, su representación del descuidado placer del cazador, y el terror de la presa, se suma todo el contenido y la atmósfera de la novela, una rara combinación de visiones de vigilia y pesadillas. Tan conmovedor es todo esto que siento siempre un leve escalofrío cuando algo me recuerda la inocente canción inglesa que ha inspirado el título.
Kingsley Amis
Todos ellos son ucronías que giran alrededor de lo que podria haber ocurrido si la SGM hubiese finalizado de otro modo.
¿Alguien ha leido o sabe de otros libros con un planteamiento similar?
Título: El último dia de la guerra
Autor: Christopher Priest
A veces, la realidad supera a la ficción. El caso del lugarteniente de Hitler, Rudolf Hess quien se arrojara en paracaídas sobre Escocia el 10 de mayo de 1941, es un magnífico ejemplo. Hess tenía intenciones de negociar, en forma personal, un armisticio entre Alemania e Inglaterra. ¿Quién hubiera imaginado que el amigo personal de Hitler, se arriesgaría a una misión tan importante, solo y poniendo en juego el futuro de Alemania? Se sabe que Hitler al enterarse, montó en cólera para dar paso luego al terror. No era insensato temer los interrogatorios a los que podría ser sometido Hess, con el fin de obtener información. Alemania planeaba invadir Rusia y no podía permitir que esa información caiga en manos de los ingleses. Inmediatamente se lanzó una campaña de desprestigio en contra de Hess aduciendo locura y otras enfermedades mentales.
Lo cierto es que lejos de lograr la paz, este hecho marcó el último bombardeo alemán sobre territorio británico permitiendo a estos últimos recuperar fuerzas y ánimos para continuar la guerra que terminó, como sabemos, con la derrota total del ejército alemán en 1945.
¿Por qué deja Alemania de bombardear Inglaterra cuando ya, según muchos historiadores, sólo le restaba dar "el toque de gracia"? Este es el contexto histórico que elige el original Christopher Priest para introducirnos en una lectura difícil de clasificar.
Stuart Gratton, historiador y escritor inglés decide investigar una rara pista con la que se topa leyendo los textos de Winston Churchill. Se trata del teniente Sawyer, aviador de la RAF que, misteriosamente, también está registrado como objetor de conciencia. ¿Cómo es esto posible? Este es el punto de partida de una serie de confusiones que irán armando el castillo sobre el que se sostiene El último día de la Guerra, ganadora de los premios Arthur Clarke y British Science Fiction 2003.
Escondida bajo la apariencia de una novela histórica esta ¿ucronía? nos revela cómo dos hermanos gemelos, desconocidos en la historia oficial, juegan sus papeles en estas historias construidas eficientemente por Priest. Y el plural no es gratuito. Estos gemelos, ganadores de una medalla en remo durante los juegos olímpicos de Berlín, enamorados de la misma chica y distanciados por motivos sentimentales e ideológicos, dan origen a historias alternativas, tan paralelas y reales, que se hace difícil creer que uno está leyendo ficción (es obvio que la guerra finalizó en 1945 y no en 1941 como se plantea en las primeras páginas de libro).
Hermanos gemelos, dobles, amores compartidos, son los ingredientes de esta excelente novela que confunde permanentemente al lector entre el género de CF y el más llano relato histórico. Pero la verdad sea dicha, Priest logra engañarnos al punto de hacernos revisar los libros de historia para volver a saber cuál es el mundo real. Su excelente prosa se ve conjugada sabiamente con los más originales recursos que nos introducen en un "real mundo de ficción". Los diarios personales de Göebbels, la trascripción de notas y documentos del gabinete del Gobierno del Reino Unido e incluso notas de periódicos documentadas que me he tomado el trabajo de buscar (infructuosamente), son hábilmente manipulados. Nos sumergen en lo más profundo de la política internacional de la segunda guerra mundial con la misma facilidad con que acostumbradamente nos introducimos en otros ámbitos. Para colmo, los gemelos Sawyer tienen mucho más que un par de copias de los mismos genes. Sus nombres de pila son, respectivamente, Jack y Joe, lo que los convierte en los indistinguibles J.L. y J.L. Sawyer. Esto que da origen a un sinnúmero de confusiones tanto para el lector como para los protagonistas. El mismísimo Winston Churchill se confunde en medio de la novela a uno con otro, desconcertando al lector, aunque finalmente, quizás sólo estuviera fingiendo…
Sin embargo, estas confusiones lejos de dificultar la lectura la enriquecen, manteniéndonos siempre al borde de una historia para caer en la otra y desvincularnos, mientras dure la lectura, de la tercera, la real.
Luciano Levín
Título: El hombre en el castillo
Autor: Philip K. Dick
Sinopsis: La Segunda Guerra Mundial ha terminado en 1947, siendo los Aliados derrotados por el Eje. Los Estados Unidos han sido invadidos y, consecuentemente divididos entre japoneses y alemanes, del mismo modo que Alemania tras su derrota en el "mundo real".
