SONDERKOMMANDO BLAICH
En vísperas de la capitulación de Francia la colonia de Chad fue el primer territorio de ultramar de Francia en dar respuesta al llamamiento lanzado por el general Charles de Gaulle. El gobernador Félix Eboué proclamó el 03 de julio 1940 a la colonia como parte de la Francia Libre, decidido a continuar la guerra contra el Eje a pesar de la capitulación de Francia. A partir de entonces el Chad se convirtió en una base segura para las incursiones de las fuerzas francesas y los británicos del Long Range Desert Group contra las guarniciones italianas en el sur de Libia (acciones que culminaron el 1 de marzo 1941 con la captura del oasis de Kufra), el aeropuerto de la capital Fort Lamy también se convirtió en una parada intermedia a lo largo de la ruta de reabastecimiento en vuelo entre la base aliada en El Cairo y puertos del África occidental.
Entre 1940 y 1941, las fuerzas especiales británicas habían estado causando estragos detrás de las líneas del eje, muchas veces usando como apoyo la base de Fort Lamy, asolando aeródromos y llevando a cabo tareas vitales de reconocimiento, que ayudaron a los mandos británicos a diseñar sus líneas defensivas y a planear incursiones contra las líneas de aprovisionamiento alemanas.
Theo Blaich era un aventurero alemán, propietario de una plantación en Africa que se hábia unido a la Wehrmacht en 1.939. Conocedor de la situación en Africa reconocía la importancia de Fort Lamy como punto de aprovisionamiento, transporte y organización de las tropas aliadas desde la costa oeste de Africa hacia el Nilo. Así pues voló en su avión particular, un Messerschmitt BF 108 Taifun hasta el Cuartel General del Eje en Africa para proponer la captura de Fort Lamy. Su sugerencia fue trasladada a Berlin, donde no suscitó ningún apoyo. Tras la negativa propuso un bombardeo masivo de Fort Lamy hasta su total destrucción. Esta segunda propuesta también fue rechazada. Incansable en su proyecto, se intrevistó con Erwin Rommel, quién aprobó la idea y le remitió al Fliegerführer Afrika. Rommel sabía que la posición era de la mayor importancia estratégica para los Aliados, al ser el enclave principal tierra adentro de suministros provenientes de los puertos y yacimientos petrolíferos de la costa occidental africana. Era también un depósito de suministros vital para las fuerzas especiales aliadas. Rommel no solo pensó que la idea era buena en sí, sino que además, valdría para distraer a los aliados en su inminente ofensiva del frente libio programada para el 21 de Enero de 1.942, así que la operación se programó para realizarla esa misma fecha.
Foto: Messerschmitt BF 108 Taifun del Capitan Blaich
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Sin embargo, una operación de esas características no era fácil para la Luftwaffe en Africa. el puesto avanzado de Fort Lamy en el Chad estaba a unos 2,500 kilómetros de las bases de la Luftwaffe destacadas más al sur en África. Los recursos no eran los más apropiados y no había medios de sobra como para embarcarse en una aventura de semejante calibre, así que se optó por una solución de compromiso. Se constituyó el llamado Sonderkommando Blaich, una pequeña unidad formada por un bombardero He-111, un bombardero italiano Savoia- Marchetti S.M.81 de apoyo y un caza, el Bf-108 de Blaich.
Los hombres que conformaban la pequeña unidad eran los siguientes:
Capitan Theo Blaich, piloto del Taifun
Teniente Franz Bohnsack, piloto del He-111
Sargento Mayor Heinrich Geisseler, ingeniero
Sargento Wolfgang Wichmann, operador de radio
Teniente Fritz Dettmann, corresponsal de guerra
Mayor Roberto Conde Vimercati- San Severino, piloto del Savoia
Foto: Bf-108 y He-111 del Sonderkommando Blaich
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El 20 de enero de 1942, el He-111 y el Bf-108 despegaron hacia el oasis de Hon, una base italiana en el centro de Libia. Allí les esperaba el Mayor Vimercati, piloto italiano y experto conocedor del desierto del Sahara. Una vez repostados, el He-111 fue cargado con 16 bombas que totalizaban 4,500 kg de explosivos, el Savoia fue cargado con bidones de combustible y agua, ya que serviría de apoyo logístico para la misión. Por la tarde llegaron a una zona apta para el despegue y aterrizaje de aviones que tiempo atrás había sido descubierta por el Mayor Vimercati y que había bautizado como campo uno. Una vez allí repostaron el He-111 y el Bf-108 y los prepararon para el día siguiente. El Mayor italiano se uniría a la tripulación del He-111 para hacer de navegante y guía de la expedición, El Savoia quedaría en el Campo uno con combustible y viveres esperándoles al regreso.