Un autor que se acerca a un escenario como el propuesto se enfrenta al problema de describir cómo sería el mundo si los nazis hubieran ganado la guerra, Dick opta por trazar a grandes rasgos la brutalidad nazi llevada al mundo entero, e incluso al espacio exterior, y elige centrarse preferentemente en la cotidianidad de los americanos derrotados dentro de una cultura japonesa victoriosa.
La acción se desarrolla en 1962 en la costa Este de los que otrora fueran los Estados Unidos, ahora PSA, Pacific States of America, zona de influencia japonesa. Los nativos son ciudadanos de segunda clase a pesar de que su cultura es admirada por los vencedores, a tal punto que uno de los mejores negocios es la venta de auténticas antigüedades americanas, como relojes de Mickey Mouse. Este mundo nos es descrito a través de las vidas de Robert Childan, Frank Frink, su ex-esposa Juliana, y Nobusuke Tagomi, saltando la narración constantemente de un personaje a otro.
La trama gira alrededor de tres ejes que se tocan por momentos: el comercio en torno a las antigüedades americanas y la valoración que los japoneses hacen de ella; la misión de Sr. Baynes, llegado de Europa, para entrevistarse, con fines aparentemente comerciales, con el Sr. Shinjiro Yatabe; y un extraño libro, censurado por los nazis, que describe a los Aliados victoriosos, escrita por un tal Hawthorne Abendsen, el Hombre en el Castillo al que alude el título de la novela.
Crítica: La novela se puede inscribir dentro de las llamadas "alternate histories" que describen mundos paralelos, del mismo modo que sucede con los X-Men, Batman o Superman y sus supuestas Gotham City y Metrópolis. Otro término que se usa para clasificar este tipo de historias es el de "ucronía". A diferencia de la utopía, que es un proyecto halagüeño pero irrealizable, una ucronía es una especulación histórica que intenta establecer el desarrollo que hubiera experimentado una cultura, sociedad, etc., de no haberse producido un hecho histórico determinante. Así, aplicando a la literatura el concepto de ucronía, surgen obras del estilo "qué hubiera pasado si..."
Ahora bien, El Hombre en el Castillo no se trata simplemente de una novela del tipo "qué hubiera pasado si nazis y japoneses ganaban la guerra", sino que se enmarca dentro de la gran pregunta recurrente en la literatura de Philip K. Dick: ¿qué es real?
En la novela podemos ver que hay tres realidades en juego: la de la novela, la que describe el libro de Hawthorne Abendsen, y la nuestra de lectores. ¿Cuál de ellas es verdadera? ¿Tienen todas el mismo nivel? Son preguntas difíciles de responder. Dick encuentra una salida por el lado de las decisiones morales individuales.
Otro elemento que llama la atención es el constante uso del I Ching por parte de los personajes. Dick reveló en una entrevista publicada en 1974, que él mismo lo usó como instrumento para la escritura de su novela cuando alguno de sus personajes se encontraba ante disyuntivas importantes, y que personalmente lo venía utilizando como guía para su vida desde 1961. Sin embargo, años más tarde criticó este método por el matiz que le imprimió al final de la novela, un final absolutamente inesperado.
Emmanuel Toledo
Título: Patria
Autor: Robert Harris
Patria se centra en un hipotético año 1964, un victorioso tercer Reich celebra el 75 aniversario de Adolf Hitler. En este escenario imaginario, Harris situa una acción policiaca que trasciende lo meramente criminal para terminar introduciendonos en la alta política. En ella se muestran los juegos de poder que se producirían entre las grandes potencias que controlarían el globo si el desembarco de Normandía hubiera fracasado.
Título: El cuerno de caza
Autor: Sarban
De noche, tendido en una cama de hospital, Alan Querdilion escucha las notas de un cuerno separadas por largos intervalos, cada una tan solitaria en la noche oscura y el hondo silencio como una vela solitaria en un ancho mar. Desde entonces, esta temerosa y eficaz imagen, encontrada día y noche, cerca o lejos, nunca reaparece sin estremecernos. En sus arcaicas asociaciones, sus fastuosas evocaciones, su representación del descuidado placer del cazador, y el terror de la presa, se suma todo el contenido y la atmósfera de la novela, una rara combinación de visiones de vigilia y pesadillas. Tan conmovedor es todo esto que siento siempre un leve escalofrío cuando algo me recuerda la inocente canción inglesa que ha inspirado el título.
Kingsley Amis
Todos ellos son ucronías que giran alrededor de lo que podria haber ocurrido si la SGM hubiese finalizado de otro modo.
¿Alguien ha leido o sabe de otros libros con un planteamiento similar?