Foto: Blaich y Vimercati junto al He-111
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El 21 de enero a las 8.00 h, la pequeña fuerza despegó hacia lo desconocido. A pesar de haber sido calculadas las necesidades de combustible, el mal tiempo hizo utilizar más combustible de lo esperado (ver nota al final). Hacia el mediodía alcanzaron el lago Chad, y hacia las 14.30 h Fort Lamy apareció en el horizonte con su aeródromo y sus gigantescos depósitos de combustible para el ejército británico. Para sorpresa de la tripulación, no existía defensa aérea organizada en Fort Lamy, y fueron capaces de dejar caer apuntando cuidadosamente sus 16 bombas, 10.000 libras (4.500 kg) de explosivos, sin obstáculos. Las fuerzas francesas estaban demasiado sorprendidos para organizar cualquier defensa aérea y miles de galones de combustible y derivados de petróleo fueron totalmente destruidos y, posiblemente, unos diez aviones que estaban estacionados junto a los depósitos. El He-111 dio una vuelta para comprobar el resultado. Gigantescas columnas de humo se alzaron hacia el cielo. Todo el combustible acumulado se consumía en el aire, unos 400.000 litros de gasolina de aviación, asi como varios tipos de aceites y lubricantes. Aviones estacionados ardían en el suelo. Un solo bombardero había obtenido un gran éxito, Fort Lamy quedaba fuera de combate para unas cuantas semanas.
Tras observar Fort Lamy en llamas, el He-111 y el Bf-108 del Sonderkommando Blaich pusieron morro al norte entre un diluvio de fuego antiaéreo que comenzaban ahora a desplegar los sorprendidos defensores.
Foto: Fort Lamy en llamas
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Tras cuatro horas de vuelo de regreso, sobre las 18.30 comenzó a anochecer, prácticamente no les quedaba combustible y el mal tiempo les había desorientado, Campo Uno no se veía por ninguna parte. El piloto informó a Blaich que era necesario aterrizar. El He-111 se posó suavemente en el desierto, seguido por Blaich y el radio operador, Wichmann, comenzó inmediatamente a enviar un SOS radiando la presunta posición, unos 120 km al sur de Agedabia.
Los intentos de contactar con el Mando Aéreo “Africa” no obtuvieron resultados. Pero Wichmann perseveró y finalmente logró establecer contacto 48 horas más tarde. El general Frohlich ordenó que se llevara a cabo una operación de rescate inmediatamente, pero una tormenta de arena evitó que las tripulaciones pudieran despegar. La tormenta afectaba también a la posición del Sonderkommando Blaich.
Cada uno de los seis hombres de Blaich disponía de una ración de un cuarto de litro de agua dos veces al día. El domingo, 25 de enero, Blaich dio un cuarto de litro extra a cada miembro como “sorpresa del domingo”. Pero las horas seguían pasando, y el lunes finalizaba sin que se hubiera observado ni un solo avión.
Foto: Repostaje en el desierto
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El martes 27 de enero, se repartió la última ración de agua. Exactamente 3 minutos más tarde, el teniente Bohnsack divisió un avión. Después de una intensa búsqueda en la que participaron varios aparatos, un Caproni Ca 309 italiano apareció en el horizonte, se lanzaron bengalas al cielo que fueron vistas por este y aterrizó junto a ellos. El operador de radio, Skorzone, saltó del avión y corrió hacia los hombres de Blaich con cantimploras de agua y suministros de comida.
Tras comunicar la posición del Sonderkommando Blaich al mando aéreo, al día siguiente llegó un Ju-52 cargado de combustible con el que pudieron regresar al Campo uno y de allí al oasis de Hon.
Nota: Existe una discrepancia entre los diversos autores que han escrito sobre este tema. Algunos dicen que sobre Fort Lamy volaron el He-111 y el Bf-108, a mi entender esto tiene una pega, y es que el Bf 108 tenía una autonomía de 1,000 Km, aunque supongo que con depósitos auxiliares se podría haber solventado el asunto, no se si este modelo sería apropiado para realizarle los ajustes necesarios. Otros autores dicen que Blaich dejó el Bf-108 en el Campo uno y se unió a la tripulación del He-111, esto tiene otra pega, seis hombres en un He-111, con los depósitos a tope, mas 4,500 kg de bombas, mas agua y viveres, no sé, yo me decanto por la modificación del Bf-108 para incorporarle depósitos auxiliares, lanzables o no. Ahí queda la duda.
Fuentes:
The Foxes of the Desert, Paul Carell. 1958
http://www.gehm.es/.../el-sonderkommand ... amy-en-el-
http://www.desertwar.net/sonderkommando-blaich.html
http://www.wikipedia.org/wiki/Sonderkommando_Blaich
Un cordial saludo a todos!
